Enarsa lanzó la licitación para la reversión del ducto y las plantas. Las obras tienen un presupuesto de $us 712 MM

9 de septiembre de 2023, 18:12 PM
9 de septiembre de 2023, 18:12 PM

Los argentinos se preparan para el cierre definitivo de la llave del gasoducto que llega desde Bolivia. Una serie de inversiones buscan revertir la circulación y recibir el gas que se produce en el gigante yacimiento de Vaca Muerta, al oeste del país.

El 9 de julio pasado, el ministro de Economía de Argentina y candidato presidencial, Sergio Massa, afirmó que su gobierno dejará de importar el gas boliviano en 2025. Proyectó que, a través de los gasoductos bolivianos, podría exportar el gas no convencional (shale gas) al sur y centro de Brasil. 

El proceso marcha viento en popa. En su edición del 8 de septiembre, el diario argentino Río Negro informó que la empresa Transportadora Gas del Norte (TGN) culminó con la reversión de dos plantas compresoras en Leones y Tío Pujio, que permitieron sumar más gas el sistema del Gasoducto Norte.

Según el medio argentino, las obras tienen un presupuesto de $us 712 millones y consisten en la reversión de cuatro plantas compresoras para invertir el sentido de circulación del gas, “ya que hasta la fecha el sistema toma la producción de Bolivia y la Cuenca del Noroeste y se espera que a partir de junio del año que viene lleve producción desde la Cuenca Neuquina hacia el norte”, resaltó.

A este proyecto, la estatal petrolera argentina Enarsa ha denominado Reversión del Gasoducto Norte, cuya licitación fue publicada en pasados días. “Calculamos que para el 1 o 2 de octubre recibiremos las ofertas. A mediados de octubre estamos adjudicando y firmando contratos y a mediados de noviembre arranca la obra. Con lo cual son más o menos de 6 meses para hacer la obra”, detalló el presidente de Enarsa, Agustín Gerez.

Río Negro indicó que el apremio de realizar estos trabajos radica en la caída de la producción de Bolivia, que Argentina importa por contrato desde el 2006 con YPFB. “Bolivia está en una situación complicada, lo ha dicho el propio estado boliviano. Dicen que el año que viene van a disminuir un 30% de la venta de gas”, comentó Gerez, ya que desde Enarsa también tienen a cargo esas importaciones.