Una especie de araña presente en algunos países asiáticos podría tener la capacidad de manipular el tipo de luz de las luciérnagas macho atrapadas en la tela, lo que le ayudaría a atraer a otras luciérnagas hacia esta.

20 de agosto de 2024, 9:41 AM
20 de agosto de 2024, 9:41 AM

Un equipo científico ha observado que la araña Araneus ventricosus es capaz de manipular a las luciérnagas macho que quedan atrapadas en su tela para que emitan una luz especial para atraer a otras presas, según se detalla en un estudio publicado este lunes (19.08.2024) por la revista Current Biology.

Los machos de este tipo de luciérnaga (Abscondita terminalis) tienen dos órganos productores de luz o linternas, que emiten varios destellos, mientras que las hembras solo uno que produce una sola señal luminosa.

Los investigadores observaron que en las telas de araña de la A. ventricosus, una especie no venenosa para vertebrados y que es común en China, Japón y Corea, las luciérnagas atrapadas son solo machos y nunca hembras.

Un engaño para los machos

Este arácnido practica una "comunicación interespecífica engañosa", atrapando a machos a los que "predisponen para emitir señales bioluminiscentes" que imitan las señales típicamente emitidas por las hembras para atraer a los machos, escriben los investigadores, tras sus observaciones sobre el terreno.

El resultado es que las luciérnagas macho atrapadas emiten señales falsas que atraen a más luciérnagas macho a la red, resumen los investigadores.

El trabajo señala que la telaraña capturaba más luciérnagas macho cuando la araña estaba presente en comparación con cuando estaba ausente.

Similitud del destello con luciérnagas hembras libres

Además, descubrieron que las señales que emitían las luciérnagas macho en las telarañas con arañas se parecían mucho más a las señales de las hembras libres, es decir, de un solo pulso con una sola de sus linternas, no con las dos.

Las luciérnagas macho atrapadas rara vez atraían a otros machos cuando estaban solas en la red, por lo que no se considera que alteren sus destellos como señal de socorro.

El equipo consideró que al detectar las señales bioluminiscentes de las luciérnagas macho atrapadas, la araña "despliega un procedimiento especializado de manipulación de presas que implica repetidos ataques con picaduras".

Más estudios para determinar cómo funciona la manipulación

Hasta el momento no ha sido posible determinar que es el veneno de la araña o solo la picadura la que provoca los cambios en el patrón de parpadeo de los machos atrapados, por ello el equipo indica que son necesarios ulteriores estudios.

Además, sugieren que puede haber muchos más ejemplos no descritos aún en la naturaleza en los que los depredadores puedan utilizar el mimetismo para manipular el comportamiento de sus presas, basándose en señales comunicativas que pueden incluir sonidos, feromonas u otros medios.

JU (efe, Science Alert, Current Biology)