Las proyecciones de Citigroup al cierre del primer semestre de 2024 predicen que Colombia superará su recesión y Perú mantendrá la estabilidad monetaria

14 de julio de 2024, 9:59 AM
14 de julio de 2024, 9:59 AM

Una vez transcurrido el primer semestre de 2024, ha pasado el tiempo suficiente para sacar conclusiones sobre el desempeño de las economías latinoamericanas y vaticinar proyecciones iniciales para 2025. Conviene recordar que hay varios factores en juego: las políticas públicas, el precio de recursos naturales o las decisiones que tomen las potencias mundiales.

Estos son los ingredientes que conforman el análisis trimestral de proyecciones macroeconómicas expuesto por Ernesto Revilla, economista jefe del Citigroup para Latinoamérica. En primer lugar, hay una perspectiva relativamente optimista en torno al panorama global. Dicho de otro modo, actores de peso como EEUU, la Unión Europea (UE) y China seguirán experimentando crecimiento económico, pero en menor nivel. Revilla define a este fenómeno como un “aterrizaje suave”.

Bajo esta consigna, según Citigroup, el PIB estadounidense pasaría de crecer del 2,5% en 2023 a un 1,5% al año siguiente. Esta caída en la curva de crecimiento no implica una recesión, sino una normalización del alza post-pandemia y del efecto de las altas tasas de interés que ya empiezan a reflejarse en un “suavizamiento” de la actividad económica. En una línea similar, después de experimentar una subida del PIB superior al 1% en 2023, la Unión Europea sólo crecería un 0,7% este año.

Mientras tanto, el PIB chino registrará tasas de crecimiento cercanas al 5% en 2024 y al siguiente, descenderá al 4,6%. Aparentemente, el dragón asiático afronta cifras mejores que sus rivales occidentales, pero en realidad, este es un balance modesto en comparación al crecimiento promedio del 10% que se experimentó en las últimas tres décadas.

¿Y en América Latina?

La región seguirá una tendencia similar: si para 2023, la región creció un 2,5%, en 2024, se vería un ligero descenso hasta alcanzar el 2,2%. “Las economías más grandes, particularmente Brasil y México, son las que están arrastrando este crecimiento hacia abajo, porque estas economías tuvieron un muy buen 2023, entonces van a crecer menos en este año”, aclara Revilla. Sin embargo, no todos los casos deben ser medidos por la misma vara. Por ejemplo, las naciones andinas como Perú, Chile y Colombia, que afrontaron procesos de recesión o estancamiento económico en 2023, mostrarán mejores resultados en el año actual.

Ahora bien, todos los países latinoamericanos se verán afectados en mayor o menor medida por un riesgo externo: las decisiones de la Reserva Federal de EEUU (Fed). Para ser específicos, esto conlleva el futuro de las tasas de interés externas. Por su parte, el Citigroup predice que la desaceleración de la economía estadounidense en la segunda mitad de 2024 será un factor importante en el accionar de la Fed.

“La economía de EEUU se mantenía con mucha resiliencia y sobre todo, con una fortaleza muy importante del consumo. Pero el efecto de la elevada inflación y las altas tasas de interés han ocasionado que el consumo de bienes se termine desacelerando”, sostiene Revilla.

A pesar que el consumo de servicios se mantiene fuerte y es uno de los pilares de la economía estadounidense, un crecimiento más lento del PIB ha comenzado a hacer mella en el mercado laboral: en los últimos meses, han empezado a crecer las solicitudes para seguros de desempleo. Si añadimos el hecho de que la inflación de EEUU se acerca a la meta de la Fed, se sientan las bases para que la Reserva plantee un recorte adicional de las tasas de interés. Algo que sería beneficioso para América Latina, de acuerdo a Revilla.

“El mercado espera un poco menos de dos recortes de la Fed en esta segunda mitad del año y nosotros en Citi, somos más optimistas que se pueda recortar más que eso. Esperamos tres recortes de 25 puntos base en la segunda mitad del año. Si la Fed baja tres veces, de septiembre a diciembre, 75 puntos base para llevar la tasa de interés de 5,5 a 4,75, es una buena noticia para nuestro pronóstico regional”, explica.

Finalmente, los precios de materias primas clave como el oro y cobre seguirán una tendencia al alza en el periodo restante de 2024 y en 2025. Por su parte, el petróleo experimentará una tendencia decreciente, pero será una caída gradual, que permitiría tomar precauciones a los países productores de crudo.

SOBRE EL TEMA

Commodities. Ven que los precios de commodities se van a mantener en niveles que le van a dar soporte a las economías de América Latina, y no les preocupan mucho desde un punto de vista inflacionario.

Andinos. En Colombia, Gustavo Petro ha impulsado un ambicioso programa de reformas estructurales, su impopularidad y la oposición parlamentaria han frenado cualquier tentativa de desequilibrio fiscal. Y en Perú se cuenta con una moneda estable pero una presidenta impopular.