La justicia define la libertad del mayor Muñoz por el asesinato de tres policías en el Urubó

La justicia definirá hoy si el mayor Álvaro Julio Muñoz Mejía, exjefe del Grupo de Inteligencia y Operaciones Especiales (GIOE) de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), investigado por el asesinato de sus tres camaradas en el camino a Porongo, sigue en libertad o de lo contrario ordena su regreso a la cárcel de Palmasola.

Muñoz, permanecía en el recinto de Palmasola, imputado por la Fiscalía como uno de los principales responsables en complicidad del asesinato de sus camaradas, Eustaquio Olano, Alfonso Chávez Flores y del voluntario del Gacip, José David Candia Orozco el 21 de junio, pero salió libre el 14 de agosto durante un fallo emitido por el juez natural de La Guardia, Ramiro Vedia, que le otorgó medidas cautelares con arresto domiciliario sin escolta policial, presentación a firmar en la Fiscalía cada 30 días, la prohibición de comunicarse con las víctimas y familiares de este caso y, por último, presentar un garante.

La determinación de la justicia causó preocupación en la defensa de las víctimas que apelaron al fallo, petición a la que se adhirieron representantes del Ministerio de Gobierno, del Comando de la Policía y de la Fiscalía.

La audiencia de apelación está fijada para este martes a las 10:00 en la sala penal segunda del vocal Wálter Pérez Lora. El acto se desarrollará de manera presencial y la justicia ya notificó a todas las partes.

Las investigaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), y la Fiscalía concluyeron que el mayor Muñoz, se encontraba el día del asesinato en el escenario del hecho.

Fueron testigos protegidos que revelaron en la cámara gesell que Muñoz entregó los uniformes o chalecos y gorras con el distintivo de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico a otros sujetos. La Fiscalía espera los resultados del peritaje a los teléfonos por el Instituto de Investigaciones, Técnico Científico de la Universidad Policial (Iitcup).

Además, los testigos protegidos revelaron que otra persona entregó las armas largas y después los sicarios se dirigieron uniformados de Felcn para ejecutar a los dos policías y al voluntario del Gacip.

Hasta el momento, permanecen detenidos Misael Nallar en Chonchocoro de La Paz, el colombiano Esteban Beltrán Muñoz en la cárcel El Abra de Cochabamba. En Palmasola están presos, Jassir Góngora Montero y Widen Nallar Noda, hermano de Misael Nallar.

Junto al mayor Muñoz también goza de medidas sustitutivas el abogado Rodrigo Gonzales, que fue imputado por delito de asesinato en grado de tentativa.
Dentro de las investigaciones que busca el esclarecimiento de la matanza de los policías, se activó a través de la Interpol el sello azul para la captura internacional del colombiano Jhon Wálter Tibaduiza Hernández, reconocido como como uno de los sicarios.

La Fiscalía confirmó que también se activó el sello azul para el prófugo Edgar Dorado Menacho, identificado como otro partícipe de la ejecución de los policías.

Celulares de Muñoz y Aparicio

Durante las declaraciones prestadas en la Fiscalía por el mayor Muñoz y el capitán Rubén Aparicio, se procedió al secuestro de sus teléfonos celulares. Ambos revelaron que estuvieron en Los troncos cuando Misael Nallar se entregó. Confesaron que, tras el asesinato de sus camaradas, se puso en marcha el plan Z dirigido por el excomandante Johnny Aguilera y por el jefe nacional de la Felcn José Illanes.

La Fiscalía espera los resultados del peritaje a los teléfonos por el Instituto de Investigaciones, Técnico Científico de la Universidad icial (Iitcup).