Se prevé que la puesta en marcha de la factoría sea el 6 de agosto de 2023. Calculan que por ventas se generen unos $us 600 millones al año. Las piscinas que forman parte de la cadena industrial seguirán aportando materia prima al proyecto

2 de julio de 2023, 4:00 AM
2 de julio de 2023, 4:00 AM

La industrialización del carbonato de litio, a escala exportable, se encuentra en la recta final de una carrera que empezó en 2008. Con un avance de obra del 93% la planta industrial, ubicada en el Salar de Uyuni, vuelve a cobrar vida y calienta los motores para generar una producción anual de 15.000 toneladas métricas (TM) de este insumo estratégico y tan codiciado por las transnacionales.

EL DEBER visitó el Complejo Industrial de Litio, en Llipi, al sudoeste de Potosí. En el lugar predominan las estructuras de fierro. Son uno cuatro niveles a los que se accede por escalares de metal.

La planta de carbonato de litio tiene tres naves industriales. Está el núcleo central donde se produce el insumo. Luego sigue la nave de servicios que provee de vapor y agua fría para alimentar los diferentes servicios. La tercera nave es donde se realiza el acopio de la materia prima.

Este complejo industrial a cargo de Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) fue diseñado para utilizar la materia prima de las piscinas que se empezaron a construir en 2012, durante la gestión del ex presidente, Juan Evo Morales.

El cloruro de potasio es otro producto que ya se comercializa/Fuad Landívar
El cloruro de potasio es otro producto que ya se comercializa/Fuad Landívar

Salvador Omar Beltrán, gerente de Proyectos de la Planta Industrial de Carbonato de Litio, indicó que las condiciones en que se encontró la factoría, hace un año, “era la de una planta en inicio de construcción, pese a que ya tenía tres años de haber comenzado los primeros trabajos. Había una fiscalización y supervisión que no eran las correctas, pero desde que un nuevo equipo se hizo cargo del complejo se hizo una reingeniería para que la planta pueda ser eficiente y eficaz. Esperamos ponerla en marcha hasta el 6 de agosto”, adelantó.

Beltrán indicó que la capacidad instalada del complejo industrial es de unas 15.000 TM al año y precisó que la capacidad diaria de producción va a depender del tipo de salmuera que reciban. También detalló que la estabilización (capacidad máxima de producción) de la planta requerirá entre dos y tres años, que es “un tiempo estándar en la minería”. Para llegar a esta instancia se realizó una inversión de unos Bs 700 millones.

Carla Calderón, jefa de Proyectos de la Planta Industrial de Carbonato de Litio, detalló que en el complejo trabajan unas 700 personas y para la puesta en marcha de la factoría se incorporarán a otras 200 personas. La cantidad final de trabajadores estará condicionada con el grado de automatización que se tenga en el lugar.

Obreros explican el proceso de industrialización del carbonato de litio
Obreros explican el proceso de industrialización del carbonato de litio

Recursos

Franklin Molina, ministro de Hidrocarburos y Energía, remarcó que una vez que la planta se encuentre produciendo al 100% de su capacidad instalada, las 15.000 TM, “el país podrá percibir unos $us 600 millones al año. Eso si se mantienen estables los precios, pues el año pasado se ubicaron en un promedio de $us 75.000 la tonelada métrica, por lo que los ingresos pueden ser mayores”, indicó Molina. El actual precio internacional del carbonato de litio se ubica en los $us 40.000 la tonelada métrica.

La autoridad sostuvo que la planta de industrialización del litio arrancará con una capacidad de producción de un 80% y que ese porcentaje irá en aumento mientras dura el proceso de estabilización de la planta.

Ante la consulta, respecto a que si la planta de YLB solo trabajará con la tecnología tradicional de extracción de litio mediante el proceso de evaporación de piscinas, la autoridad indicó que en primera instancia esta será la tecnología a tomar en cuenta, pero que no se debe descartar una producción híbrida con la entrada de la tecnología de Extracción Directa de Litio (EDL), que a su criterio, es más eficiente y amigable con el medioambiente.

Jorge Campanini, investigador del Centro Documental de Información de Bolivia (Cedib), citado en Mongabay, sostuvo que en la actualidad la extracción del litio y la producción del carbonato de litio —materia prima para las baterías— se hace mediante el proceso de piscinas de evaporación.

Campanini señaló que hay muchas dudas con relación a los procesos que implican el cambio hacia la EDL y que una de esas dudas es que “en el mundo, o hasta donde conocemos, no existe ninguna planta industrial de EDL que extraiga la cantidad o el volumen que Bolivia está planteando”.

