Fuera de lo que son las estrategias, el ex mandatario sostuvo que la nacionalización de empresas como YPFB ya estaba decida y no estaba en debate

3 de mayo de 2021, 11:19 AM
3 de mayo de 2021, 11:19 AM

“Empresa Nacionalizada”, rezaban los carteles colocados en las empresas nacionalizadas por el Gobierno con apoyo de las Fuerzas Armadas. Una medida que se dio durante el primer mandato del expresidente Evo Morales y que, como él mismo admite, fue una decisión política.

Si bien expresó que él conformó una comisión técnica y hubo autoridades que mostraron recelo ante estos cambios, la decisión ya estaba asumida por él. El 1 de mayo del 2006, se emite un Decreto Supremo de nacionalización de los hidrocarburos en homenaje a los trabajadores”, recordó Morales en una entrevista de la radio Kawsachun Coca y el programa dominical 'Evo Pueblo, líder de los humildes'.

El primer paso se dio con la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), en mayo de 2006, y en la misma fecha la nacionalización de Entel, en el año 2008. Según el exmandatario, $us 3.000  era la renta petrolera el 2006, después de la nacionalización subió a $us 38.000 millones (aunque los datos de YPFB señalan que son $us más de 41.000 millones). La renta de Entel el año 2006 era de $us 70 millones y subió a $us 140 millones tras la nacionalización.

“Sentamos soberanía en los recursos naturales bolivianos, la nacionalización fue una decisión política, recuerdo que algunas autoridades de entonces no querían nacionalizar las empresas, tenían miedo, pero ya estaba decidido y no estaba en debate” dijo.

Afirmó que la nacionalización de las empresas estratégicas devolvió la dignidad a Bolivia, “por eso Estados Unidos no nos perdona que hayamos nacionalizado las empresas, ya que eso afectó sus intereses y los de otros países. Y también sacó a relucir la expulsión de la DEA (Administración de Control de Drogas, por sus siglas en inglés, que​ es la agencia del Departamento de Justicia de los EEUU dedicada a la lucha contra el contrabando y el consumo de drogas).

Desde Chimoré, según Morales, Estados Unidos gobernaba el país, las autoridades bolivianas tenían que pedir permiso a los militares estadounidenses para entrar al Trópico cochabambino.

Entretanto, el actual presidente, Luis Arce Catacora, resaltó que los recursos por la renta petrolera crecieron en los últimos 15 años (también gracias a  los precios internacionales) que se destinaron a las regiones, permitiendo la construcción de obras.

En abril, el presidente de YPFB, Wilson Zelaya, informó que la renta petrolera llegará a $us 1.900 millones durante este año y los ingresos de esa entidad estatal crecerán en un 35% en comparación al registro de 2020.

“Estos recursos servirán para reactivar nuestra economía mediante la asignación del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), regalías y otros impuestos a los que YPFB aporta. Dados los ingresos previstos, nos ratificamos como la primera empresa del país”, sostuvo el ejecutivo de YPFB.