Las lecciones del paro

Este 2022 está siendo un año complicado y conflictivo para nuestra tierra, en los primeros 7 meses hemos tenido 60 días de bloqueos de carreteras apoyados y financiados por el Gobierno, y hemos tenido dos paros pidiendo justicia para nuestra región.

Acabamos un paro exitoso, consciente, militante, patriótico, y es que en la adversidad nunca hemos perdido nuestras motivaciones y para desarrollarnos como sociedad y templar nuestro carácter son necesarios estos contratiempos, pero jamás perdemos la alegría para enfrentar nuestros problemas. Somos un pueblo valiente porque creemos en lo que luchamos y amamos la libertad.

En este paro aprendimos a ser jueces, porque hemos juzgado la traición de aquellos que estaban elegidos para defender al pueblo y se han convertido en sus verdugos.
Hemos aprendido a ser investigadores, descubriendo las mafias y actos delincuenciales de los funcionarios públicos que no han dudado en utilizar los edificios históricos para congraciarse con sus nuevos mandantes.

Aprendimos historia a través del testimonio de una señora de 84 años que nos relató el ostracismo que obligo a exiliarse al prefecto traidor de la década de los 50 que permitió que persigan y asesinen a jóvenes cruceños que luchaban por el 11%.

La sanción social es importante y fundamental, debemos dejar de ser tolerantes con traidores, narcotraficantes, corruptos y vendidos, solo así recuperaremos plenamente los valores que nos inculcaron nuestros padres y abuelos y que nos hacen una sociedad exitosa y distinta.

Aprendimos que tenemos que saber elegir a autoridades que respondan al pueblo, que tengan un pasado ético y moral intachable de servicio a la comunidad o en su vida privada.

Aprendimos que la ciudadanía está dispuesta al sacrificio por las causas justas no solo para Santa Cruz, sino para toda Bolivia, sobre todo para aquellos hombres y mujeres que vienen del interior del país a buscar mejores días en nuestra tierra, esos son los que más necesitan el censo ya.

Aprendimos que hay ministros y viceministros que se degradan en su investidura, se disfrazan de pandilleros, abusan de la gente, utilizan la fuerza porque tienen el respaldo obligatorio de la Policía, pero no dejan de ser unos seres humanos devaluados.

Aprendimos que solo en unidad derrotaremos al poder central, impediremos la consolidación de la dictadura y recuperaremos la libertad, la justicia y la democracia.

Emociona ver a nuestras autoridades juntas, a nuestros diputados en la calle con la gente, a nuestros concejales en un trabajo de investigación y denuncia impecable. Así nadie nos derrotará.

Estamos por el camino correcto, vamos en buena dirección, en la distancia obligada me siento orgulloso de ser cruceño, porque siempre hemos luchado por causas justas y lo seguiremos haciendo, porque el que lucha por la justicia nunca le pela y siempre triunfa.

¡Arriba cruceños, sigamos haciendo historia!