Algunos parlamentarios hablan de una “militancia ideológica”; otros culpan al TSE de no colocar sus nombres como inscritos en la plataforma Yo Participo. Pocos legisladores figuran con una militancia antigua o con un recorrido “histórico”

22 de enero de 2024, 4:00 AM
22 de enero de 2024, 4:00 AM

El MAS, el partido que llegó por primera vez al poder en 2006, tiene 204 legisladores, incluyendo suplentes; uninominales, plurinominales, supraestatales e Indígena Originario Campesino (IOC). De todos ellos, 35 no son militantes, otros dos no figuran en el Padrón Electoral y hay una diputada que es militante de UCS, pero fue electa por el MAS.

EL DEBER realizó una revisión de la militancia de los legisladores electos en 2020, cuando en el escena política no había ni arcistas ni evistas. Sin embargo, ambas facciones accedieron al parlamento por una sola sigla. Los legisladores aludidos justificaron sus casos y también perdieron los estribos por eludir el problema.

“En 2018 el MAS, para habilitar a Evo Morales, se inventa unas elecciones primarias y para esas primarias todos los partidos debían actualizar sus listas de militantes; era un requisito obligatorio, fue una estrategia para decir que tenía más de un millón de militantes, en realidad fue para habilitar a Evo Morales, es por eso que hay muchos inscritos en ese año”, graficó el abogado y analista en temas electorales Paul Antonio Coca, sobre el caso.

El senador suplente de Santa Cruz William Torrez Tordoya es uno de los que no figura como militante del MAS. EL DEBER contactó al legislador para consultarle este dato y explicó que él es militante de la izquierda desde hace muchos años. “La militancia tiene dos formas de presentarse, en términos formales y en términos no formales, los formales son estar en un libro, pero más allá esta la militancia ideológica y yo soy un militante ideológico del MAS”, explicó el senador afín a Evo Morales ante la inquietud.

La primera diputada plurinominal por Santa Cruz, Estefanía Morales, tampoco figura en el sistema Yo Participo del Tribunal Supremo Electoral (TSE) como militante del MAS. Este medio insistió en las llamadas al número de celular de la diputada y envió mensajes solicitando una entrevista, las mismas que no fueron atendidas hasta el cierre de este reportaje el viernes 19 de enero.

Pierde los estribos

La diputada suplente Maribela Vilela Lipa Aruquipa figura en Yo Participo como militante de UCS desde el 19 de diciembre de 2000. Sin embargo, tras ser consultada sobre este registro, la representante política perdió los estribos al tratar de evitar responder las razones de estas adhesiones.

“Usted no conoce mi trayectoria para decirme que no soy militante, estoy en una reunión”, afirmó enérgica la legisladora y en seguida cortó la llamada.

El MAS, para registrar a sus candidatos en septiembre de 2020, presentó las listas que contenían los datos de las personas, como el número de carnet de identidad y la fecha de nacimiento. Esos datos fueron cotejados con la aplicación Yo Participo, del TSE para revisar la militancia de los actuales legisladores.

Desde 2002

La diputada uninominal Juana Fanny Mamani Rivera tiene otro problema. Ella no figura en el Padrón Electoral, aunque para participar en una elección es un requisito indispensable tener registro, incluso para emitir el voto.

La diputada explicó que ella presentó todos sus documentos y que hubo una confusión porque su número de carnet apareció con un duplicado y le añadieron una clave y por eso no figuraba en al Padrón Electoral.

“Yo soy militante del MAS desde 2002; no sé por qué el Tribunal Electoral me puso el 2018, tengo mis documentos, estoy registrada pero figura el 2018 yo tengo mis papeles desde 2002”, insistió la diputada paceña a EL DEBER.

Desde 1999

La senadora y exministra de Justicia Virginia Velasco Condori también figura como no militante en el sistema del TSE, aunque ella insiste en que es parte del MAS desde 1999, pese a que ese partido recién participó con esa sigla a partir de las elecciones de 2002.

