Tras la catástrofe ocasionada por el fuego en 2019, y en completo silencio, la celebridad destinó un fondo importante para recuperar una parte del bosque, con participación de comunidades originarias

11 de julio de 2021, 7:00 AM
11 de julio de 2021, 7:00 AM

“Los científicos informan que más de 2,3 millones de animales han sido asesinados por incendios forestales en Bolivia (...) incluidos jaguares, pumas y ocelotes”, publicó en su cuenta de Instagram en 2019 Leonardo DiCaprio, que además de actor, es activista medioambiental.

En aquel momento, la celebridad aludió al desastre ocurrido en la Chiquitania hace dos años, por el que se viralizaron imágenes de animales carbonizados y de voluntarios de todas partes peleando contra el fuego.

Los incendios quemaron más de 10 millones de hectáreas de bosques y praderas, devastando ecosistemas como la sabana tropical de la Chiquitania y una antigua reserva forestal en Santa Cruz”, sostuvo la celebridad.

Su conmoción no se quedó en post en redes sociales. DiCaprio creó la fundación medioambiental Earth Alliance, que en esa fecha dispuso un fondo de cinco millones de dólares, de Amazon Forest Fund, para ayudar a combatir los incendios que devastaron la selva tropical de la Amazonia. La Chiquitania se benefició con una parte de esos recursos.

La confianza se depositó en la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica), con sede en Ecuador, que los ha operativizado a través de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente, Chaco y Amazonía de Bolivia (Cidob Orgánica).

Precisamente, la Cidob Orgánica ya había empezado a trabajar con algunos originarios de Roboré, uno de los municipios beneficiados, cuando hubo el incendio en la comunidad Naranjo, hace pocos días, a corta distancia de donde se supone que ya se está trabajando para restaurar el bosque seco chiquitano con los recursos aportados por la organización de DiCaprio.

La preocupación surge por diversos factores. Uno de ellos es que, a pesar de que se registró un aumento de los focos de calor, la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosque y Tierra (ABT) amplió el permiso de quemas controladas. Antes había anunciado que la pausa para el fuego empezaría el 30 de junio, fecha que finalmente se modificó.

Un informe técnico de la Unidad de Monitoreo e Información Geoespacial reconoció “un incremento histórico para los meses de mayo y junio de los focos de calor, pero el director general de Manejo de Bosques y Tierra de la ABT, Saúl Morón, justificó la medida por la “acumulación de autorizaciones de quemas que no se realizaron los años 2019 y 2020, ya que existieron prohibiciones.

La resolución de la ABT considera que, si bien se advierte un incremento de focos de calor con relación a las gestiones 2018, 2019 y 2020, la mayoría de estos focos corresponden a quemas no autorizadas por la ABT, que constituyen el 62%.

En anteriores años, las quemas autorizadas, según el mismo portal de la ABT, apenas llegaban al 3%. Quizás una de las razones para el incremento de la legalidad radicaría en la facilitación de los trámites, a partir de la Ley 741, que exige mínimos requisitos para quemar en los PDM20 (20 hectáreas por familia en comunidades con un promedio de 30 familias).

Este 2021, la ABT autorizó 7.939 quemas controladas. Considera que estas quemas “no tienen mayor incidencia en los focos de calor”, lo que permite que se extienda hasta fin de mes la autorización para nuevas quemas.

Sin embargo, hace pocos días la Gobernación de Santa Cruz salió a anunciar la declaratoria de alerta amarilla debido a los incendios forestales, ya que además del fuego en Roboré, se dio otro de mayor seriedad dentro del Área Natural de Manejo Integrado (AMNI) San Matías, y previo a ese, otro en Otuquis.

“De acuerdo a los reportes emitidos por el Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales (Satif) de la Gobernación, en este momento el 52% del departamento se encuentra en riesgo medio de ocurrencia de incendios, es por ello que se declara alerta amarilla, ya que se está en la fase inicial de un periodo crítico de incendios debido a las condiciones climáticas y a la baja humedad en la vegetación”, informó la secretaria de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente de la Gobernación, Alejandra Sandóval.

Según la autoridad departamental, los municipios de Pailón, San Ignacio de Velasco, San José de Chiquitos, Carmen Rivero Tórrez y Concepción tienen mayor potencial para la ocurrencia de incendios forestales.

Sandóval dijo que se reportaron 9.795 focos de quemas, casi 2.000 más que los autorizados por la ABT, y que debido a esto se han visto afectadas 14 mil hectáreas; se atendieron 23 emergencias por incendios forestales.




Peor que el año pasado

En mayo de este año se registraron 2.065 focos de quema, cifra que está por encima de la registrada en el mismo mes de 2020, cuando fueron 1.528; en junio, la diferencia es mayor, porque se han reportado 3.701, es decir, 2.027 más que en 2020, cuando llegó a 1.674.

