La pandemia ha sido superada en buena parte de las poblaciones de Asia, pero varias de sus economías más importantes aún se resienten, y se agregan impactos de la guerra en Ucrania y el endurecimiento financiero internacional.

22 de julio de 2022, 13:58 PM
22 de julio de 2022, 13:58 PM

Las economías en desarrollo de Asia y el Pacífico crecerán 4,6 por ciento en 2022, menos de lo previsto a comienzos de año, debido a una expansión más lenta en China, el endurecimiento financiero internacional y la guerra en Ucrania, indicó este jueves 21 un reporte del Banco Asiático de Desarrollo (BAD).

Albert Park, economista jefe del BAD, dijo que “el impacto económico de la pandemia ha disminuido en la mayor parte de Asia, pero estamos lejos de una recuperación completa y sostenible”.

La perspectiva se compara con una proyección de 5,2 % emitida por el BAD en abril, y el banco también elevó su pronóstico de inflación en la región, en medio de mayores precios de alimentos y combustibles.

Los países en desarrollo de Asia y el Pacífico continúan recuperándose de la covid y muchos países están flexibilizando las restricciones de movilidad, lo que fortalece la actividad económica.

Sin embargo, el crecimiento se ha desacelerado en China, la economía más grande de la región y segunda del mundo, debido a las interrupciones que causan nuevos bloqueos por la covid, así como por a una demanda global más débil

“Además de la desaceleración en la República Popular China, las consecuencias de la guerra en Ucrania se han sumado a la presión inflacionaria que está provocando que los bancos centrales de todo el mundo aumenten las tasas de interés, actuando como un freno para el crecimiento”, observó Park.

Para el experto “es crucial abordar todas estas incertidumbres globales, que continúan presentando riesgos para la recuperación de la región”.

Según el BAD, la economía de China está lista para expandirse cuatro por ciento este año, en comparación con un pronóstico anterior de cinco por ciento.

También se redujo la perspectiva de crecimiento para India, a 7.2 % en vez de 7,5 % como se estimó en abril, en medio de un ajuste monetario y una inflación mayor a la esperada.

Se prevé que la inflación en los países en desarrollo de Asia y el Pacífico se acelere a 4,2 % este año, en comparación con el pronóstico anterior del 3,7 %. Sin embargo, la presión inflacionaria en la región en su conjunto sigue siendo menor que en otras partes del mundo.

Para 2023, el BAD rebajó su proyección de crecimiento económico para la región a 5,2 % desde 5,3 % en abril, y elevó el pronóstico de inflación a 3,5 % desde 3,1%.

Se mejoraron las previsiones de crecimiento para algunas subregiones. La perspectiva para el sudeste asiático se elevó a cinco por ciento este año (antes 4,9 %), en medio de una mayor demanda interna al relajarse restricciones por la covid.

El pronóstico para el Cáucaso y Asia central se elevó de 3,6 a 3,8 %, ya que algunas economías de la subregión han resistido las consecuencias económicas de la invasión rusa de Ucrania mejor de lo esperado.

En el Pacífico, el repunte del turismo en Fiyi ayudó a que las perspectivas de crecimiento de la subregión mejorasen, de 3,9 a 4,7 %.

Pero el conjunto de Asia oriental crecerá 3,8 % en lugar de 4,7 % como se previó anteriormente, y el pronóstico de crecimiento del sur de Asia se reduce de siete por ciento a 6,5 %para 2022, y de 7,4 a 7,1 % para 2023.

Junto con la inflación y el endurecimiento monetario en India, influye la crisis económica y política que ha vivido Sri Lanka.