Impuestos Nacionales advirtió al escritor y comediante con procesarlo por una parodia de los trámites en la entidad que publicó en TikTok; sin embargo, tuvo que retractarse, luego del apoyo popular

30 de junio de 2022, 7:56 AM
30 de junio de 2022, 7:56 AM


-¿Cómo surgió el TikTok que molestó a los de Impuestos Nacionales?
Vengo haciendo TikToks desde hace más de un año escogiendo temas aleatorios de experiencias propias, de cosas que me pasaban y un día tuve que abrir mi NIT y me pareció chistoso lo fácil que es abrirse uno y lo difícil que es cerrarlo, y bueno, dije ‘vamos a escribir un guion de esto’, y así lo hice. Eso fue en mayo. Hoy (martes) llega hasta mi casa una carta firmada por el mismo presidente de Impuestos Nacionales donde exigía que me retracte y borre el video.

 Lo más chistoso es que empaticé con él en su intención de tratar de defender la institución, pero me pareció sin sentido e ingenuo lo que me estaban pidiendo: que me retracte de un chiste. Pensé que no me quedaba otra cosa que comunicarlo a mi modo; decirle a todo el mundo lo que me estaban pidiendo. Si querían meterme preso o hacerme un juicio por un chiste, pues adelante ¿qué más me quedaba? Nadie me representa, no pertenezco a ninguna institución o empresa. Soy un artista de los muchos en Bolivia que andan sueltos a la suerte de Dios (risas). 

Tuve la suerte de que los medios se hicieron eco del tema. Por la tarde, cuando vi las redes, el tema se había hecho viral y me empezaron a llegar mensajes de diputados, curiosamente de oficialistas y de oposición, abogados y gente de todos lados. 

-¿Te sorprendió que después de este problema hayas sumado miles de seguidores en las redes sociales?
Más que las cifras me sorprendieron las llamadas, el apoyo de la gente y hasta de la Defensoría del Pueblo. Me quedé como paralizado y me quebré, como cuando me da ansiedad y depresión.

 A eso de las 17:30 me tocaron el timbre y era otra vez de Impuestos Nacionales y digo: ‘Deben venir a llevarme con escolta y todo’, pero era la carta en la que retiraron la demanda y decía que se había descontextualizado todo y que garantizaban la libertad de expresión. 

-¿Qué crees que quisieron decir con descontextualizar?
Es la eterna lavada de manos, pero la carta era demasiada explícita para decir que los malinterpreté o descontextualicé. Me imagino que se arrepintieron, porque tal vez les llegó una llamada de atención, de que en vez de estar viendo TikToks se dediquen a su laburo. 

-¿El poder en Bolivia es intolerante con el humor?
No puedo decir que soy un perseguido político, que el Gobierno no me quiere, porque incluso me han escrito del oficialismo para decirme “oye, qué huevada lo que te ha pasado”. Me parece que se trata de gente de una generación que no entiende lo que estamos haciendo. Los boomers (generación que nació a mediados de los años 40 y finales de los 60) son solemnes y los boomers bolivianos con licenciatura, maestría y poder tienen un palo introducido en lo más profundo de su corazón que no les permite aflojar un poco (risas).

 Creo que se sintieron en la potestad de amedrentar y decirme ‘modérese, pida disculpas’, como si le hablaran a un muchacho, pero tuve la suerte de que la gente de a pie salió a protestar. Si los de Impuestos ya tienen la imagen de que nadie los quiere, peor les va a ir ponerse a corretear comediantes.

 Para mí alguien quiso ganarse su estrellita persiguiéndome para decirle a su jefe: “Mire, lo hicimos bajar el video”. Un ejemplo más del ‘lamebolismo’ institucionalizado que hay en nuestra burocracia.

Estamos en el siglo XXI, si me mandan sus abogados va a ocurrir lo que ha ocurrido recién. Voy a salir a decirles: ‘Ahí están los poderosos que no aguantan un chiste’. Yo soy un comediante que siempre me río del poder, porque eso es el humor. Ya está bueno que nos sigamos riendo del jodido, del cagado, del indígena, de los de abajo. Ya está bueno que sigamos riéndonos solo del pobre, empecemos a hacerlo del poder. Creo que es hora de dar una vuelta de tuerca a la comedia boliviana y usémosla para lo que está hecha, para cuestionar al poder.

Más bien, invito a los artistas a que se sumen al tren y usen las plataformas a su favor. Compartan su arte para hacerle frente a los poderosos y a los políticos. Creo que los políticos también se han dado cuenta que funciona cuando le dan un uso de entretenimiento. Entonces, don Mario (Cazón, presidente de Impuestos Nacionales), hágase un TikTok. Lo espero en el próximo trending.


Trayectoria
Pablo Osorio es orureño, pero radica en Santa Cruz desde
hace varios años. Es autor de dos libros de poesía y ha sido
merecedor de varios premios literarios,
como el Premio Nuevo Cuento Breve de El Deber 2003, Premio Nueva Poesía Joven Simón I. Patiño 2007 y una mención en “Cuento Franz Tamayo 2008”. Desde 2016 inició su carrera artística en el mundo del ‘stand up’ con éxito
y ha impartido más de una decena de talleres de este género.