La ex monitoreadora ambiental del área protegida apunta a la unidad central en La Paz, el Sernap, y al director del ANMI, de “ajustar” criterios técnicos a requerimiento de la minera Mincruz SRL. El director dijo que respondería este lunes

27 de junio de 2022, 4:00 AM
27 de junio de 2022, 4:00 AM


Entró a trabajar al Área Natural de Manejo Integrado (ANMI) San Matías, dependiente del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), en febrero de este año, pero su contrato recién corrió desde el 9 de marzo y duraba tres meses.
Thai Zárate Sandoval es ingeniera ambiental de la Uagrm. Hace poco denunció la autorización “forzosa” de ingreso de la empresa minera Mincruz SRL, para la extracción de manganeso, a la zona núcleo del ANMI San Matías, violentando lo establecido en el plan de manejo de esta área protegida (AP).

La diputada María René Álvarez exigió al juzgado Agroambiental de San Ignacio de Velasco dictar medidas cautelares para paralizar el ingreso de Mincruz al ANMI y, con el legislador Marcelo Pedrazas, presentó una Petición de Informe Escrito (PIE) sobre el tema.
Según Zárate, al negarse ella a firmar la autorización, su contrato no fue renovado, luego de amenazas de despido de parte del director del AP, Mauricio Fabián Morales Veizaga, y el permiso fue otorgado, pero con la firma de un técnico sin contrato en ese momento, Juan Pablo Estrada Saavedra.

¿Cuál era su función?
Mi función como técnica en monitoreo ambiental era fiscalizar que las actividades dentro del ANMI cumplan con la normativa ambiental y con el plan de manejo. Mi rol era revisar la documentación que entraba a la oficina, emitir un criterio técnico que se envía a La Paz, a la unidad central, Sernap, que toma la decisión de si autoriza o no el ingreso, si se dan los CCU (Certificación de Compatibilidad de Uso de Suelo), que es un permiso que da el Sernap para que una actividad, obra o proyecto cumpla sus funciones dentro del ANMI.

¿Qué ocurrió?
En mi segundo mes (abril) llegó la solicitud de la minera Mincruz, que fue rechazada. Pero curiosamente, en mayo la minera volvió a enviar su solicitud, ya directamente a La Paz, y el viernes 20 de mayo me llamó el director, Mauricio Morales, para que elabore un criterio técnico que esta vez apruebe el ingreso de la minera, diciendo que sí cumplía con todos los requisitos.

Ya en 2018, quien fuera director del ANMI en esa época, el biólogo Marcel Salvatierra, rechazó el CCU forestal para desmonte, debido a que según el plan de manejo, solo se permite ganadería extensiva, agricultura de subsistencia, y la implementación de pastos cultivados de pequeña escala. 

No está permitido el cambio de uso de suelo hacia sistemas intensivos de gran escala, mucho menos los desmontes, y peor aún, la minería. Eso dice el plan de manejo, en el que uno tiene que basarse para los criterios técnicos de CCU.
Le dije que no firmaría, que firmara él. Me amenazó con un memorándum y exigió que sustentara legalmente mi negativa y, por supuesto, le respondí que fue en base al plan de manejo.

¿Al final quién firmó?
Luego de la amenaza me fui a almorzar y, al regresar, el director había hecho firmar ese criterio con un técnico al que supuestamente le había ofrecido un cargo, bajo contrato de una ONG, pero que hasta ese momento no tenía contrato alguno, ya que el mío finalizaba recién el 30 de mayo.

Si Morales tenía potestad, ¿por qué pedir otras firmas?
Para lavarse las manos. El pedido de que yo autorizara a la minera fue el viernes 20 de mayo y el ingreso de Mincruz estaba previsto para el 23, el lunes. Su permiso es hasta el 31 de diciembre.

¿Esos tiempos y procedimientos son habituales?
No, tarda. Llega la solicitud a la oficina, uno emite su criterio, tiene hasta diez o quince días hábiles para hacerlo, de ahí recién va a La Paz. Hasta un mes llega a tardar la respuesta, incluso hay gente a la que le perdieron el trámite y le puede tomar un año, pero en este caso querían para ya mismo, y con amenazas de por medio.

¿Hubo socialización?
La información de la autorización se filtró el sábado 21 y Morales me llamó para preguntarme si yo filtré ese permiso. Le dije que no. Creo que llegó a las organizaciones sociales del lugar.
Cuando entré a la oficina trabajar el lunes 23, me habían cambiado la contraseña de la computadora. Morales me metió a su oficina y me amenazó, quiso amedrentarme por la filtración de la información, dando por hecho que fui yo.
Le dije que me presente pruebas para acusarme y cuestioné su preocupación de que se filtre o no, ya que esa información siempre debió socializarse.

La autorización es de interés público y ni siquiera los guardaparques tenían conocimiento, ni el jefe de protección, ni el comité de gestión. Violentaron los derechos de los indígenas y comunidades de la zona porque la consulta pública que la minera hizo fue de mala fe; la gente está desinformada, no tiene idea del impacto negativo de la extracción allá. Les dijeron que no habría contaminación ni afectación al agua. Tengo un video sobre eso.

¿Cómo es que la ABT autorizó ese desmonte?
La minera apareció con su permiso de desmonte de la ABT, que también es irregular, igual que la decisión del director del ANMI.Son varios los involucrados en este tema.
Es increíble la clase de profesional que está como director porque además aprovecha su cargo para amedrentar a los guardaparques, que no quieren decir algo.

¿Cuál es la situación del ANMI?
A Marcel Caballero, anterior director, lo sacaron, igual que a mí y a cualquiera que quiera cumplir la norma y el plan de manejo. Ahora ANMI San Matías está en las peores condiciones, tiene 13 guardaparques, es la segunda AP más grande del país, con casi tres millones de hectáreas. Los ‘guardas’ no tienen en qué movilizarse, el único vehículo que sirve lo maneja el director, que solo va al AP cada fin de mes, o si hay alguna entrega. Ha sido un tormento trabajar en esa oficina, en mi primer viaje con él empezó a consumir alcohol en el vehículo y quería que yo tomara con él, eran viajes de más de 15 horas, yo la única mujer, aguantando comentarios machistas.

Los campamentos son una pena, en Candelaria no tenían ni luz ni agua, y el director ha recibido plata de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) para mantenimiento, pero no les ha hecho llegar un peso para eso.

Hay denuncias de que maneja Amboró y Noel Kempff Mercado, áreas afectadas por el narcotráfico.
Parece que él es quien maneja el Sernap, eso hace creer a los guardaparques, así los atemoriza. Sabía previamente quién sería la directora del Amboró y quién del Noel Kempff porque el nuevo director del Noel Kempff iba todos los días a buscarlo.

¿Hay otras mineras operando ahí?
Sí, está la empresa Minerales y Metales del Oriente, con Anahí 1, 2 y 3, pero entiendo que estaban pre constituidas antes de la creación del área. Explotan la bolivianita y cada año presentan su IMA, que es su Informe de Monitoreo Ambiental. Después sí entraron hartas solicitudes de mineras y, revisando los antecedentes de los anteriores técnicos, hicieron inspección a varias mineras y paralizaron porque estaban empezando a explotar de forma ilegal, sin permiso. Incluso están con denuncias y tenían que pagar montos determinados.

¿Has recibido amenazas luego de tus denuncias?
No. Tampoco tengo miedo, he recibido mucho apoyo, incluso de asesores legales.