La organización estaba liderada por dos familias cuyos principales miembros se encontraban en Brasil y Paraguay, desde donde gestaron toda la operativa de la importación de la cocaína, informó la Policía y la Guardia Civil, cuerpos que levaron a cabo la operación.

18 de enero de 2021, 15:19 PM
18 de enero de 2021, 15:19 PM

Agentes españoles desarticularon una red que introducía grandes cantidades de cocaína en España procedente de Sudamérica, bajo la apariencia de una empresa de importación de carbón vegetal, detuvieron a doce personas y aprehendieron 2.065 kilos de esta droga.

La organización estaba liderada por dos familias cuyos principales miembros se encontraban en Brasil y Paraguay, desde donde gestaron toda la operativa de la importación de la cocaína, informó este lunes la Policía y la Guardia Civil, cuerpos que levaron a cabo la operación.

La red actuaba en los principales puertos españoles, por lo que la actuación policial se desarrolló en siete provincias, incluida Madrid. Los miembros de esta organización criminal creaban empresas con la intención de simular un tráfico de mercancías legal con productos como carbón, arroz, melaza o sanitarios.

Además, contaban con testaferros en todas esas empresas para ocultar su verdadera identidad y obtener abundantes beneficios tras la introducción de la droga. La organización comenzó su actividad a través del Puerto de Barcelona (noreste), por donde introdujo decenas de contenedores de carbón vegetal, según la fuente, pero debido a los problemas logísticos con el carbón almacenado y las limitaciones derivadas de la pandemia del coronavirus, tuvo que cerrar esa vía de entrada y trasladó su infraestructura y logística al puerto de Algeciras, en el surde España.

La alta especialización de esta red llevó a los investigadores a intervenir más de cien líneas telefónicas y a analizar casi 200 contenedores importados desde los puertos de Brasil y Paraguay hasta España. En uno de ellos, procedente de Paraguay, que llegó al puerto de Algeciras, hallaron 63 fardos que transportaban 2.065 kilogramos de cocaína, ocultos entre 40 toneladas de carbón.