Leydi Lach lleva el ritmo en la sangre y la piel

LEYDI LACH. FOTOS

Llegó a Bolivia en septiembre de 2017 y decidió quedarse, porque desde el primer día se dio cuenta de que podía dedicarse en un 100% a vivir de sus grandes pasiones: el canto y el arte.

Así es Leydi Lach, una hermosa morena que lleva la música en la sangre. Creció con la rumba, el son, el guaguancó, el bolero, la güajira, la salsa, la timba, el latin jazz, todo eso lo heredó en su Cuba natal, la tierra donde el sabor tropical se lleva en las venas.

En Bolivia tuvo la oportunidad de demostrar su talento en varios proyectos. En 2019 estaba trabajando con Quirquiña, agrupación que se preparaba entonces para su regreso. Entonces la banda de Alejandro Delius compartió escenario con Pk2 en el Chukuta Fest.

Pero no fue hasta mayo de este año, cuando Wally Zeballos, líder de Pk2, presentó a Leydi como la nueva voz de la agrupación cumbiera paceña.

“Estoy disfrutando mucho de tocar con ellos, si bien la cumbia no es un género que yo haya cantado mucho, me supe adaptar a la estética musical de Pk2 y me fascina. Y es que los músicos son increíbles, tienen mucha experiencia y lo más importante es que son excelentes personas, en este tiempo yo les he tomado un cariño inmenso”, señala Leydi.

Actualmente tiene una agenda muy intensa con la banda. Toca todos los fines de semana y viene realizando giras permanentes por los departamentos de Bolivia.

Presencia. Desde muy pequeña sintió una atracción
muy fuerte por el arte en su natal Cuba

Esencia

“Desde muy pequeña sentí una atracción muy fuerte por el arte, a los cinco años ya estaba bailando en el ballet de la TV cubana y a los seis cantando en el Coro Nacional Infantil. Estuve en varias compañías de flamenco y danza española, tenía a mi mamá como loca de un lado para otro. Estudié piano, tuve el privilegio de tomar clases con Liem Díaz y Maureen Iznaga, dos grandes cantantes de música popular cubana”, comenta la cantante y bailarina.

La familia paterna de Leydi está integrada por varios músicos y percusionistas, su abuelo es fundador del Yoruba Andabo, uno de los grupos folclóricos más importantes del país caribeño.

Leydi menciona a Benny Moré, Celia Cruz, Mercedita Valdés, Irakere, los Aldeanos, Yoruba Andabo, Celina, Omara Portuondo y La Lupe, entre algunos de los artistas cubanos que han marcado profundamente su espíritu artístico y musical.

Respecto a la situación de su país, está convencida de que ya es tiempo de que Cuba sea libre. “A pesar de la pandemia y de la situación precaria que se vive en la isla desde hace muchos años, los cubanos de dentro y fuera del país salieron a las calles durante varios días para exigir libertad, el pueblo cubano merece ser escuchado”, agrega.

Como artista y como mujer, Leydi Lach tiene muchos anhelos y aspiraciones. “Deseo con todas mis fuerzas seguir haciendo arte toda mi vida, es el alimento que necesita mi alma. Que no me falte salud, ni a mí ni a los míos, vivir con plenitud, a mi ritmo, haciendo lo que amo con el abrazo de mis padres, es mi sueño favorito”, expresa Leydi.

Por el momento, la artista continúa con los compromisos que se presentan con Pk2, mientras anticipa que viene trabajando en el próximo lanzamiento de su primer álbum solista. Se trata de un proyecto que Leydi viene ideando desde hace varios años y espera que pronto se logre concretar.

Juntos. Desde mayo de este año, forma parte de Pk2,
la agrupación de cumbia boliviana.