La ciudad se nos cae a pedazos
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La ciudad esta ¨sin Dios ni ley¨ como decían nuestros abuelos, se nos cae a pedazos, ni se diga del Centro Histórico. Los proyectos que se exige a los Arquitectos por parte de la Alcaldía, son revisados con minucia microscópica y exigencias de un sin fin de documentos sin sentido a los cada vez más pocos que hacen aprobar sus proyectos de construcción, sin embargo cuando se entra en etapa de ejecución de dichos proyectos, la Alcaldía se olvida del microscopio y deja que se construya como sea, echando por tierra el sentido de la minucia con la que revisa los proyectos; los cinco metros de retiro por ejemplo ya no se respetan en lo mas mínimo, en los retiros laterales las ventanas prácticamente abren a centímetros de los vecinos, al lado de una construcción legal, aparecen otras ilegales, y dejan entrever claramente que algo raro hubo y que todo es contubernio. Nuestros espacios públicos parques y plazas, totalmente descuidados, cierto que la gran mayoría de vecinos no cuida como debería sus espacios públicos, las aceras publicas son unas trampas para el peatón, motivo por el cual la gente no las utiliza y baja a las calles para caminar, poniendo en riesgo su integridad física. Cero programas de educación ciudadana, especialmente de cómo se deben utilizar los equipamientos públicos, de tal manera que la gente no tiene idea de para que sirven.
Sin embargo notamos que cada vez hay mas funcionarios dependientes del municipio, pregunto; ¿no deberían aprobarse los proyectos de construcciones en cada sub-Alcaldía distrital?, ¿no debería cada Sub-Alcaldía encargarse del control de obras en su distrito?, así el tiempo de aprobación de proyectos no sería tan largo, además esta oficina descentralizada, tendría un conocimiento cercano y cabal de donde será construida la nueva obra y el control sería próximo, y con coordinación de la representación vecinal de cada Distrito se debería además hacer gestión para la paralización y demolición de obras ilegales, al fin y al cabo es su distrito el que se estaría afectando y afeando, con obras fuera de normas.
Esto es apenas un pedacingo de observaciones al funcionamiento del desastre de la anterior y actual administración de nuestra ciudad, hay un montón mas de observaciones y sugerencias que haré llegar, si El Deber me sigue prestando su gran publico, todo esto con el objetivo de tratar de influenciar para tener una ciudad relativamente planificada, como nos la merecemos. Y para colmo, mientras la ciudad se nos cae a pedazos, hay gente más preocupada con la vestimenta y dizque el ¨buen gusto¨ del Alcalde para disfrazarse.
