En marzo, ante la exigencia interna de renovación de la directiva, el TSE dio un plazo de 180 días que feneció la semana pasada. Los vocales Hassenteufel, Gutiérrez, Vargas y Tahuichi retrocedieron y desencadenaron la polémica

12 de octubre de 2022, 7:00 AM
12 de octubre de 2022, 7:00 AM


La Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral (TSE) no requirió de la participación de las dos nuevas vocales para emitir una resolución que deja “en suspenso” el plazo para la elección de directivas en los partidos, con lo que dio marcha atrás en una decisión tomada en marzo. Para la oposición eso beneficia a la facción del MAS que apoya a Evo Morales.

La resolución fue firmada por el presidente, Óscar Hassenteufel Salazar; los vocales Nancy Gutiérrez Salas, Francisco Vargas Camacho y Tahuichi Tahuichi Quispe. El 6 de octubre asumieron sus cargos dos nuevas vocales, pero ninguna de las dos firmó la resolución, porque no asistieron a la Sala Plena que emitió el documento firmado el 7 de octubre, al día siguiente que asumieron. 

En el mismo texto se aclara que la vocal Nelly Arista presentó “baja médica” y el documento no deja por escrito ninguna justificación por la ausencia de la firma de Yajaira San Martín. Por su parte la vocal Dina Chuquimia no participó “por viaje en comisión oficial”.

El diputado del Movimiento Al Socialismo (MAS) Rolando Cuéllar demandó a fines de marzo la renovación de toda la directiva del partido, incluido el cargo de Evo Morales, debido a que ya habría fenecido su gestión.

El legislador afirmó que los actuales dirigentes solo tendrían que haber estado dos años; sin embargo, ya llevan seis. Esta exigencia, entre otras, llevó a la expulsión de Cuéllar del partido, lo que no fue avalado por el TSE.

Poco después, el 29 de marzo de 2022, fue el TSE que exhortó, precisamente, a las organizaciones políticas de alcance nacional, departamental, regional y municipal, cuyas directivas hubieran superado el periodo de su mandato, a convocar y realizar obligatoriamente sus eventos internos (asambleas, congresos, etc) para la renovación de su directiva, bajo la supervisión del Órgano Electoral Plurinacional en un plazo máximo de 180 días calendario, desde la publicación, el 22 de abril de este año.

Este plazo venció el pasado 8 de octubre. La resolución explica que el artículo 22 de la ley 1096 de la Ley de Organizaciones Políticas dispone que la democracia interna de las organizaciones políticas debía adoptar sus propias instancias de deliberación y mecanismos de toma de decisiones como máxima expresión de su democracia interna para renovar sus directivas.

Sin embargo, el mismo TSE dio un paso atrás en las últimas horas con argumentos confusos. Así lo consideró el diputado Alejandro Reyes, de Comunidad Ciudadana (CC), quien señaló que “esta decisión deja a los colaboradores de Evo Morales más tiempo en la directiva y le da una mano cuando ya no corresponde. Por supuesto que son decisiones políticas que emanan de la presión que Evo Morales ejerce en distintas instituciones. Esto pone nuevamente la democracia en riesgo y al país en una situación en la que los bolivianos, nuevamente, debamos unirnos en defensa de ella”. 

Cuéllar optó por la cautela, e interpretó que “el TSE dio 180 días, la Sala Plena debe adecuarse a la CPE. No creo que esto favorezca a Evo Morales, porque deja claro que no tiene facultad de convocar a más ampliados ni a hablar a nombre del MAS, porque ya feneció su gestión en la directiva”.

El senador del MAS Félix Ajpi lamentó que “ahora resulta que todas las decisiones de instituciones independientes son culpa del MAS. El TSE es un órgano independiente y toma decisiones autónomas”, manifestó.

El Órgano Electoral, “a fin de garantizar el ejercicio de la democracia interna de las organizaciones políticas”, decidió poner en suspenso esta elección.