Opinión

Cara a cara

20 de septiembre de 2021, 5:00 AM
20 de septiembre de 2021, 5:00 AM

_Un reportero gráfico de EL DEBER fue agredido por hacer su trabajo. Los miembros de la seguridad presidencial se enfurecieron cuando registraba su recorrido por Expocruz y al mandatario se le salió el zapato. El fotógrafo fue sacado a empujones y hasta lo amenazaron. Esa no es la forma señores. Ya es tiempo de que se respete la labor del periodismo.

_El rodillo del MAS está aprobando leyes que generan preocupación a la ciudadanía. Una es la de Enriquecimiento Ilícito, que establece pinchazos telefónicos, allanamientos, vulneración de secreto bancario y secreto profesional ante una simple denuncia. 

También hay un proyecto de ley de Derechos Reales y otro que busca que el registro de empresas pase al Estado. En un país en el que la política es el combustible que mueve la justicia, esas normas son inquietantes. Una de las alertas es precisamente la intención de violar el secreto de fuente que tiene el periodismo como un derecho inembargable. 

El relator para la libertad de prensa de la CIDH lo explica con meridiana claridad: “La reserva de la fuente protege el debate público, la persecución a las fuentes pretende clausurarlo y reprimirlo”.

_Hay un tenebroso cerco a Bolivia. Los operadores del contrabando crearon un pueblo en territorio chileno donde dejan los objetos que venden sin pagar impuestos en Bolivia, según un informe del Ministerio de Defensa. El narcotráfico avanza con cultivos ilegales de coca y hasta pistas clandestinas en áreas protegidas. Lo ilegal avanza sin control frente a las tibias acciones del gobierno.

Tags