Sebastián Putz dejó Bolivia para mudarse a Alemania junto a su familia, con el fin de buscar tratamiento médico para su pequeña Lunnet, quien padece de una enfermedad autoinmune.

5 de junio de 2023, 11:26 AM
5 de junio de 2023, 11:26 AM

Este año la vida de Sebastian Putz (31) dio un giro de 180 grados que nunca imaginó.

El presentador de televisión dejó su trabajo, su familia y hasta su país. La motivación es sublime, buscar una cura para su pequeña hija Lunnet, quien sufre de vasculitis leucocitoclástica.

Putz no la pensó dos veces, junto a su esposa Valeria Suárez y su niña, emprendieron viaje hasta Alemania, donde radican hace tres meses, con el objetivo de buscarle tratamientos a Lunnet.

Él confiesa que vendió todo para irse a Europa, no sabe cuándo volverá a su tierra natal, pero asegura que tiene fe en que todo saldrá bien, que Dios lo preparó desde joven para enfrentar obstáculos. A su público le pide que no lo deje solo y que lo siga a través de sus redes sociales.

- ¿Hace cuanto tiempo que se fue Alemania?

Nos fuimos en mayo, hoy ya se cumplen 3 meses.

- ¿Por qué tomaron la decisión de irse?

Porque sentíamos que no avanzábamos. En los cuatro meses de tratamiento que Lunnet tuvo en Bolivia no hubo respuestas, ya que su caso no era común.

Y cuando se trata de tu familia buscas la mejor opción.

- ¿Cómo está Lunnet?

Lunnet, gracias a Dios, está muy bien. Sigue siendo esa niña llena de luz, amor, alegría, tierna y fuerte como la ven siempre en nuestras redes.

- ¿Qué les han dicho los doctores?

Que el tiempo del tratamiento no es exacto, cada cuerpo reacciona diferente, pero tenemos fe en que Lunnet va a estar bien y eso es lo que nos importa

- ¿Dejó todo por el amor y salud de su pequeña?

Cuando de salud se trata y más si es la de tus hijos se busca la mejor opción que se pueda dar, sé que muchas familias van a estar de acuerdo conmigo, porque no soy el primero ni el último al que le pasa algo así.

No nos sentimos víctimas de una situación, es una oportunidad más para esforzarnos, darlo todo y seguir aprendiendo de cada paso que damos en la vida.

Está experiencia con Lunnet, ¿Cómo les cambió la vida?

Es un giro de 180 grados, nunca esperas que alguien de tu familia se enferme ni estás preparado para eso. Todos estos cambios conllevan mucho aprendizaje.

Empezar de cero y lejos de los nuestros no es fácil, pero tampoco es imposible.

- ¿Con quiénes está allá?

En la ciudad que nos encontramos viven mi hermano y su familia (justo en el edificio de al lado). Sin ellos ayudándonos y acompañándonos yo creo que nos hubiéramos vuelto locos.

- ¿Costó elegir entre quedarse e irse?

No fue una decisión fácil, pero se tomó con convicción. Se trataba de la salud de nuestra pequeña y queríamos lo mejor para ella.

- ¿Cuándo vuelven a Bolivia?

La verdad es que todos nuestros planes de vida han cambiado y no tenemos fecha de retorno.

- ¿A qué se está dedicando allá?

Ahora me estoy dedicando a mi familia, la salud de Lunnet y buscando nuevas oportunidades.




Sebastián Putz



Sebastian rodeado de su esposa Valeria Suárez y Lunnet Putz, en Alemania



- ¿Cómo son sus días?

Nos organizamos por las mañanas para responder correos y hacer llamadas en Alemania.

En las tardes pasamos tiempo en familia, como rutina siempre desayunamos, almorzamos y cenamos juntos.

- ¿Qué sacrificios hizo para irse a vivir a otro país?

El sacrificio por mi hija fue dejar todo desde el trabajo, familia, amigos, nuestra comodidad, vendimos todo lo que pudimos.

Siempre postea mensajes de ánimo, ¿Cómo está Sebastián?

Muchas veces esos mensajes son también para mí. La motivación no está siempre, es buena pero limitada, hace falta determinación y constancia.

Sebastián tiene también sus caídas, nunca lo comparto porque estamos acostumbrados a mostrar vidas perfectas en las redes, como dice mi mejor amigo “No pasa nada”. No es fácil, pero creo que Dios me ha preparado desde muy chico con muchos obstáculos.

- ¿Quién es su mayor apoyo ahora?

Sin duda alguna Dios y nuestra familia.

- ¿Cree que después de la tormenta viene la calma?

Hasta para poder reaccionar bien en la tormenta misma hace falta la calma, para pensar, analizar y actuar correctamente y no sólo por instinto, a veces hace falta quebrarse para reconstruirse.

- ¿Qué le dice a su público que lo extraña en la pantalla chica?

A mi público maravilloso, que siempre me ha dado su apoyo, quiero que sepan que los quiero. Espero que sigamos conectados a través de las redes y en un futuro estar de vuelta por Bolivia.