El sector automotriz es uno de los sectores más perjudicados por la escasez y el encarecimiento de la divisa estadounidense. Afecta a las importaciones y a las ventas

21 de julio de 2024, 4:00 AM
21 de julio de 2024, 4:00 AM

Mientras el Gobierno minimiza el impacto de la escasez y el encarecimiento del dólar, varios sectores comienzan a tener problemas por este fenómeno. El automotriz es uno de ellos. Actualmente, las concesionarias han incrementado sus costos por transferencias en más de un 40%, lo que ha afectado el flujo de sus importaciones y ventas. El efecto es en dominó, ya que incluso se han encarecido los costos de repuestos y diferentes accesorios. La situación es “extremadamente difícil y complicada”.

No es el único problema a la vista. El transporte pesado también se ha visto afectado por el aumento del costo en la importación de sus equipos y repuestos, como llantas.

Desde 2023, Bolivia registra una escasez de dólares que se acentuó en 2024. La gravedad hizo que incluso el gobierno, junto con el sector privado, coordinara una serie de acciones para contrarrestar esta carencia. No obstante, la situación no ha mejorado.

Esto se traduce en una cotización elevada en el mercado que superó los umbrales de los 7, 8, 9 y hasta Bs 10. Esto ha incrementado incluso los costos por operaciones en la banca, que maneja la cotización oficial.

Situación

Erick Saavedra, presidente de la Cámara Automotor de Bolivia, sostuvo que la escasez de dólares afecta a los distribuidores de vehículos porque este sector necesita realizar una planificación meticulosa para coordinar con las fábricas y prever importaciones con una anticipación de seis a dieciocho meses.

“Las fábricas confirman la producción de vehículos entre tres y seis meses antes, y las empresas deben realizar pagos en dólares para asegurar esa producción. La falta de dólares dificulta cumplir con estos pagos a tiempo, lo que puede resultar en la pérdida de espacios de producción”, explicó.

Agregó que recuperar estos espacios puede tomar de seis meses a dos años, afectando gravemente el inventario y la capacidad de los distribuidores para satisfacer la demanda del mercado.

Esto no solo provoca retrasos en la disponibilidad de vehículos, sino pérdidas financieras y daña la reputación de las empresas.

Otra fuente del sector mencionó que muchas concesionarias han tenido que reducir personal porque no pueden tener el producto a tiempo y los márgenes de utilidad se están reduciendo. “ La situación tiende a empeorar si no hay cambios estructurales”, sostuvo.

Costos de transferencias

Saavedra reveló también que los costos por transferencias internacionales han fluctuado considerablemente, llegando a superar el 40% la semana pasada.

Esta volatilidad, según el empresario, añade una presión adicional sobre los costos de importación, “llevando a los distribuidores a ajustar los precios de los vehículos hasta cuatro veces en una semana”.

“Las cotizaciones ahora tienen una validez de solo 24 horas, reflejando la incertidumbre del mercado”, añadió el ejecutivo.

Saavedra indicó que es inevitable trasladar estos costos adicionales a los precios de venta, ya que no hacerlo sería insostenible financieramente para las empresas.

“No hacerlo sería un suicidio financiero, ya que ninguna empresa importa productos para perder utilidades o patrimonio”, dijo.

Se sabe que el mayor problema en el sistema financiero radica en la falta de dólares disponibles tanto a nivel local como internacional. Esta escasez está obligando a las empresas a recurrir al mercado paralelo, donde el dólar se cotiza mucho más alto que la tasa oficial.

Venta de autos
Venta de autos

La dificultad para adquirir dólares en el sistema bancario obliga a recurrir al mercado paralelo, donde el tipo de cambio es más elevado| Fotografía: Ricardo Montero

Actualmente, las transacciones internacionales incluyen un costo adicional significativo debido a la disparidad que existe entre la tasa de cambio oficial y la que se maneja en el mercado.

“No es comisión, lo que se cobra en realidad es cuánto está el dólar en la calle”, indicó otra fuente especializada.

La diferencia en la tasa de cambio está generando un aumento considerable en los costos operativos para las empresas que necesitan realizar pagos en dólares.

La banca boliviana también está sintiendo los efectos de esta crisis. La falta de dólares limita la capacidad de realizar transacciones internacionales y giros, afectando la operatividad del sector financiero.

Desde la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) indicaron que las financieras están atendiendo giros y remesas desde el exterior en la moneda de origen. Asimismo, con relación a las cuentas en moneda extranjera mantenidas por los clientes de estas entidades, las mismas están siendo atendidas de acuerdo a disponibilidad de cada una bajo un esquema de devolución programado y consensuado con los clientes para honrar en su integridad estas cuentas.

Opciones para concesionarias

Saavedra sostiene que una de las opciones para las concesionarias sería que los importadores no reflejen los costos reales en sus precios, generando una situación de dumping para mantener su cuota de mercado, lo que eventualmente resultaría en un mal negocio a largo plazo.

“La situación es extremadamente difícil y complicada. Se necesitará una combinación de ajustes operativos, financieros y estratégicos para navegar esta crisis y asegurar la sostenibilidad del sector automotor a largo plazo”, señaló.

Actualmente, el sector estudia aplicar medidas como reducciones en las operaciones, lo que podría incluir la disminución del personal, el achicamiento del tamaño de las operaciones y la renegociación de contratos con proveedores y fábricas.

Así también, otras concesionarias prevén una reducción en la oferta de vehículos de alta gama priorizando los modelos más económicos y comerciales.

Hay otros sectores afectados por esta situación. Juan Yujra, dirigente del transporte pesado, señaló que esta situación está incrementando significativamente los costos operativos y dificultando la renovación y mantenimiento de los vehículos.

Yujra explicó que los costos para adquirir repuestos y camiones han aumentado drásticamente debido a la escasez de dólares y los problemas con las transacciones internacionales.

“Si un tambor comprabas en Bs 5.200, ahora ya está en Bs 7.000”, afirmó el transportista.

El dirigente hizo notar que la falta de dólares y el tiempo que lleva convertir bolivianos a dólares complican aún más la situación, elevando los costos de importación de repuestos y vehículos.

La situación se agrava con el aumento de los aranceles y los costos adicionales por las transacciones de cambio de moneda. Yujra detalló que, por ejemplo, un camión de segunda mano que en el país de origen cuesta $us 50.000, en Bolivia puede llegar a costar alrededor de $us 90.000 debido a los aranceles y otros costos asociados.

“Aquí hay que pagar casi el valor de $us 40.000 para que se nacionalice ese camión”, mencionó.

Tipo cambio invariable

Se buscó una respuesta del Banco Central de Bolivia, pero no atendieron el requerimiento de EL DEBER. Sin embargo, en declaraciones a medios estatales, el ente emisor sostuvo que el tipo de cambio del dólar se mantendrá invariable como el resto de las políticas macroeconómicas, como resultado de los indicadores positivos que muestran la expansión económica con estabilidad.

“En materia cambiaria, el programa establece un tipo de cambio claramente determinado desde hace muchos años, y no se tiene previsto cambiar. No hemos ni siquiera pensado en hacer algún tipo de modificación”, dijo Edwin Rojas, presidente del BCB.

No obstante, la situación es diferente en la economía real.