Sucre y Potosí se convirtieron en las capitales de dos de los deportes de mayor popularidad en el país

27 de diciembre de 2021, 11:00 AM
27 de diciembre de 2021, 11:00 AM


El Sur también existe para el fútbol y el básquet bolivianosSucre y Potosí se convirtieron en las capitales de dos de los deportes de mayor popularidad en el país.

Dos plazas que no se caracterizaban por liderar ambas disciplinas, pero cambia, todo cambia.

Independiente regresó después de 17 años y sorprendió en el fútbol logrando el título de la División Profesional.

Pero eso no fue todo. Universitario de Sucre también recuperó su sitial en la máxima categoría del fútbol nacional. Le arrebató la plaza a Real Potosí en los partidos por el descenso indirecto.

Después de 25 años los capitalinos contarán con dos equipos en la Primera división. La última vez que se dio esto fue en 1996, cuando el propio Independiente y Stormers formaban parte de la Liga del Fútbol Profesional.

El fenómeno del básquet potosino viene de antes, hace cinco años que la Villa Imperial le quitó el sitial de privilegio a tradicionales plazas como Tarija, Santa Cruz, La Paz y Cochabamba, de donde salían los campeones habitualmente.

Hoy Potosí domina el baloncesto boliviano. Nacional Potosí se consagró campeón de la Liga Nacional de Básquet en 2021, continuando lo hecho por otros dos equipos de esa ciudad.

Nacional obtuvo por primera vez el galardón, pero es el tercer equipo potosino que obtiene el título entre 2017 y 2021. El Club Pichincha Potosí ganó el título en 2019 y el Club Deportivo Calero (CNC), dio la vuelta olímpica en 2017 y 2018.

¿Cómo logró Potosí convertirse en el centro de este deporte, si solo tiene tres equipos y donde no surgen jugadores por una cuestión de estatura?

La conclusión parece simple. Potosí se convirtió en una plaza atractiva e importante por la seriedad de los proyectos, y la pasión con que se lo vive en los últimos tiempos.

“Hoy convoca más gente que el fútbol, hay una media de cuatro a cinco mil espectadores”, sostuvo el dirigente Roger Mamani, a tiempo de agregar que un basquetbolista que llega como refuerzo puede ganar hasta $us 5.000, igual que un futbolista.