25 de mayo de 2023, 4:00 AM
25 de mayo de 2023, 4:00 AM

No solo tenía una voz única, su vida fue un símbolo de perseverancia, de lucha, de amor propio. Murió Tina Turner. Se fue discretamente tras padecer un cáncer desde hace más de seis años. Su existencia fue dura desde que nació. Vio la luz en el sótano de la maternidad de su condado, el espacio que estaba reservado para las mujeres de color. Su madre no le demostró amor. Ella abrazó su vocación y comenzó a cantar en el coro de la iglesia. Entonces la encontró Ike Turner, un hombre infame que se aprovechó de ella y que la maltrató física y sicológicamente. Al dejarlo tuvo que reinventarse, pese a las trabas que él le puso. Como si nada de lo anterior bastara, murieron dos de sus hijos. Uno de ellos se quitó la vida y el otro falleció de una enfermedad.

 Cada episodio de su vida significó una lucha. Ella peleó por ella misma, por su dignidad, por su amor propio. Pero, al hacerlo, dejó una estela de inspiración para que muchas mujeres puedan salvaguardarse, liberarse y florecer con todo su potencial, como lo hizo Tina Turner. Su trabajo y dedicación la convirtieron en la reina del rock y fue inspiración de otros grandes, como Mick Jagger que admiraba cómo ella se movía en el escenario.

 Tina dejó este mundo, pero no lo dejó en realidad. Una vida tan inspiradora no se extingue, se potencia en el tiempo, porque ella, su voz, sus luchas y su fuerza marcan un camino que se admira y que inspira cuando las cosas no son fáciles. Gracias bella mujer, una vida así, con sentido, es una vida que trasciende y vale la pena.

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