“Yo soy antigua militante, estoy inscrita desde 1999, a mis 17 años ya estaba de dirigente; entonces puede ser un error del Tribunal (Supremo Electoral)”, aseguró la legisladora ante las evidencias.

Presidencia

En el registro Yo Participo, el presidente de la Cámara de Diputados, Israel Huaytari, figura como militante del MAS desde el 14 de agosto de 2018. Pero su suplente, Casilda Cuellar Mendoza, no figura con ningún registro.

De los legisladores que fueron relevados de las listas tampoco están sus datos, es el caso del senador Leonardo Loza, quien reemplazó a Evo Morales como primer candidato por Cochabamba. Loza fue cambiado a último momento, por tanto, las listas entregadas al TSE no fueron actualizadas desde 2020.

Removidos

Evo Morales no fue el único caso. El actual embajador ante las Naciones Unidas, Diego Pary, era candidato a primer senador por Potosí y luego que fuera observado fue reemplazado por Hilarión Mamani, quien en ese momento era dirigente del Conamaq. El legislador figura hoy como minero.

La mayoría de los reemplazos se produjo en los escaños IOC. Un total de 24 candidatos de distintos departamentos fueron cambiados por la dirigencia que presentó los documentos. Sus nombres figuran en las listas del MAS, pero en la nómina de electos ya figuran otros nombres y no se supo en qué momento cambiaron las listas de candidatos.

En algunos casos, como el de Tarija, los dos candidatos a diputados supraestatales, titular y suplente, fueron removidos, pese a que existía un acuerdo con las dirigencias campesinas para incluir a sus representantes.

Para algunos expertos, la fidelidad de la militancia era un patrimonio de los partidos tradicionales, donde existía una estructura que mantenía a todos los parlamentarios unidos en una bancada con muy pocas excepciones. Ese panorama contrasta con la distribución actual, en la que las bancadas se atomizaron.

En masa

De los 204 legisladores que tiene el MAS en el parlamento, el 90% se inscribió entre junio y septiembre de 2018, así lo registra el sistema Yo Participo. En el caso del expresidente Evo Morales éste figura como militante del partido desde el 3 de marzo de 2002.

No es el caso de los legisladores de su bancada, quienes en su mayoría se registraron antes de que sea promulgada la Ley de Organizaciones Políticas. La revisión permitió verificar que el registro ante el TSE fue en el periodo en el que esta ley estaba en discusión en la Asamblea Legislativa, finalmente la ley fue promulgada el 1 de septiembre de 2018.

Los actuales parlamentarios fueron electos en las elecciones de octubre de 2020, por tanto, se registraron cuando aún desempeñaban cargos de dirigentes. Hay casos excepcionales como las de la diputada, Betty Yañiquez, que era diputada electa cuando se aprobó la ley de Organizaciones Políticas.

Todos

Según los datos recabados desde Yo Participo, son 35 asambleístas que no son militantes, de los cuales 14 son titulares y 21 suplentes. Ellos no figuran en las listas del masismo. Son 13 senadores en total que no están registrados como militantes, mientras que el resto -22- están en Diputados.

La mayoría de los que no tienen registro son varones, 19 en total, mientras que 16 mujeres no están registradas como militantes, aunque algunas de ellas afirman que sí tienen registro y que es responsabilidad del TSE que no incluyó en ese sistema.

El eje del país, además de los departamentos de Potosí y Oruro, sustentan la mayoría de la bancada masista, aunque esta está dividida entre arcista, afines al Gobierno y evistas defensores de Evo y de su retorno al poder.

La bancada más grande es La Paz con 50 legisladores, entre titulares y suplentes, senadores y diputados; le sigue Cochabamba, bastión de Evo Morales con 34 parlamentarios; Santa Cruz 26; Potosí 24; Oruro 20; Chuquisaca 16; Tarija 14; Pando 12; cierra Beni con ocho asambleístas, siempre tomando en cuenta que la mitad son titulares y la otra mitad suplentes, lo que sumados dan 204 parlamentarios.

Hasta el momento, quiénes conforman las dos bancadas, arcistas y evistas es un misterio, pues solo existen diputados conocidos que salen a declarar.