Otra preocupación del investigador son los residuos químicos que vaya a generar esta nuea tecnología de extracción.

“Creemos que hay muchos riesgos con el EDL, aunque la publicidad dice que es más amigable en términos del uso de agua, sin embargo, en términos de residuos químicos nadie nos ha dicho nada”, subrayó.

Campanini explicó que existen tres formas de extracción directa: como la electrólisis, la captación por membranas y la ósmosis inversa. “Algunas se combinan y otras se utilizan solas. Pero cada tecnología EDL responde a un salar diferente, porque cada uno tiene diferentes características físico-químicas. La salmuera no viene sola, sino que viene con magnesio, cadmio, plomo, cromo y muchas cosas más, entonces, si el EDL solo capta el litio, ¿qué pasa con los residuos?”, se preguntó Campanini.

El potencial boliviano

Regina Salas, directora de Exploración y Explotación de Recursos Energéticos, del Viceministerio de Energías Alternativas, explicó que en el Salar de Uyuni de 512 metros cuadrado, con un espesor de 50 metros entre recursos medidos y recursos indicados, hay 2 millones de TM de litio y otras 19 TM de recursos inferidos que hacen un total de 21 millones TM.

Gonzalo Mondaca, investigador del Cedib, señaló que los 21 millones de TM en Uyuni son recursos cuantificados, pero aún no reservas que sean comercialmente viables de explotación.

En 2019, el Gobierno anunció que la empresa estadounidense SRK certificó la existencia de 21 millones de reservas en el Salar de Uyuni. Para Mondaca son datos internos que maneja el Gobierno, que no fueron difundidos de forma oficial ni certificados por la Agencia Internacional de Energía.

El investigador hizo notar que las reservas certificadas son importantes para atraer inversiones, algo que urge en Bolivia para acelerar la producción de litio que se cotiza a precios altísimos como a principios de año cuando llego a valer $us 70.000 la TM.

Sobre el potencial boliviano, Álvaro Hernán Arnez, viceministro de Energías Alternativas del Ministerio de Hidrocarburos y Energía, remarcó que estos recursos se van a fortalecer con los datos que se obtengan de los salares de Pastos Grandes y Coipasa.

Arnez precisó que en la actualidad Australia con producción minera, no de salares, domina “lo que es el escenario mundial en la comercialización de carbonato de litio con una producción de 63.000 toneladas métricas al año. Pero eso se puede modificar con la producción boliviana que llegaría a 65.000 con el aporte de las plantas de Uyuni y Coipasa (25.000 cada una) que construirá el consorcio CBC y las 15.000 de la plana de YLB. Con esto buscamos cambiar el escenario mundial a partir de 2024”, sostuvo Arnez.

Para ello la autoridad indicó que es necesario dar un salto en el uso de tecnología para la extracción de litio, “algo que demanda 18 meses con el sistema tradicional de las piscinas, pero que con la incorporación de la EDL nos permite ahorrar mucho tiempo”.

Un tiempo que empezó hace 15 años cuando Morales nacionalizó el litio y recién se está en la recta final de esta carrera internacional.

Se firman dos nuevos convenios con chinos y rusos

En la sede de Gobierno, en un acto realizado el 29 de junio, YLB firmó convenios con la Corporación Citic Guoan (perteneciente a Citic Group de China) y la empresa Uranium One Group (perteneciente a la Corporación Rosatom de Rusia), donde se comprometieron una inversión de más de $us 1.400 millones para la construcción de dos plantas con tecnología de Extracción Directa de Litio (EDL), en las localidades de Pastos Grandes y al norte Uyuni.

Franklin Molina, ministro de Hidrocarburos y Energía, precisó que cada planta producirá 25.000 TM para sumar en conjunto 50.000 TM de carbonato de litio.

Molina sostuvo que para la planta de Pastos Grandes, la empresas rusa invertirá $us 578 millones y que la misma se nutrirá con energía geotérmica algo que hará más eficiente su producción en un 95%.

El ministro de la cartera energética indicó que la firma china en el norte del Salar de Uyuni realizará una inversión de $us 857 millones en la construcción de otra planta industrializadora de litio. 

En cuanto a la viabilidad de la EDL, Molina subrayó que la Corporación Citic Guoan en 2022 produjo 20.000 TM de carbonato de litio bajo esa tecnología de extracción, “por lo que ya no se debe seguir debatiendo si la EDL existe”.

El presidente Luis Arce, sostuvo que entre enero y junio ya se comprometieron $us 2.8000 millones para la industrialización del litio. Antes, en enero ya se había firmado un acuerdo con el consorcio CBC por $us 1.4000 millones.