La Confederación General de Trabajadores Fabriles de Bolivia presentó un plan para la reactivación de la industria manufacturera, que contempla reducir impuestos y una alianza entre obreros, trabajadores y el Gobierno

22 de diciembre de 2020, 12:23 PM
22 de diciembre de 2020, 12:23 PM

El ente matriz de los trabajadores del sector fabril planteó dejar atrás la relación casi confrontacional entre las empresas y el Estado, para impulsar el empleo productivo; mediante la reducción impuestos y otra serie de medidas que los obreros propusieron en un plan para reactivar al sector industrial.

 Esta inclusión requiere, sin duda, de acordar objetivos comunes y concertar las metas y las acciones entre todos los actores sociales, políticos y económicos que participan en los procesos de creación de valor”, se lee en el documento que elaboró la Confederación General de Trabajadores Fabriles de Bolivia (CGTFB).

La organización propone acciones en tres niveles: en toda la industria manufacturera boliviana, en empresas de rubros que aportan al valor agregado y generación de empleo y en aquellas que se incorporen voluntariamente a una categoría de “empresas privadas con compromiso social”.

El planteamiento busca dejar atrás la relación “casi confrontacional” entre las empresas y el Estado y que deriva en alianzas entre dos partes sin tomar en cuenta al tercer actor “en función de coincidencias coyunturales en las visiones políticas o en los intereses corporativos”.

 Además, la propuesta impulsa la necesidad de cambiar el patrón extractivista y emprender el camino de la diversificación productiva con el objetivo guía de una economía de “pleno empleo”, es un desafío que “conviene a todos”.

Sector manufacturero

Este plan propone, para el sector manufacturero, una reducción o eliminación de los impuestos que se trasladan a los precios (como el IVA, el IT, ICE, entre otros), además de ajustar el Impuesto a las Utilidades de las Empresas con alícuotas vinculadas al empleo, consumos intermedios de origen interno/externo, y a la participación de remuneraciones en el valor agregado.

Incluso sugiere un tipo de cambio “pro-producción y empleo”, para disminuir la competencia desleal a la industria nacional y la reducción del “spread” (diferencia entre tasas de interés activas y pasivas) para créditos de inversión con líneas de financiamiento en moneda nacional.

Empresas con alta incidencia en empleo

Entre las medidas para las empresas que generan gran cantidad de empleos y valor agregado se propone implementar una figura de “gasto público directo” mediante contratos de compras del sector público.

La medida busca que el Gobierno impulse programas articulados a escala nacional, departamental y municipal en salud, educación, defensa y medio ambiente para garantizar la demanda, por tres o más años, de la producción nacional en alimentos, confecciones, madera, turismo, entre otros rubros, bajo criterios de mejora permanente de calidad y productividad.

Además, se plantea ampliar los beneficios de los bonos a grupos vulnerables, mediante sistemas de billetera móvil para paquetes de productos de la industria nacional entregados a domicilio, o en puntos de entrega que permitan selecciones personalizadas de productos.

Empresas privadas con compromiso social

La Confederación propone también que aquellas firmas que se incorporen voluntariamente a la categoría de “empresas privadas con compromiso social” estén protegidas por normas específicas que les garanticen estabilidad normativa a largo plazo, a cambio de transparencia contable en la gestión, y de equidad en la distribución del ingreso.

Entre las medidas para este sector se propone promulgar una Ley de Garantía de Estabilidad Normativa, que asegura a las compañías la vigencia por 10 años de las reglas de juego pactadas y en caso de que estas varíen se realicen incentivos y compensaciones.

Las empresas deberán suscribir un compromiso jurado de transparencia administrativa y confidencialidad, que también será para las instancias públicas que accedan a información empresarial.

La contabilidad deberá estar homologada de manera que el cálculo de los indicadores de productividad, valor agregado y distribución del ingreso sean transparentes y accesibles y las instancias involucradas.

Pasos próximos

La Confederación ahora busca consensuar sus propuestas con las empresas privadas, la Cámara Nacional de Industrias y sus filiales departamentales.

Una vez que se logre el consenso, las organizaciones laborales y empresariales convocarán a las autoridades de los órganos Ejecutivo y Legislativo para acordar una agenda compartida para la reactivación de la economía nacional en el marco de una “Estrategia para la diversificación productiva en una economía de pleno empleo”.

Panorama económico

La propuesta del sector está sustentada en un estudio que contempla una serie de indicadores que reflejan los números rojos de la economía nacional y el descenso considerable del empleo fabril en los últimos 10 años.

Esa caída, según el análisis del sector, se debe a la incapacidad estructural de la economía para crear oportunidades de empleo digno para todos y como consecuencia directa del modelo extractivista de la economía que, en 200 años de vida económica republicana “es el único rasgo estructural que no ha variado a pesar de todos los cambios pendulares en orientaciones políticas”, subraya el planteamiento.