Moscú confirmó haber lanzado nuevos ataques "masivos" con armas de largo alcance, que habrían alcanzado "todos los objetivos".

12 de octubre de 2022, 9:45 AM
12 de octubre de 2022, 9:45 AM

El presidente Volodimir Zelenski instó el martes a las potencias occidentales a ayudar a Ucrania a tender un "escudo antiaéreo", tras una nueva salva de bombardeos perpetrados por Rusia en las últimas horas.

Zelenski dijo ante una cumbre telemática del G7 de las economías más avanzadas del planeta que "millones de personas estarán agradecidas" por una ayuda de ese tipo, y advirtió de que Moscú tiene aún "medios para intensificar su ofensiva".

Estados Unidos prometió incrementar los envíos de defensas antiaéreas a Ucrania y Alemania anunció que entregará un primer equipo de misiles antiaéreos Iris-T, capaces de proteger una ciudad entera.

La cumbre del G7 (Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Japón) fue convocada en plena escalada bélica, con bombardeos el lunes en varias ciudades ucranianas, incluida Kiev, la capital.

Rusia anunció este martes, horas antes del inicio de la cumbre occidental, que lanzó nuevos bombardeos "masivos".

Las autoridades de la región ucraniana de Leópolis (oeste) indicaron que al menos tres misiles rusos impactaron en infraestructuras energéticas. El alcalde de la capital regional epónima afirmó que alrededor de un tercio de la ciudad se quedó sin electricidad.

El Ministerio ruso de Defensa confirmó los ataques de este martes, y explicó que había usado armas de largo alcance de alta precisión y que "se alcanzaron todos los objetivos".

El Ministerio ucraniano de Defensa indicó que Rusia lanzó el lunes 83 misiles, de los que fueron derribados 52.

Los líderes del G7 avisaron además a Bielorrusia de que su plan de desplegar tropas conjuntas con Rusia constituye una nueva forma de "complicidad" con la invasión de Ucrania, lanzada en febrero por el presidente ruso, Vladimir Putin.

El G7 añadió que pondrá todo su empeño para que "Putin y aquellos que sean responsables rindan cuentas" por los últimos bombardeos.

Putin adujo que los bombardeos eran una respuesta al ataque "terrorista" contra el puente que conecta el territorio ruso con la península de Crimea (anexionada por Moscú en 2014), cometido según él por las fuerzas ucranianas.

Según la ONU, los bombardeos rusos del lunes "podrían haber violado" el derecho de la guerra.