Cirugías cambian la vida de 65 niños con labio fisurado y paladar hendido

Sair Máximo Sárate, de un año y siete meses, volvió a casa con una nueva sonrisa y sin dificultades para alimentarse. Fue dado de alta este jueves, luego de haber sido sometido a su segunda cirugía de paladar hendido.
“Nos vamos contentos porque todo salió bien. Estamos muy agradecidos con los médicos y la campaña porque todo es gratuito”, señaló su mama que, junto a su esposo, recibían las indicaciones de los cuidados posoperatorios.

El pequeño ingresó al quirófano el miércoles, donde el equipo de cirujanos procedió a corregirle la abertura que tenía en el paladar. “Fueron tres horas en el quirófano que le cambiaron la vida. Ahora no tendrá problemas para comer. No podía alimentarse bien porque la comida se le salía por su naricita”, señaló su mamá.

Sair Máximo nació con labio leporino y paladar hendido. Es el último de cinco hijos de esta joven madre que nunca imaginó que su bebé nacería con esa malformación congénita. Estuvieron tocando puertas para acceder a una cirugía que le devuelva calidad de vida, hasta que el año pasado se abrió una luz de esperanza y Sair Máximo accedió a su primera operación de corrección de labio fisurado. Su mamá espera que, con este segundo procedimiento, su bebé también puede aprender a hablar y no tenga problemas con el lenguaje.

Este pequeño es parte de los 65 niños beneficiados con la última campaña de Operación Sonrisa, que cuenta con el apoyo del Banco de Crédito (BCP), la misma que culmina este viernes, con cinco días de arduo trabajo del equipo de galenos voluntarios de Bolivia y de otros países, en quirófanos del hospital Japonés.

Este miércoles también ingresó al quirófano Jorge Herbas, de ocho años, para una cirugía de paladar hendido. Es su segunda intervención, pero la primera con Operación Sonrisa. “Tenía complicaciones para comer porque los alimentos se le desviaban por su nariz. Su paladar estaba abierto, pero ahora quedó bien y está listo para volver a casa”, dijo su papá Abel Herbas.

Contó que una médica les comentó de la campaña y no dudaron en acudir al hospital Japonés para acceder a la preselección de pacientes, donde afortunadamente su niño fue seleccionado como uno de los beneficiados al cumplir con todos los requisitos y procedimientos para la intervención.

También pasó por su segunda operación, José Santos, de 1 año y 1 mes. Su mamá Juanita Condori contó que cuando su bebé tenía solo tres meses tuvo su primera intervención de labio leporino, a través de esta cruzada. 

Desde entonces, ella se ha convertido en una especie de impulsora de la campaña, puesto que la recomienda a quien conoce para que la información llegue a las familias que necesitan. 

“Es muy buena esta campaña. Es grande el apoyo porque cubre todo”, señala.
Hasta la fecha, Operación Sonrisa ha llevado adelante 43 misiones. En estas campañas se han realizado 5.305 procedimientos quirúrgicos, 4.414 pacientes han sido operados y 9.839 pacientes potenciales se presentaron a su proceso de selección.

El plan de apoyo a los pacientes seleccionados de otros departamentos contempla la cobertura de gastos de traslado, alojamiento y alimentación de los beneficiarios y sus familiares. Las cirugías programadas se realizarán en Santa Cruz de la Sierra, ciudad a la que se trasladarán los menores elegidos y sus familiares cercanos.

Sobre la condición
El paladar hendido y el labio fisurado son defectos congénitos. Ocurre cuando el labio superior y el paladar no se desarrollan correctamente durante los primeros meses de embarazo.
Los niños que tienen el labio fisurado, con o sin hendidura de paladar, o que solo tienen el paladar hendido sufren dificultades para alimentarse y hablar, son vulnerables a infecciones de oído y problemas en los dientes. 

Uno de 500 niños en el mundo nace con labio fisurado y paladar hendido y uno de cada 10 niños, que nace con esta dolencia, fallece por desnutrición antes de cumplir su primer año.

Se desconocen las causas de las hendiduras orofaciales en la mayoría de los bebés. Algunos niños tienen el labio o el paladar hendido debido a un cambio en sus genes. Se cree que el labio hendido y el paladar hendido son causados por una combinación de genes y otros factores, como los elementos dentro del ambiente con los que la madre entra en contacto, o lo que come o bebe, o ciertos medicamentos que usa durante el embarazo, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

La cirugía para corregir el labio hendido generalmente se realiza en los primeros meses de vida y se recomienda que se haga dentro de los primeros años de vida.