El Gobierno y el MAS aseguran que nadie fue vetado como en 2020, pero candidatos opositores sintieron una presión judicial y política para dejar la contienda. Expertos lamentan el escaso debate de propuestas

7 de marzo de 2021, 17:15 PM
7 de marzo de 2021, 17:15 PM

El país vuelve a las urnas. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) habilitó a 7.115.177 de personas que fueron convocadas para renovar, a través del voto, el mandato de 4.962 autoridades regionales que tendrán el desafío de remar aguas arriba, con menos recursos y en medio de las secuelas provocadas por la pandemia.

Para asumir estas responsabilidades, cerca de 20.000 candidatos se inscribieron para competir en una carrera electoral que estuvo marcada “por un escaso debate de propuestas” y “muchas acciones legales” que fueron interpuestas contra candidatos visibles de los frentes opositores al gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), según el balance de Fabián Yaksic, exdiputado y experto en descentralización administrativa.

Durante la campaña, el ministro de Justicia, Iván Lima, conversó con EL DEBER y negó que hubiese “un plan estructurado” para anular las candidaturas de opositores por la vía legal, pero subrayó que es necesario que aspirantes a cargos públicos tengan cuentas claras con la justicia para participar en los comicios.

Remarcó que muchos candidatos se victimizaron con mensajes mediáticos en un escenario proselitista respecto a acciones legales que datan de mucho tiempo atrás. “No creo justo decir que hubo una politización. En este proceso electoral no se vetó a nadie como pasó en 2020, cuando destacados líderes del MAS quedaron fuera de la contienda”, señaló Lima.

La politóloga y exdiputada Ximena Costa lamentó, en una entrevista con radio Panamericana, que durante la campaña se haya perdido la discusión sobre “temas estratégicos, como el de la planificación municipal” y en el que “deberían participar todos, por encima de factores ideológicos”.

Postulantes

De acuerdo con el TSE, cerca de 20.000 personas se postularon para estos comicios al cobijo de unas 30 organizaciones políticas. Los candidatos que llegaron a este día decisivo pugnan por la silla de nueve gobernaciones, una por cada departamento. En Tarija, Santa Cruz y Pando, la papeleta de sufragio incluye la posibilidad de elegir a un vicegobernador o vicegobermadora en el marco de sus estatutos autonómicos. En el caso del departamento del Beni se eligen a ocho subgobernadores provinciales y 19 corregidores

Los bolivianos también elegirán a 144 asambleístas por territorio y 103 asambleístas por población (a excepción de Beni), además de 25 legisladores indígenas (exceptuando en Potosí). Los extranjeros residentes en Bolivia (15.898, según el padrón electoral) podrán elegir a alcaldes y concejales.

Tras la contienda de este domingo, 336 alcaldes y 2.008 concejales llegarán a esos cargos.

Además, existe la autonomía regional del Gran Chaco en Tarija. Allí se elegirá a un ejecutivo regional, dos ejecutivos o ejecutivas de desarrollo y 12 asambleístas

Esa es la estructura subnacional que tendrá la responsabilidad de responder a los desafíos de desarrollo, pero con menos recursos.

“Son las autoridades más cercanas a la población y los grandes retos que se tienen vienen por efecto de la reducción de recursos de la renta petrolera y del gas. Ahora deben pensar en generar ingresos propios e iniciativas productivas” apuntó Juan Carlos Núñez, director de la Fundación Jubileo, en un contacto con EL DEBER.

Son tiempos difíciles. Desde 2014, las gobernaciones sufrieron una reducción de casi el 50% y el en caso de los municipios la reducción fue del 30%, según datos comparativos del Tesoro General del Estado procesados por Jubileo. “Son tiempos difíciles. En esta situación de pandemia hasta la recaudación por impuestos se ha reducido y eso va tener un impacto directo en las regiones”, afirmó Núñez. Asimismo, el experto cree que se debe debatir y establecer “un franco diálogo” entre todos los niveles del Estado para la redistribución de estos recursos. “Después de esta elección esta es la agenda que debe ser encarada”.

Yaksik anticipó un período complejo “con enormes dificultades”, especialmente por la reducción del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). “En este contexto de crisis, es mucho más necesario que siempre apostar por un nuevo pacto fiscal”.

En este escenario, opinó el exdiputado, las decisiones deben apuntar a “desterrar cualquier política del despilfarro” de manera que se prioricen los proyectos que generen desarrollo en favor de las regiones y los municipios.

Democracia

En el Movimiento Socialismo (MAS), este complejo escenario no ha sido ventilado públicamente, aunque la apuesta inicial fue conquistar la mayor cantidad de gobiernos regionales y alcaldías para “coordinar mejor”.

“El MAS es el único que tiene presencia nacional. En la totalidad de municipios del país. En la campaña se ha podido ver este encuentro. Se va a trabajar de manera coordinada, pues necesitamos que nuestro gobierno municipal y departamental sea de nuestro instrumento. De esta manera, vamos a tener proyectos macro, porque en la unidad está la fuerza”, proyectó el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani (MAS), con miras al escenario postelectoral.

El partido gobernante tiene una participación mayoritaria en los gobiernos locales del área rural y en varios departamentos. En La Paz, Cochabamba y Santa Cruz no logró ganar elecciones locales.

Balance

PRESUPUESTOS
Los gobiernos municipales tienen Bs 1.339 MM para este año. Las gobernaciones Bs. 5.710 MM y esto representa el 35% del Presupuesto Nacional

DISTRIBUCIÓN
El 35% del presupuesto del Estado es destinado a gobernaciones y municipios. Expertos demandan un nuevo pacto.

CANDIDATOS
De los 4.962 cargos en disputa, 2.292 corresponden a suplentes en escaños deliberativos y legislativos.

CRISIS
La pandemia de coronavirus y la reducción de ingresos de la renta petrolera pondrá en aprietos a gobiernos municipales y departamentales.