En dos años, el Gobierno de Arce revierte 4 millones de hectáreas

En los primeros dos años de gestión del presidente Luis Arce Catacora se revirtieron un total de cuatro millones de hectáreas. De esa cantidad, 2,5 millones de hectáreas fueron redistribuidas a comunidades indígenas y campesinas. El dato fue divulgado por el director nacional del Instituto de Reforma Agraria (INRA), Eulogio Núñez.

Las declaraciones fueron reveladas en una entrevista con el canal estatal Bolivia TV, en donde se analizó la política de distribución de tierras en el país, al celebrarse los 26 años de creación del INRA.

La autoridad detalló los avances que se han realizado, desde que el presidente Arce asumió las riendas del país, en materia agraria.

Reveló que dejaron en manos del Gobierno de Jeanine Áñez un país con el 86% de saneamiento, tal como se registró en la administración del expresidente Evo Morales. Además, dijo que el INRA estaba completamente desorganizado y sin presupuesto para regularizar los trámites agrarios.

Destacó también que a la fecha se han recuperado tierras del latifundio que después fueron distribuidas a las comunidades indígenas y campesinas, que cuentan con el 55% de los predios saneados en sus manos.

“Tenemos en total 4 millones de hectáreas que se han recuperado de latifundios improductivos. De eso estamos hablando, de 2,5 millones que se han redistribuido a través de comunidades. Y tenemos 1,5 millones de tierras para hacer las dotaciones de nuevos asentamientos”, señaló.

La autoridad informó que hay una cantidad “muy importante de solicitudes” de tierra y que serán evaluadas para la dotación que, a diferencia de otros procesos, se realizará con asesoramiento. 

“Hay 2,7 millones de personas que tienen propiedades agrarias nuevas. Mucha gente no tenía apoyo en el área rural, pero con apoyo, estamos dando seguridad jurídica”, dijo Núñez.

Recientemente en un acto realizado por el aniversario del INRA, el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales, informó que de los 2,3 millones de títulos agrarios emitidos, solo 800.000 cumplían una función productiva. Había 1,5 millones de títulos de terrenos improductivos. 

“Eso significa –agregó la autoridad- que mucha gente tiene el título de la tierra, pero no la trabaja y va a llegar el momento -cuando terminemos de sanear todo- que hay que hacer cumplir la función social para los pequeños productores campesinos y para los hermanos empresarios”, dijo a los medios la autoridad.

Ante esta situación, el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Óscar Mario Justiniano, dijo que un 50% de la tierra que está en las comunidades no cumple la función social.

Explicó que el tema social (para las comunidades) y la función económica social (para propiedades privadas) tienen normativas que se deben cumplir y remarcó que como se hace la revisión de la FES también se debe hacer con la función social de las tierras tituladas a las comunidades.

Mientras el experto en tierras, Alcides Vadillo, dijo que aún hay problemas con la tenencia de la tierra, que el INRA debe resolverlos y para ello necesita tener una imagen más técnica, imparcial y transparente sobre el manejo de la tierra.

Además, alertó que buena parte de los terrenos recuperados por el Estado son concesiones forestales que fueron revertidas para entregar a campesinos.