Los modelos meteorológicos habían previsto la regularización de las lluvias, con el consiguiente impacto positivo en los cultivos; sin embargo, la intensidad de las precipitaciones pone en duda una menor afectación por el clima.

16 de enero de 2023, 16:28 PM
16 de enero de 2023, 16:28 PM

Lo que comenzó de manera muy propicia puede seguir un curso diferente. La esperada regularización de las lluvias al finalizar el ciclo de La Niña permitió tener un buen proceso de siembra, pero la intensidad de las precipitaciones puede afectar el proceso de producción. Los agricultores esperan con ansias mejores rendimientos después de haber sido golpeado por la sequía.

“Esta campaña está muy incierta. En algunos sectores como Yacuiba empezó bien y se sembró soya y maíz, pero en otras zonas paró la lluvia y hay algunas afectaciones. Algunos ni han sembrado. Está lloviendo muy disparejo”, informó el presidente de la Asociación de Productores de Maíz y Sorgo (Promasor), Mario Moreno, 

En la provincia Cordillera, específicamente en el municipio de Gutiérrez, se registró unos 35 milímetros de agua de lluvia acumulada, cuando lo óptimo para el sorgo es tener unos 200 milímetros y para el maíz unos 400 milímetros para los tres meses de desarrollo del grano, precisó.

Los productores esperan que las lluvias humedezcan la tierra para sembrar con los tractores y para que el grano germine.

En el otro extremo, en San Julián, la situación es diferente. Willy Calderón, alcalde del municipio, informó que hasta el 13 de enero había en los municipios cruceños de San Julián, Cuatro Cañadas y Okinawa más de 3.000 hectáreas sembradas son soya, maíz y arroz bajo el agua.

“Ha habido mucha lluvia en San Julián y hay algunos cultivos inundados, más que todo en la parte más baja. En lugares de altura están bien los cultivos”, informó Chanel Camino, representante de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) en la zona central de Santa Cruz.

Camino sostuvo que las inundaciones no tienen origen en las precipitaciones, sino principalmente en canalizaciones pequeñas o improvisadas que no pudieron darle un curso natural a las aguas. “Eso ha ocasionado algunas inundaciones”, subrayó.

El dirigente indicó también que la lluvia, aunque intensa, es irregular y dispareja, pero no impidió que casi toda la siembre se completó en la región.

Los modelos meteorológicos permiten prever que en esta campaña de verano no va a haber problemas de sequía, porque las lluvias se van a regularizar de a poco”, informó Luis Alberto Alpire, ex secretario de Desarrollo Productivo de la Gobernación cruceña y experto en meteorología.

El fenómeno climático La Niña estuvo presente en los últimos tres años (2020-2022) y en el caso específico de Santa Cruz se manifestó inicialmente con muy bajas temperaturas, nevadas y heladas tardías, y posteriormente con una prolongada sequía.

El fenómeno climático afectó con sus sequías y heladas solo el año pasado 821.830 de las 2,9 millones de hectáreas cultivadas en el departamento (el 28,3%), según datos de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO)

“Este año, con el cumplimiento del ciclo del fenómeno de La Niña, se abre la posibilidad de una buena cosecha”, sostuvo Alpire.

Moreno recordó que en la zona sur la sequía causó afectaciones de hasta 80%.

 “Está pasando el ciclo de La Niña y estábamos esperanzados que las lluvias se regularicen. Al comienzo, hace un mes, las precipitaciones presentaban une buena perfomance, pero se ha vuelto a fregar nuevamente”, dijo Moreno. “Esto es algo incontrolable, no se puede con los factores climáticos”, acotó.