Similar tendencia se muestra en lo que va de julio, porque en la primera semana se ha registrado el 43% de todo el mes anotado el año pasado. Ahora van 1.420 focos de quema, mientras que en 2020, durante todo el mes fueron 3.283 los focos registrados.

En lo que va de este año, el 50% de lo consumido por el fuego se encuentra en tierras de uso forestal, el 22% en áreas naturales protegidas, el 12% en tierra de uso agropecuario y similar porcentaje en agrosilvopastoril.

La secretaría departamental de Medio Ambiente confirmó que el 99% de los incendios son provocados, por lo que pide a la Autoridad de Bosques y Tierras (ABT) que sancione a los responsables.





Amenazados

La semana pasada, un trecho del camino que va de Santa Rosa de la Roca a Piso Firme, poco antes del Parque Nacional Noel Kempff Mercado (Pnnkm), se encontraba ‘sembrado’ se llantas.

Para autoridades de la zona, la presencia de los neumáticos es una señal de que se quiere provocar incendios en la zona de Bajo Paraguá, como una forma de ahorrar el trabajo de desmonte a los avasalladores del área protegida municipal, que ya ha sido desmontada en más de 100 hectáreas. “Si no hay monte ya no hay nada que proteger”, es la frase recurrente por la zona, pero también entre los ambientalistas.

“Tuve que pedir ayuda, el otro día recogimos las llantas, cuando fuimos al evento por la tierra, realizado en San Miguel. Sin embargo, hace poco volvió de San Ignacio a la TCO la cacique de Piso Firme y nuevamente había llantas en el camino, pero más que antes; es una bomba de tiempo”, advirtió Maida Peña, cacique de Porvenir, otra comunidad de la TCO.





Peña dice que tuvo que pelear con todo el mundo en San Ignacio de Velasco para que la ayuden a recoger nuevamente las llantas. “Llamé al viceministro de Defensa Civil, fuimos hasta Piso Firme con Defensa Civil, también quise que vaya la ABT porque los causantes son los avasalladores”, dijo la cacique, que logró el apoyo solicitado, incluso del regimiento militar, para recoger los residuos.

Daniel Velásquez, subgobernador de la provincia Ñuflo de Chávez, pero que además fue vicepresidente del Consejo Forestal de Concepción, con el que elaboró una informe de los avasallamientos dentro de Bajo Paraguá, con ayuda de empresas y autoridades de la zona logró movilizar gente y vehículos para recoger bastantes llantas, luego de un recorrido de 300 kilómetros.

“Había 35 llantas distribuidas en la cabecera norte de Bajo Paraguá, que corresponde a Concepción, y hemos encontrado otro grupo de llantas entre La Mechita y el aserradero Cerro Pelado, distribuidas en los puntos de avasallamientos que se registraron, lo sé porque yo participé en comisiones”, dijo.

Velásquez aseguró que coordinará acciones con el subgobernador de la provincia Velasco. “Están listos para comenzar los incendios, es una preocupación extrema la que tenemos como provincia, es por estos avasallamientos que ya los documentamos, fueron públicos a nivel nacional el 3 de marzo, y están continuando”, alertó.

Esta amenaza se cierne sobre el área protegida municipal creada en enero de este año, y que junto al área protegida municipal Copaibo, de Concepción, podrían preservar más de un millón de hectáreas.

DiCaprio están con los ojos puestos en la zona. Cuando se difundió la noticia de la creación de Bajo Paraguá como zona de protección del bosque seco chiquitano, la estrella también posteó en su cuenta de Instagram un mensaje de esperanza.

“Casi tres millones de acres (un acre equivale a 0.5 hectáreas) de ricos bosques chiquitanos en el este de Bolivia están protegidos después de declaraciones recientes que crearon tres reservas municipales”, se leyó en la publicación. Acompañó el mensaje con tres fotografías de la región: un jaguar y dos paisajes aéreos de la región.

Casi a la par del área protegida de Bajo Paraguá, también se declararon en la misma categoría territorios en Concepción y en San Javier, en busca de proteger sus bosques.





El proyecto de DiCaprio tiene que ser implementado en San Ignacio de Velasco, Roboré, San Miguel y San Rafael. En cada municipio trabaja aproximadamente con 45 familias, que deben ser parte de la restauración con 400 plantines por hectárea.

Adolfo Chávez, de la Cidob Orgánica, aprovechó para lanzar una reflexión ante la problemática de la tierra. “Es tiempo de apoyar a quienes realmente están en primera línea en defensa de la tierra, es tiempo de que salga luz, de que la ciudadanía tenga claridad, no de que los dirigentes o ganaderos hagan creer que defienden la tierra. Tenemos que sincerarnos, o nadie hará algo al respecto”, dijo.