El miércoles, unos 150 policías allanaron en la capital alemana varios negocios y una mezquita

24 de octubre de 2020, 14:55 PM
24 de octubre de 2020, 14:55 PM

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, condenó una redada policial en una mezquita en la capital alemana, Berlín, a principios de esta semana, como racista e islamófoba. La operación policial, llevada a cabo durante las oraciones matutinas fue "obviamente alimentada por el racismo y la islamofobia, que cada día acerca a Europa un poco más a la oscuridad de la Edad Media, y desconoce por completo la libertad de creencias", tuiteó durante la noche el mandatario turco.

El miércoles, unos 150 policías allanaron en la capital alemana varios negocios y una mezquita sospechosa de haber reclamado de forma fraudulenta los subsidios aprobados para paliar los efectos económicos de la pandemia de coronavirus, e incautaron 7.000 euros en efectivo, dispositivos de almacenamiento de datos, computadoras y archivos.

Los fiscales dijeron que la redada estaba dirigida a tres sospechosos que habían solicitado 70.000 euros, de los cuales se habían abonado ya 45.000. Al parecer, parte del dinero se ingresó en la cuenta de la mezquita del barrio de Kreuzberg. Erdogan dijo que Turquía continuará luchando contra todas las formas de racismo, xenofobia e islamofobia en cualquier parte del mundo.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía calificó la operación como "otro ejemplo más del trato sesgado, discriminatorio y desproporcionado hacia la comunidad musulmana, cuyo número se acerca a los cinco millones en Alemania". 

"Las autoridades alemanas deben comprender el hecho de que los musulmanes son una parte integral de Alemania y poner fin a su exclusión y marginación", dijo el día después de la redada. (dpa/focus)