La empresa está manejada por personal designado por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, reconocido por 50 países como Jefe de Estado Interino del país caribeño

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28 de septiembre de 2020, 12:16 PM
28 de septiembre de 2020, 12:16 PM

Luego de destaparse las millonarias inversiones hechas por el régimen de Hugo Chávez, a través de un testaferro, en diferentes países, incluidos Bolivia, la presidente de la junta directiva de Monómeros Colombo Venezolanos, Carmen Elisa Hernández, informó que esta compañía bajo el control de la oposición al régimen de Maduro, inició un proceso de investigación para rescatar los activos del gigante soyero boliviano Gravetal, al haber sido comprado con recursos de ese país, informó este lunes las agencia ANF.

El anuncio fue hecho por Hernández a esta agencia de noticias, que participó en el desarrollo de Chavismo INC., una investigación colaborativa que evidencia un entramado de negocios realizado por el régimen venezolano. La producción periodística, en la que también participó la plataforma Connectas, revela el flujo de más de $us 30.000 millones originados del erario venezolano y que han abultado el bolsillo de unos pocos alrededor del mundo.

“El propósito de la investigación en el caso de Gravetal es rescatar el activo, entender que si es un activo de Venezuela (debe ser rescatado); es lo que hemos venido haciendo con Monómeros o con Citgo (Petroleum Corporation), en los países donde el presidente Juan Guaidó está reconocido”, dijo Hernández a ANF.

Monómeros Colombo Venezolanos es una empresa basada en Colombia y es de las más importantes del mercado de fertilizantes en ese país. Fue adquirida por Petróleos de Venezuela (Pdvsa) en 2006.

Desde mayo del año pasado, la compañía se encuentra bajo el control de funcionarios designados por el diputado Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela y reconocido por ese órgano y por más de 50 países, incluidos Colombia y Bolivia, como presidente interino de Venezuela.

Hernández dijo que, de acuerdo a la documentación encontrada, Monómeros Internacional, que es parte de la empresa matriz, fue utilizada para la transacción de Gravetal.

Cabe recordar que, en julio de 2008, la empresa Inversiones de Capital Inversoja compró el 99% de las acciones de Gravetal y las pignoró en calidad de garantía a Monómeros Internacional. En agosto del mismo año, Pdval (Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos) recibió el 99 por ciento de las acciones de Gravetal endosadas al portador y asumió también las acreencias originadas en el préstamo a Inversoja.

La funcionaria explicó que, si bien Monómeros internacional fue usado para la transacción, el dinero para la compra de Gravetal salió de Pequiven (Petroquímica de Venezuela), empresa filial de Pdvsa.

En ese sentido dijo que la estrategia del gobierno interino “ha sido empezar el trabajo para rescatar estos activos para los venezolanos, además de hacerlos productivos” porque muchas de las empresas fueron “desestabilizadas” por el chavismo, como ocurrió con Monómeros, dijo Hernández.

Refirió que la manera del régimen chavista de distribuir la “espada de Bolívar” por todo el planeta fue comprando empresas, fundando otras, haciendo asociaciones y negocios, y “eso es capital de los venezolanos, dinero del Estado venezolano”.

En 2008 la empresa Inversoja adquirió el 99% de las acciones de Gravetal y las pignoró en calidad de garantía a la empresa Monómeros Internacional.

Los accionistas de Inversoja reconocieron en una reunión de directorio celebrada el 24 de julio de 2008, que tenían una deuda por un préstamo recibido de Monómeros International LTD, de acuerdo con documentación a la que tuvo acceso Chavismo INC.

En los registros de la sesión, no obstante, se omiten los datos precisos del monto y detalles sobre la transacción. Los estados financieros de 2013, también consultados para el trabajo, mencionan una deuda por un préstamo a largo plazo e intereses por pagar que eran equivalentes a 82,6 millones de dólares. Los estados financieros de 2018 muestran que esa deuda había saltado a 132 millones de dólares.  En ningún caso se presenta información sobre de quién proviene el dinero, cómo se consiguió, cuándo y por qué vía ingresó.

“Tenemos que hacer una investigación en Bolivia con una firma de abogados que desenrede todos estos manejos empresariales que se hicieron, para no cometer imprecisiones”, apuntó Hernández.

Juan Valdivia Almanza, presidente y accionista mayoritario de Gravetal, no había concluido en Bolivia el mandato como diputado del Movimiento al Socialismo (MAS), entre 2006 y 2010, cuando se dio la transacción de compra de la soyera, que formalmente lo puso al frente de Gravetal.

El exdiputado Bernardo Montenegro presentó una denuncia en contra de Valdivia Almanza en el Ministerio Público por delitos que incluyen la legitimación de capitales y la defraudación impositiva en conexión con el manejo de la empresa Inversoja, de la cual también es presidente del directorio y accionista mayoritario, cuyos balances auditados están llenos de irregularidades, según el denunciante, incluida la no declaración oportuna de la compra de Gravetal y el ocultamiento del dato en la declaración jurada que presentó al terminar su función parlamentaria.