La iniciativa se expresó en una carta enviada el jueves 30 de septiembre al gerente general de la EPA, Rodrigo Pinto, para que se reinicie cuanto antes las negociaciones

1 de octubre de 2021, 11:10 AM
1 de octubre de 2021, 11:10 AM

La Administración de Servicios Portuarios–Bolivia (ASP-B) planteó una vez más a la estatal chilena Empresa Portuaria de Arica (EPA) suscribir un compromiso transitorio de tres meses para no perjudicar la operatividad de la carga boliviana en el puerto de Arica.

En ese lapso breve, según Dante Justiniano, gerente ejecutivo de la firma estatal, se trabajará en el análisis y alcances de la propuesta chilena a las nuevas tarifas hasta alcanzar un acuerdo, concertado, amplio, sin imposiciones y de largo plazo sobre las nuevas tarifas por el servicio portuario.

La iniciativa se expresó en una carta enviada el jueves 30 de septiembre al gerente general de la EPA, Rodrigo Pinto, para que se reinicien cuanto antes las negociaciones y trabajar por tiempo y materia hasta lograr un acuerdo que beneficie a las partes.

La solicitud es la decimoséptima que la ASP-B le hace llegar a EPA. Así lo indicó Justiniano, a tiempo de señalar que en todo momento se buscó evitar que la carga boliviana “entre en una situación de paralización”, pero, lastimosamente, la Terminal Puerto Arica (TPA) suspendió unilateralmente las salidas.

Por su parte, Pinto manifestó este jueves que le llama la atención que se hagan emplazamientos públicos para alcanzar un acuerdo, pero que en la práctica no haya nada concreto. “Si la ASP-B quiere de verdad suscribir el acuerdo de descuentos, debe anunciar formalmente su visita al puerto, donde lo recibiremos con nuestra mejor disposición. En el Puerto de Arica mantenemos toda la disposición para firmar un acuerdo”, sostuvo.

Despacho con pago directo

En cuanto a la modalidad excepcional de pago directo de servicios al concesionario TPA que la ASP-B autorizó a partir del martes 28 de septiembre, el gerente general de la EPA informó que -hasta este jueves- han sido despachados 280 camiones con destino a Bolivia, lo que equivale a 7.000 toneladas de carga de importación del vecino país.