Para Trump, la carrera por la Casa Blanca en 2024 es más incierta que nunca. Uno de sus abogados cree que el caso caerá por su propio peso debido a dificultades legales

6 de abril de 2023, 4:00 AM
6 de abril de 2023, 4:00 AM


La inculpación de Donald Trump hace que todo EEUU se pregunte ¿y ahora qué? La carrera por la Casa Blanca en 2024 es más incierta que nunca y el calendario judicial del expresidente también.

Esto mientras el otro gran contendiente, el presidente demócrata Joe Biden, se toma su tiempo para anunciar una candidatura que se da por hecha.

Ante un juez de Nueva York, Donald Trump, el primer ex presidente estadounidense inculpado, se declaró no culpable de falsedad documental por unos pagos para silenciar asuntos perjudiciales antes de las presidenciales de 2016.

Queda por ver si este caso, uno de los muchos que preocupan al multimillonario, irá a juicio.

El calendario es fundamental para él, dado que espera ganar la nominación republicana para las presidenciales de 2024.

La justicia apuesta por una próxima comparecencia a finales de año y un juicio en enero de 2024, justo antes de las primarias, pero los abogados del expresidente no están de acuerdo.

“No iremos ante un jurado”, afirmó a NBC uno de ellos, Joe Tacopina, convencido de que el caso caerá por su propio peso debido a dificultades legales.

Entre tanto Trump, que quedó en libertad, puede hacer campaña a su antojo con la condición de “abstenerse de comentarios que puedan incitar a la violencia” sobre su caso, le advirtió el juez Juan Merchán, quien no le impuso la “ley mordaza”, una prohibición absoluta de mencionar el procedimiento en público.

Pero la moderación no es el punto fuerte del magnate, quien llamó al Congreso en su red Truth Social a “DEJAR DE FINANCIAR EL DOJ Y EL FBI” por lo que considera un “ABUSO DE PODER”, refiriéndose al Departamento de Justicia y el principal organismo federal encargado de hacer cumplir la ley.

Justiciable

Después de un viaje que intentó que pareciera lo más presidenciable posible, con avión privado y caravana de seguridad por las calles de Nueva York, Trump tuvo que enfrentarse a dos horas en una sala judicial de Manhattan.

El expresidente dio su nombre, edad y profesión, y se sometió a la toma de huellas dactilares, pero evitó la humillante foto policial.

El multimillonario asegura ser víctima de una “caza de brujas” promovida por los demócratas.