Opinión

El nuevo patrón de desarrollo de China traerá nuevas oportunidades al mundo

19 de octubre de 2020, 5:00 AM
19 de octubre de 2020, 5:00 AM

Recientemente, el presidente chino Xi Jinping, propuso acelerar la edificación de un nuevo patrón de desarrollo con la circulación doméstica como el cuerpo principal y las circulaciones duales nacionales e internacionales promoviéndose mutuamente. Esta es una decisión estratégica que se ha tomado de acuerdo con la etapa de desarrollo, el entorno internacional y las condiciones propias de China en la actualidad.

La construcción del nuevo patrón de desarrollo es un requisito inevitable para resolver la principal contradicción de la sociedad china en la nueva era. En los últimos 41 años de reforma y apertura, China ha logrado progresos titánicos y está a punto de consumar la construcción de una sociedad modestamente acomodada de manera integral, habiendo logrado liberarse por completo de la pobreza extrema, hasta fin del presente año y mejorando el nivel de vida del total de la población, 1.400 millones de personas. El nivel de productividad social de China ha aumentado significativamente, habiendo pasado a la vanguardia mundial en muchos aspectos. El problema pendiente más relevante, consiste en el desarrollo desequilibrado e insuficiente que se manifiesta especialmente en la débil capacidad de innovación, la baja calidad y eficiencia del desarrollo, y la gran brecha entre diferentes regiones, y entre zonas urbanas y rurales respecto al nivel de desarrollo y de ingresos. Construir un nuevo patrón de desarrollo y lograr un desarrollo de alta calidad, tiene por objetivo resolver esta contradicción entre la creciente demanda de la población por una vida mejor y el desarrollo desequilibrado e insuficiente.

La formación de un nuevo patrón de desarrollo se basa en la enorme demanda del mercado interno chino. En los últimos años, con el aumento del unilateralismo y el proteccionismo comercial a nivel internacional, así como el aumento del costo laboral y otros cambios de los factores productivos de China, se ha debilitado significativamente el papel del mercado internacional en la estimulación a la economía china. Mientras tanto China, cuenta con 1.400 millones de habitantes, 120 millones de entidades del mercado, 400 millones de personas de clase media, un PIB per cápita superior a 10.000 dólares estadounidenses, una tasa de urbanización por encima del 60%, y la tasa de contribución del gasto en consumo final al crecimiento del PIB que alcanza el 57,8%, presenta una notoria escalada del consumo y una creciente liberación del potencial de la demanda interna, por lo que se fortalece cada día la circulación doméstica. Al mismo tiempo, China cuenta con el sistema de suministro industrial más completo y de mayor escala en el mundo, sumado a su economía digital que se encuentra en un crecimiento vigoroso, proporciona un poderoso impulso para acelerar la formación de un nuevo patrón de desarrollo. Tomar la circulación doméstica como el cuerpo principal no es solo la tendencia del desarrollo económico de China en los últimos años, sino que además, tiene una base material sólida.

Para construir un nuevo patrón de desarrollo, es necesario despejar los bloqueos y subsanar los puntos rotos en la circulación económica interna, mejorar la productividad a través del desbloqueo de la circulación industrial, fomentar la competitividad mediante el desbloqueo de la circulación del mercado y promover el bienestar de la población mediante desbloqueo de la circulación socio-económica. Es aún más importante continuar tomando la reforma estructural desde el lado de la oferta como línea principal, cambiando el modo de desarrollo, reajustando la estructura económica, profundizando la reforma del sistema científico y tecnológico, mejorando la capacidad de innovación autónoma, dominando las tecnologías clave, mejorando la calidad y la eficiencia del desarrollo mediante la innovación tecnológica, a fin de mejorar la adaptabilidad del sistema de suministro a la demanda interna y, finalmente, fomentar un equilibrio dinámico de nivel más alto, en el que la demanda impulsa la oferta y la oferta crea demanda.

La construcción de un nuevo patrón de desarrollo no se trata de un “autocierre”, sino de promover un mayor nivel de apertura. Hacer un “bucle interior” con la puerta cerrada solo conducirá a un “bucle sin futuro”. La competencia y la cooperación que genera la apertura son vitales para mantener la vitalidad y competitividad del sistema de circulación nacional a gran escala. China está activamente comprometida con la mejora de su entorno empresarial. Según el informe del Banco Mundial, el entorno empresarial de China ocupó el puesto 31 en el ranking mundial de 2019, un ascenso de 15 puestos con respecto al año anterior y un ascenso de 59 con respecto a 2015, lo que la convierte en la economía que ha experimentado la mejora más acelerada de su entorno empresarial. China ampliará aún más su apertura al exterior, con niveles arancelarios más bajos, una lista negativa más corta y más facilidades para el acceso de inversiones extranjeras a su mercado, reglas de mercado más transparentes y un entorno empresarial basado en el imperio de la ley, la internacionalización y la facilitación. Una economía abierta de China proporcionará un entorno empresarial abierto, justo y transparente para empresas de otros países y atraerá al país asiático más mercancías y recursos de factores.

Ante el impacto de la pandemia por Covid-19 y la recesión de la economía mundial, China continúa introduciendo reformas y medidas de apertura para promover la integración de la economía mundial. Por primera vez, la Feria de Cantón se ha trasladado a la nube. Se emitió oficialmente el “Plan general para la construcción de Zona Franca de Hainan”. La versión 2020 de la lista negativa para el acceso de inversiones extranjeras se ha reducido aún más. La Feria Internacional de Servicios se llevó a cabo tanto en línea como de manera física y en noviembre próximo, se celebrará en Shanghai la III Expo Internacional de Importación de China. A nuestro juicio, la globalización económica es una tendencia inevitable para el desarrollo de la economía mundial y forma parte del destino de la humanidad.

La expansión de la demanda interna de China traerá más oportunidades de desarrollo al mundo, incluida la creciente demanda para la economía global y brindará más oportunidades de negocio e inversión para otros países. Al mismo tiempo, el funcionamiento eficaz del sistema industrial de China contribuye a la estabilidad de la cadena industrial global. En los primeros seis meses de este año, los trenes China-Europe Express han aumentado un 30% interanual en la importación y exportación de productos, convirtiéndose en un “caravana de camellos de acero”, que ayuda en mucho a la estabilización de la cadena de suministros mundial.

China ha contenido prácticamente la pandemia desde finales de marzo. La economía china creció en un 3,2% interanual en el segundo trimestre. El Fondo Monetario Internacional prevé que la economía china crecerá un 1,9% este año, será la única economía importante del mundo con crecimiento positivo. La tremenda resiliencia y vitalidad mostrada por la economía china, inyectará confianza e impulso en la economía global, lo que también ayudará a la recuperación de la economía boliviana.



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