El rol de la educación en el desarrollo de la sociedad
Ariel Quispe Orellana /Profesor de Matemáticas
¿Cuál es el motor que impulsa al desarrollo de una sociedad? ¿Qué condiciones les permiten a las personas alcanzar calidad de vida? Para la segunda pregunta existen varios factores, acceso a servicios básicos, salud, alimentación y seguridad, entre otros; para la primera, en cambio, los componentes se repiten, sin embargo, es necesario añadir algunas variables, como ser: inversión pública y privada, políticas económicas y sociales, visión de país y educación.
Si bien la educación no es el único factor que contribuye al desarrollo de la sociedad, es un elemento que puede potenciar al resto. No es de extrañar que los países que más invierten en educación, investigación, desarrollo e innovación son los que mejores niveles de calidad de vida poseen. Esto no solamente se debe a la formación que un país le brinda a sus ciudadanos en competencias profesionales (es decir, las competencias específicas o profesionales son aquellas que ningún otro profesional tiene, por ejemplo, un médico tiene habilidades que un abogado no posee y viceversa) sino también en competencias blandas (aquellas que permiten el trabajo en equipo, la comunicación asertiva, la gestión de las actividades y tareas así como la forma en la que nos relacionamos con los demás).
A partir de factores, como ser inversión, políticas económicas y otras, se puede lograr crecimiento, la economía de un país se incrementa, así como la riqueza, empero, la educación aporta al desarrollo de una sociedad garantizando su bienestar, pues si una persona es educada, formada desde el hogar fortaleciendo sus valores en la escuela o instituciones de educación superior, difícilmente realizará actos que vayan en contra de sus principios y valores. Es en este contexto en el que se generan las diferencias entre sociedades.
¿Cómo aporta la educación al desarrollo económico?
La educación se encarga de desarrollar habilidades y destrezas en las personas de una sociedad, así como el conocimiento necesario y suficiente para participar en las actividades y decisiones económicas desde un ámbito microeconómico hasta un ámbito macroeconómico, estas habilidades contribuyen al crecimiento y desarrollo económico de una sociedad de diversas formas.
En primer lugar, mejoran la productividad laboral, pues las personas son cualificadas adecuadamente, de tal forma que realizan sus actividades de manera eficiente y eficaz, esto genera que la economía de la región crezca y por ende el país.
En segundo lugar, se fomenta la innovación debido a que las personas que se han formado en ambientes enriquecidos que impulsan su creatividad podrán encontrar soluciones a diversos problemas coyunturales y estructurales.
En tercer lugar, a partir de la educación se forma capital humano, entendido como un factor que determina el crecimiento y desarrollo de una sociedad y país, pues las competencias y habilidades adquiridas pueden extrapolarse a diversas áreas, si el capital humano de una sociedad se incrementa, es decir, si se tienen personas con mayores habilidades se tienen mayores oportunidades de empleo o emprendimiento, lo que a larga deviene en mayores inversiones tanto nacionales como extranjeras.
Por último, si bien el crecimiento económico se fundamenta en el incremento de riqueza, la educación promueve que la expansión de la economía se realice de forma sostenible, equilibrada y tomando conciencia del impacto ambiental y social que esto conlleva.
* El autor tiene maestría en Educación Superior e Investigación Científica.
