Monseñor Leigue cuestionó la violencia que sufrió el hombre el pasado 1 de enero. Sus allegados le dieron el último adiós

16 de enero de 2023, 4:00 AM
16 de enero de 2023, 4:00 AM

Monseñor René Leigue, arzobispo de Santa Cruz, en su homilía de domingo lamentó el fallecimiento de Erwin Chávez Durán, el hombre que perdió el ojo derecho como consecuencia de la represión policial el pasado 1 de enero. Ayer fue enterrado en su natal Portachuelo en medio del dolor y pedidos de justicia por parte de sus familiares y amigos.

Durante su homilía, monseñor Leigue insistió en que nadie asume la violencia que estamos viviendo y, sin embargo, los medios de comunicación reflejan esa situación “¿Quién asume todo eso?, los últimos días hemos visto violencia de un lado y otro, ¿quién se hace responsable?, hay un muerto de esa violencia y quién va a responder ahora por esa vida”, cuestionó, al referirse a Erwin Chávez.

Además, pidió no caer en la violencia ante la provocación, porque hay quienes buscan situaciones de conflicto para echar la culpa a otros.

Leigue también manifestó que se habla de que estamos viviendo una democracia plena, pero ¿qué significará la democracia para algunos?, se preguntó. “Yo pienso que es expresar lo que uno siente, vive y ve, pero si no te dejan, ¿eso será democracia?”, cuestionó el religioso.

Pasada las 10:00 del domingo, familiares, amigos y pobladores de Portachuelo le dieron el último adiós a Erwin Chávez Durán. “¡Justicia!”, clamaron los familiares y allegados que acompañaron el cortejo fúnebre del hombre.

Vestidos de blanco y negro y llevando pancartas y globos blancos peregrinaron estas personas desde el domicilio de la madre del fallecido, donde se lo veló, hasta el cementerio de Portachuelo.

Previo a la misa de cuerpo presente, los familiares expresaron su dolor y reclamo hacia las autoridades de Gobierno, responsabilizando así de la muerte de Erwin, al ministro de Gobierno Eduardo del Castillo y a la Policía.

“Queremos decir que Dios no lo llamó a Erwin, lo llamó Eduardo del Castillo con sus secuaces delincuentes, pero Dios lo ha recibido en el reino del Señor”, expresó una representante cívica de Portachuelo.

Los allegados a Chávez indicaron que fue un buen esposo, padre, amigo y compañero, además de un buen portachueleño, por eso todos estuvieron presentes para darle el último adiós. “Quiero decirle a Matías, un niño de 10 años, que este gobierno dictatorial le quitó la vida a su padre, quiero decirle que el pueblo de su padre seguirá luchando por la libertad para que el hijo de Erwin sea un héroe como su padre”, dijo otra de las asistentes.