Las lluvias perturbaron la siembra de las 240.000 hectáreas planeadas entre Minero y Peta Grande. Se cubrió 155.000 y se perdieron 24.000 por inundación de campos. Cae área sembrada de sorgo y repunta de maíz 

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29 de enero de 2018, 4:00 AM
29 de enero de 2018, 4:00 AM

Al filo del cierre de la siembra de la campaña de verano, las estimaciones de proyección del sector oleaginoso reflejan un débil desempeño en las labores de campo en soya y sorgo. El maíz consigue un repunte en superficie cultivada en el departamento.  


El último reporte de estimaciones de siembra de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) del 19 del presente mes describe que de las 1.035.000 hectáreas proyectadas, a una semana de cerrarse el ciclo de diseminación de semillas, solo se han alcanzado 930.000 hectáreas, incluyendo la zona este e integrada. En 2017 este cultivo cerró con 993.000 hectáreas plantadas. 


De las 699.000 hectáreas proyectadas en la zona este se cubrió 687.000 y en la zona integrada, de las 336.000 hectáreas planificadas, tan solo se alcanzó 243.000 hectáreas. El Puente y Guarayos –zona este– y Minero-Peta Grande y Montero-Yapacaní –área integrada– son las zonas que no cumplieron las expectativas de siembra. 


En el caso del sorgo –culminó el ciclo de plantación– se evidencia una disminución. De las 45.000 hectáreas proyectadas se lograron cubrir 32.000. En 2017, el área cultivada de este grano en la campaña agrícola de verano fue 51.500. 


 El mayor deterioro de proyección de siembra se dio en  el área sur integrada (Charagua, Gutiérrez, Lagunillas y Camiri). De las 7.500 hectáreas planeadas apenas se lograron cubrir 3.500. 


El salto de estimación de producción se dio en el maíz. De las 133.000 hectáreas programadas se sembraron 108.000, extensión que supera las 103.000 plantadas en la campaña de siembra de 2017. 


En este cultivo las expectativas se mantienen porque el porcentaje de siembra ronda un 81% del área programada. Aún no cerró la plantación del grano amarillo en la zona sur integrada, que es altamente productiva. De las 28.000 hectáreas, se plantaron 10.000. 
Lectura sectorial  


Para el gerente de Planificación de Anapo, Jaime Hernández, los efectos adversos de las lluvias y la falta de garantía de libertad plena para exportar el excedente de granos comprometen un año más  la producción y el ansiado crecimiento de la frontera agrícola en el departamento de Santa Cruz. 


En el caso de la soya, Hernández indicó que las lluvias frenaron la siembra en la zona que comprende Minero y Peta Grande. De las 240.000 hectáreas proyectadas se alcanzaron 155.000 y de esta extensión 24.000 se perdieron por riadas e inundación de campos. 


No obstante, dijo que los agricultores han comenzado a resembrar soya  en las áreas que resultaron afectadas por las lluvias. Empero, Hernández no cree que se llegue a las cifras proyectadas en la presente siembra. 


Desde la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) se indicó que en la presente semana se tendrá una evaluación de resultados de los cultivos que se siembran en esta temporada. Además de soya, maíz y sorgo se siembra arroz, algodón, sésamo y caña de azúcar.


Desde la mirada del presidente de la Cámara Agropecuaria del Pequeño Productor del Oriente (Cappo), Isidoro Barrientos, los pequeños productores arroceros de Guarayos y de Yapacaní han migrado al cultivo de soya. Cree que el repunte de área sembrada de maíz pudo haber sido mayor, pero que el contrabando del grano amarillo de Argentina tumbó los precios y desalienta la producción. 


A juicio de Barrientos, mientras no se autorice el acceso a la biotecnología para mejorar la productividad de los campos de producción el despegue de  la frontera agrícola cruceña no se dará. 


Desde la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de las cuatro provincias del norte de Santa Cruz, la ejecutiva Deisy Choque indicó que las lluvias van a mermar las expectativas de producción de soya y de arroz.

 

Apuntes 

Referencias 
El área cultivada de cereales y oleaginosas en verano 2017 alcanzó 1,2 millones de hectáreas, un incremento de 43.200 hectáreas (3,58%) respecto a 2016. La recuperación fue impulsada por los cultivos de sorgo, maíz y soya.


Reforma productiva     
Según la Cappo, en Guarayos y en Yapacaní muchos productores de arroz se han volcado a la producción del ‘grano de oro’. 


Producción comprometida   
Productores del norte advierten impactos negativos en cultivos de arroz y riesgo de provisión del grano en el segundo semestre.