El castigo que el G7 pretende imponer a Moscú, que no fue revelado, sería "diferente" a otras sanciones aprobadas anteriormente.

11 de diciembre de 2021, 20:19 PM
11 de diciembre de 2021, 20:19 PM

Las democracias más desarrolladas del mundo están listas para imponer sanciones "significativas" y "disuasorias" contra Rusia si ese país realiza cualquier incursión militar en territorio de la vecina Ucrania, informaron este sábado sus autoridades.

Los ministros de Exteriores del G7 (el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Estados Unidos, Japón y Canadá, más la Unión Europea) se reúnen este fin de semana en Liverpool (norte de Inglaterra) con el interés puesto sobre todo en la situación en la frontera de Ucrania y en una respuesta unificada al desafío chino.

El castigo que el G7 pretende imponer a Moscú si trata de invadir el país vecino sería "diferente" a otras sanciones aprobadas anteriormente y "significativo tanto política como económicamente", según fuentes diplomáticas.

Las potencias occidentales negocian sobre cuáles serían esas represalias, que no serán reveladas de ningún modo antes de una posible ofensiva, pues "las sanciones funcionan mejor si quienes las van a sufrir no saben cuáles son ni en que consistirán", de acuerdo con las mismas fuentes.

En la mente de todos está la paralización de un proyecto clave: el gasoducto ruso Nord Stream 2, que aún no ha comenzado a operar y que tiene como objetivo transportar gas de Rusia a Alemania.

Ese castigo, por el que aboga el presidente estadounidense, Joe Biden, sería un golpe duro para Moscú, pero al mismo tiempo también penalizaría a la economía europea.

Comunicado conjunto sobre crisis en Ucrania

Pese a todo, las fuentes subrayaron que hay una verdadera convergencia dentro del G7 sobre la necesidad de que las sanciones sean lo suficientemente contundentes para tener efecto sobre el presidente ruso, Vladímir Putin.

"No se ha descartado ninguna opción sobre la mesa", agregaron.

De modo más general, los países del grupo consideran que en el mundo hoy no puede permitirse que haya amenazas externas sobre las fronteras de ningún país ni que fuerzas exteriores obliguen a un gobierno a adoptar un camino en particular.

La preocupación del G7 por la crisis en Ucrania se verá reflejada en un comunicado conjunto que se difundirá por separado de la declaración oficial de la reunión, para que no quede diluido entre otras cuestiones.

Antes de comenzar la reunión, los jefes de la diplomacia británica, Liz Truss, y estadounidense, Antony Blinken, mantuvieron un encuentro bilateral en el que reiteraron las "graves consecuencias" que acarrearía una eventual incursión de tropas rusas.

"Ambos dijeron que cualquier incursión por Rusia sería un error estratégico para el que habría serias consecuencias", señaló un portavoz del Ministerio británico de Exteriores.