El talento de Messi y el oficio de Vidal fueron las claves en un partido en el que los albicelestes tuvieron más chances de gol

15 de junio de 2021, 7:00 AM
15 de junio de 2021, 7:00 AM

Lo que pudo ser un tributo redondo de Argentina al legendario Diego Maradona, terminó en un empate 1-1 con Chile este lunes en Rio de Janeiro, en el estreno del Grupo A de la Copa América de Brasil-2021.

Lionel Messi puso en ventaja a los argentinos en un excelso tiro libre a los 33 minutos, emulando la pegada prodigiosa de zurda del ‘Pelusa’, homenajeado por la Conmebol en la fría noche carioca con un video en el que se recordó algunas de sus hazañas, previo al inicio del partido.

Eduardo Vargas supo reemplazar al lesionado Alexis Sánchez para marcar la paridad a los 58, de cabeza, en el rebote otorgado por el portero Emiliano Martínez, al atajar un penal a Arturo Vidal.

“Nos faltó tranquilidad, y tener el control de la pelota”, aseguró Messi al final. Ahora “nos toca Uruguay, otro rival muy duro”, lamentó.

Con más batallas en el mediocampo que fútbol de autor, los equipos que Lionel Scaloni y Martín Lasarte firmaron tablas en el vacío estadio Olímpico Nilton Santos, hogar del Botafogo de Garrincha, cuyo gramado, mojado y con lodo, dificultó un juego más fluido.

El abrazo de dos gladiadores. Messi y Vidal lideraron el juego de sus selecciones


“Es un empate valioso, no para hacer una fiesta, pero estamos en un nivel de competitividad importante”, afirmó Lasarte en rueda de prensa.

Ahora Argentina buscará su primera victoria el viernes, cuando enfrente a Uruguay en Brasilia. El mismo día, pero en Cuiabá (centro), Chile chocará con Bolivia.

Paraguayos y bolivianos cerraban la primera fecha del Grupo A ayer en Goiania.

Esa arma solía fallarle en sus citas con la pelota. A veces los arqueros volaban para despejar el peligro, en algunas ocasiones el riesgo quedaba clavado en la barrera y en otras el palo evitaba el festejo. También, de vez en cuando, se iba lejos del arco.

El homenajeado de la noche, Diego Armando Maradona, fallecido en noviembre pasado, pulió el “punto débil” de su heredero. Fue en febrero de 2009, en Marsella, Francia, poco tiempo después de que el ‘Pelusa’ asumiera la dirección técnica de la Albiceleste.

“Poné la pelota acá y escuchame bien: no le saqués tan rápido el pie a la pelota, porque si no ella no sabe lo que vos querés...”, cuentan que le dijo a ‘Leo’.

Coincidencia o no, desde entonces el ahora capitán de la Albiceleste es un especialista de la pelota parada. Y en la noche en la que la Conmebol le rindió tributo al que muchos consideran el mejor futbolista de la historia, el hombre que pone en riesgo ese mote dio muestras de haber aprendido la lección.

Messi situó la pelota a poco más de un metro de la media luna, justo al frente de Claudio Bravo. La cacheteó con su zurda milimétrica, con amor, como diría Diego, en dirección al ángulo izquierdo de su excompañero en el Barcelona.