El Instituto Nacional de Estadística (INE) avanzó solo el 30% de la actualización cartográfica

1 de agosto de 2022, 10:06 AM
1 de agosto de 2022, 10:06 AM

El Instituto Nacional de Estadística (INE) avanzó solo el 30% de la actualización cartográfica. Las demoras de este proceso están asociadas a tres razones: la importación tardía de dispositivos móviles, la ausencia del director Humberto Arandia que impidió la autorización de contratos y en consecuencia se generó la falta de personal para el Censo de Población y Vivienda. Así lo reveló, a EL DEBER, el coordinador de la Ruta del Censo, Mario Galindo, quien sostuvo varias reuniones con la institución.

“Fuimos a una reunión con el INE en la que nos dijeron que el avance de la cartografía hasta el 30 de mayo era del 23% y el 30 de junio el avance estaba en 30%. Cuestioné cómo era posible que en un mes solo hayan avanzado el 7%. Me dijeron que eso ocurrió porque no llegaron las tablets que pidieron desde China, luego no había quién firme los contratos para el personal de la actualización cartográfica por la baja médica del director y la renuncia de la ministra Gabriela Mendoza, y por esto no había personal”, sostuvo el especialista.

Galindo añadió que las tablets fueron encargadas a China el 20 de abril y observó la demora del pedido porque “quien ha hecho la importación de un libro conoce que ese trámite tarda dos a tres meses mínimo y más si son tablets”.
Los equipos se utilizarán para la actualización cartográfica, es decir, el registro de la cantidad de habitantes y viviendas en todo el país. En este censo, el INE desarrolló un sistema que permite el relevamiento de datos de forma digital. Por eso la importancia de los dispositivos móviles.

En junio, el viceministro de Autonomías Álvaro Ruiz ya había admitido que no habían tablets disponibles, pero atribuyó el problema a los conflictos entre Rusia y Ucrania, además mencionó que por efectos de la pandemia habían contratiempos con las importaciones.

Estamos cortos de tiempo para que lleguen algunos equipos tecnológicos, pero se está trabajando. Vamos a poner todos los esfuerzos para tratar de llegar al 16 de noviembre y se lleve adelante el Censo”, afirmó el 20 de junio a los medios de comunicación.

Asimismo dijo que estaba preocupado por el lento avance de la cartografía en las áreas rurales, el cual para esa fecha no había empezado.

Luego de un mes y durante la reunión de alcaldes de ciudades capitales, la alcaldesa de Cobija, Ana Lucía Reis, sostuvo que había problemas con la compra de equipamientos por la falta de estos insumos en el mercado exterior.
Hubo varios pedidos e insistencia para conocer el avance del censo de manera oficial, a la fecha no se conoce un avance real y el estado de los trabajos del INE.

Para Galindo, el Gobierno convocó de manera estratégica al Consejo de Autonomías para camuflar las demoras y errores cometidos por los encargados de la encuesta nacional. Esto les habría permitido cambiar el discurso e insistir que la postergación fue por petición.

“En lugar de decir que han hecho mal las cosas, convocan al Consejo de Autonomías con gobernadores que no tienen idea del censo y aceptan. Y dicen: ‘como nos han pedido, lo postergamos’. ¿Y por qué no dicen la verdad? Porque todo el mundo les va a decir que son unos ineptos”, dijo sin reparo el hombre que encabeza las 60 instituciones que monitorean el avance del censo.
Desinstitucionalización

La ausencia por baja médica y una bullada renuncia de Humberto Arandia, director del INE, ocasionó un serio desfase en las contrataciones de actualizadores y supervisores del operativo de campo.

En junio, EL DEBER se contactó con los encargados departamentales de Cochabamba, Potosí y Pando en todos los casos mencionaron que hacía falta la contratación de personal que podía llevar meses ya que la aprobación de los contratos debía pasar por la dirección general.

La crisis asomó a los responsables del Censo. Hubo cambios de autoridades, renuncias a medias y casi nada de respuesta. Este medio solicitó de forma insistente entrevistas con algún responsable del INE, el vocero presidencial y el viceministro de Planificación, David Guachalla, pero no hay respuestas para hablar del estado del Censo.

Tras la reunión con el presidente Luis Arce y otras autoridades, el burgomaestre cruceño Jhonny Fernández dijo que el progreso del censo fue poco y que no se pueden dar porcentajes, pero es “casi nada”.

Según las publicaciones y requerimientos de personal del INE, está vigente una convocatoria denominada “Expresiones de interés” en su tercera versión que prevé contratar más de 60 personas para la actualización cartográfica en Chuquisaca.

El también director del Centro Boliviano de Estudios Multidisciplinarios (Cebem), Mario Galindo, confirmó que el Gobierno espera el regreso de Arandia, quien habría sido intervenido por tercera vez de la rodilla el anterior sábado.


Cronograma reformulado

Las primeras semanas de agosto se difundirá el cronograma reformulado del censo, tras los nuevos acuerdos con los alcaldes de 10 ciudades capitales y rectores quienes presentarán sus propuestas técnicas.

Sin embargo, el Gobierno nacional afirmó que el marco normativo vigente determina que el Censo de Población y Vivienda se realice hasta mayo o junio de 2024 y que, a partir de ahora, se encarará una labor técnica que permita eliminar los riesgos identificados para llegar a una fecha concreta, tema que está todavía por definir tras la difusión de información con las regiones.

Sergio Cusicanqui, ministro de Planificación, sostuvo también que hay una recomendación de la comisión internacional de alto nivel, que respalda ese plazo para la encuesta nacional e incluso propone como fecha de realización octubre de 2024.

Indicó que producto de la reunión del Consejo Nacional de Autonomías, el encuentro del presidente con rectores de universidades y la cita con alcaldes de las ciudades capitales, más El Alto, se generaron una serie de labores que requerirán más tiempo en su realización.

“Se generaron requerimientos que van a representar una necesidad de mayor tiempo que se requiere para este proceso censal. Es necesario que todo este proceso minimice los riesgos que se han identificado”.