El cambio climático y los fenómenos meteorológicos cada vez más extremos, han provocado un aumento de las catástrofes naturales impactando de forma desproporcionada en los países más pobres

El Deber logo
27 de diciembre de 2021, 11:00 AM
27 de diciembre de 2021, 11:00 AM


El cambio climático y los fenómenos meteorológicos cada vez más extremos, han provocado un aumento de las catástrofes naturales impactando de forma desproporcionada en los países más pobres, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (Undrr).

El número de fenómenos meteorológicos, climáticos e hídricos extremos está aumentando y será más frecuente y grave en muchas partes del mundo como consecuencia del cambio climático. Eso significa más olas de calor, sequías e incendios forestales como los que hemos observado recientemente en Europa y Norteamérica.

El aumento del vapor de agua en la atmósfera ha exacerbado las precipitaciones extremas y las inundaciones, y el calentamiento de los océanos ha afectado a la frecuencia y extensión de las tormentas tropicales más intensas, explicó un responsable de la agencia de la ONU.

El cambio climático también ha exacerbado los fenómenos extremos asociados a algunos ciclones tropicales, lo que ha aumentado la intensidad de otros fenómenos extremos como las inundaciones y los impactos asociados a ellas. Esto ha aumentado la vulnerabilidad de las megaciudades, deltas, costas e islas de baja altitud en muchas partes del mundo.

Tornado en Kentucky

Casas derruidas, señales de tráfico retorcidas como regalices, árboles tronchados que llevaban ahí toda la vida y trozos de madera, metal y escombros por todas partes.

La estela de destrucción que el tornado dejó a su paso por Mayfield, al oeste de Kentucky, ofrecía un paisaje más propio de una zona arrasada por la guerra que de una tranquila localidad en medio de la nada.

Alrededor de un centenar de muertos fueron reportados por las autoridades tras el paso de varios tornados en el centro y sur de Estados Uniods el 11 de diciembre.

Inundaciones en Europa

Las catastróficas inundaciones en Europa occidental en julio causaron la muerte de más de 120 personas, y cientos más desaparecidas.

Imágenes impactantes de la devastación en Alemania y Bélgica mostraron aldeas enteras bajo el agua, con automóviles encajados entre edificios derrumbados y escombros. Los Países Bajos y Luxemburgo también se vieron afectados por las lluvias extremas.

Expertos describieron estos acontecimientos como las lluvias más intensas en un siglo.

A inicios de julio, también las lluvias torrenciales desencadenaron un potente alud de lodo en Atami, prefectura de Shizuoka, a unos 90 kilómetros al suroeste de Tokio, Japón. El deslizamiento de tierra arrasó unos 130 edificios.

Los incendios forestales también formaron parte de esta estela de desastres, principalmente en las regiones de la Amazonia, en varios estados de EEUU y también en extensas zonas de la estepa rusa siberiana.