Empresas como Grupo Bimbo y Coca-Cola Femsa han optado por anticipar las compras de varias materias primas para evitar una subida abrupta de sus costos de producción

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15 de agosto de 2021, 10:26 AM
15 de agosto de 2021, 10:26 AM

De acuerdo con América Economía, preparar un sándwich o endulzar un café en el desayuno resulta cada día más costoso debido al rally alcista que muchas materias primas de los alimentos han experimentado en el último año.

Según datos del grupo financiero mexicano Banco Base de México, en los últimos 12 meses el precio de los commodities utilizados en esta industria como el trigo subió en 39,11%, el azúcar un 41,35%, el café un 45,10%, la soya un 47,28%, el maíz un 68,11%, la carne de cerdo un 89,10% y el aceite de soya un 97%. 

El precio de otros insumos utilizados en la cadena de suministro como el aluminio se dispararon en 47,60%, el gas natural en 93,38%, la gasolina un 87,15% y el acero en 280,95%.

En el caso de Unilever, su director ejecutivo, Alan Jope reconoció en julio pasado que la compañía se enfrenta a la presión inflacionaria más fuerte en una década, a medida que se disparan los costos de las materias primas, el empaque y el transporte.

Así, al cierre del primer semestre de 2021 el margen operativo subyacente del fabricante británico cayó 100 puntos base y alcanzó al 18,8%, tras la aceleración de los costos en el segundo trimestre.

Los golpes más fuertes para la caja de Unilever, según el ejecutivo, provienen del precio del aceite de palma, que se utiliza en muchos de sus productos, que aumentó en 70% con respecto al primer semestre del año pasado, el aceite de soya que ahora cuesta un 80% más, el aceite crudo (60%) y el transporte marítimo (entre un 40% y 50% más).

Esto ha llevado a la compañía a subir los precios de algunos productos, como el helado y el shampoo (en la categoría de higiene personal), aunque el incremento se está haciendo de forma gradual, porque de lo contrario, según Graeme Pitkethly, CFO de Unilever, se escandalizaría a los compradores.

Asimismo, en junio de este año Procter & Gamble anticipó las medidas adoptadas debido a los mayores precios de las materias primas y también del transporte. Joe Moeller, director financiero de la compañía afirmó que esta situación aumentó en $us 600 millones los costos del gigante estadounidense este año.

Ya en abril pasado, Procter & Gamble había anunciado que subiría los precios de sus productos, especialmente en la categoría de cuidado personal, aunque no dio detalles del nivel de este aumento.

Impacto en otras empresas

Las multilatinas productoras de alimentos tampoco han sido la excepción. Es el caso de la peruana Alicorp, que en el segundo trimestre de 2021 reportó ventas por $us 750 millones, un 35,1% superior en comparación al segundo trimestre de 2020. No obstante, la utilidad neta de la empresa alcanzó los $us 10,7 millones, un monto que cayó en 47,4% con respecto del mismo periodo del año anterior.

En el negocio de consumo masivo en Perú, su mercado más importante, Alicorp registró ventas por $us 232,5 millones en el segundo trimestre de 2021, creciendo en 25,9% en comparación con el mismo periodo del año anterior, debido a la mayor demanda de productos y a la recuperación total de sus operaciones, que fueron limitadas durante el mismo periodo del año pasado, como consecuencia de las restricciones causadas por la pandemia. En tanto, el Ebitda disminuyó en 17,9%, principalmente por mayores costos, ya que los precios de los commodities y el costo del dólar siguen al alza.

El tipo de cambio en Perú también le ha jugado un revés al fabricante de la mayonesa Alacena. “Las materias primas cotizan en dólares y, en Perú, desde mayo de 2020 a la fecha se ha dado un aumento del 18,9% en el tipo de cambio. Este factor incide también en otros insumos y servicios en la cadena de producción, como los envases (plásticos) y los costos de transporte y logística internacional”, comentaron desde Alicorp al ser consultados sobre esta coyuntura de altos precios.

El mexicano Grupo Bimbo también es consciente del retador panorama de los commodities a escala global. A fines de julio, en un conference call con inversionistas informó sobre los resultados del segundo trimestre de 2021 y dio a conocer el retador escenario que enfrenta.

 “De cara al futuro, nos enfrentamos a un entorno inflacionario significativamente más alto y vemos aumentos en las materias primas, las tarifas y el costo laboral. Hemos estado tomando medidas para cubrir estos aumentos de costos en nuestras diferentes geografías y continuaremos con la misma estrategia durante el resto del año”, dijo Daniel Servitje, presidente de Grupo Bimbo.

Por su lado, Coca-Cola Femsa ha tenido que tomar medidas para garantizar ahorros y eficiencias operativas. “Como parte de nuestro perfil resiliente y enfoque disciplinado, nuestras iniciativas de cobertura de materias primas, combinadas con eficiencias de costos y gastos nos han permitido proteger nuestra rentabilidad, navegando con éxito en entornos en que aún son volátiles los precios de sus productos”, explicó John Santa María, director general de Coca-Cola Femsa durante la presentación de sus resultados al segundo trimestre de 2021.

Esta decisión ha permitido a la compañía cubrir todas sus necesidades de PET para el resto de 2021 y casi el 50% de 2022 a precios ligeramente inferiores a los registrados este año. En el caso del azúcar, la embotelladora de Coca-Cola en México tiene cubierto cerca del 70% de sus necesidades del año y casi el 50% para 2022 “a precios muy atractivos”, según Eugenio Garza, director de Finanzas de Femsa.

De esta forma, ya sean de alimentos, bebidas o de consumo, las empresas de estas industrias vienen haciendo ajustes y tomando previsiones para hacer frente al más reciente boom de commodities, que a medida que la economía mundial se despierte gradualmente de la pesadilla del Covid-19, amenaza con permanecer por un buen tiempo.