Coinciden en que Santa Cruz hoy lucha a solas por adelantar el proceso. Sugieren pactos con otras regiones del país y también con otros sectores cruceños. Hoy se realizará la tercera cumbre por el censo. Se alista una comisión política

2 de septiembre de 2022, 7:28 AM
2 de septiembre de 2022, 7:28 AM


En el último tiempo, el pedido de realización del censo de población y vivienda en 2023 va perdiendo intensidad, y el departamento cruceño se aferra, pero cada vez en mayor soledad.

Es la conclusión a la que llegaron representantes de algunos sectores consultados, que además coinciden en la necesidad de replantear la lucha, establecer alianzas con otros departamentos y generar conciencia nacional de que el censo no solo beneficia a las regiones con mayor inmigración, sino también a las que tienen fuga de habitantes. 

El ex líder cívico Carlos Dabdoub considera que la estrategia debe consistir en involucrar a las otras regiones en la importancia de hacer el censo a la brevedad posible, ya que, por ahora, tal vez el resto del país cree que se trata de un capricho cruceño, cuando más bien deberían entender que “Santa Cruz se está jugando por todo el país, está peleando a solas, mientras los demás, bien gracias”.

Más allá de los pactos entre regiones, hace un llamado a apostar por alianzas multisectoriales, ya sea entre universidades, instituciones cívicas, etc. 

En ese sentido, el presidente de la Comisión Interinstitucional por el Censo, el rector de la Uagrm Vicente Cuéllar, se reunió con las universidades de todo el país en una conferencia extraordinaria, en la que se discutió la demanda del sistema nacional, que tiene que ver con recursos económicos debido al déficit, y que podrían resolverse con el censo. 

En este acercamiento, según Cuéllar, los presentes entendieron que en los últimos años el Gobierno central ha convocado de manera individual a las universidades, “y cuando negociamos el presupuesto de forma individual somos débiles”, dijo.

Ayer, Cuéllar también se reunió con trabajadores y el ejecutivo de la Central Obrera Departamental (COD), Rolando Borda. En el encuentro dejaron claro al presidente de la Comisión Interinstitucional su rechazo al paro como una medida de presión para la realización del censo en 2023. Borda dijo que los trabajadores apoyan que el censo se realice “de acuerdo a los parámetros técnicos más adecuados”

En representación de los gremiales, la diputada de Creemos, Clotilde Padilla, informó que los comerciantes formales de todo el país marcharán este 16 de septiembre en todos los departamentos, no solo en rechazo al Proyecto de Ley 249-21, sino también a favor de la realización del censo nacional en 2023.

“Queremos saber cuántos trabajadores independientes hay en Bolivia, y pedir al Gobierno que escuche la petición del pueblo”, expresó la legisladora.

Carlos Dabdoub señaló que, sobre la tozudez del Gobierno, de insistir en el censo para 2024, cree que tiene que ver con tres razones. En primer lugar, se verificaría la realidad económica y social del país, que “seguro va a contrastar con los resultados exitosos que siempre quiere mostrar”. 

Como segundo punto, dijo que un censo antes de las elecciones demostrará que hubo fraude, cuando el número de población actual sea menor al que refleja el Tribunal Supremo Electoral.

“Y la tercera razón, que es relativa, es que como Santa Cruz es el único departamento opositor en este momento, con fuerza y unidad, al aumentar el número de parlamentarios, seguro pensarán que también aumentará la fuerza política y opositora en el próximo gobierno”, afirmó.

Por ahora, Dabdoub cree que persiste la idea de que solo los municipios con más migración van a ganar con el censo.

En la misma línea va la opinión del ex líder cívico Germán Antelo, que plantea la estrategia de sumar, ya que no es una lucha exclusiva de Santa Cruz, sino también de los municipios y provincias más pobres. “No solo los que han ganado gente, como es el caso de Santa Cruz, El Alto y La Paz, sino de los que están perdiendo población y representación legislativa, porque quiere decir que las políticas de este gobierno son totalmente equivocadas”, afirmó.

Antelo enfatizó en tres aspectos: No claudicar, generar conciencia de que es una lucha nacional, y liderar este movimiento desde Santa Cruz, para dar fin al manejo centralizado y autoritario del país, al que llamó re centralización.

Por último, si bien cree que el Comité Cívico y otras instituciones cruceñas deben asumir esa responsabilidad como autoridades políticas, aclaró que es el pueblo el que tiene que definir todo en las calles. 

Para él, lo mejor no es llevar esto a una asamblea de la cruceñidad, sino a las calles, a un cabildo, donde centenares de miles de personas definan la ruta, sobre todo porque hoy el “Gobierno intenta darle nombre a este movimiento, como si fuera del gobernador o de una persona, pero esto no es un capricho particular, es una voluntad ciudadana, defendiendo un derecho que le corresponde, de conocer su realidad”, aseveró. Al pueblo cruceño, y boliviano, Antelo le dice que “el que se cansa pierde, y a eso es a lo que el Gobierno juega”.

El ex prefecto Carlos Hugo Molina también opinó que Santa Cruz debe mostrar a Bolivia que su preocupación por el censo no es por el departamento, sino por lo que necesita todo el país. 

Asimismo, indicó que la región debe demostrar la importancia del censo a partir de las necesidades que tienen los departamentos que están perdiendo población. “Mientras más se retarde el censo, más dificultades tendrán esos departamentos porque van a seguir perdiendo población, y el censo debe servir para aprobar políticas correctivas en materia económica, sociales y de políticas públicas”, argumentó.

En cuanto a la distribución de recursos, dice que si bien estaría en función a la población, existen los mecanismos de compensación para los municipios y departamentos por debajo de la media nacional de crecimiento.

El analista Rolando Schrupp adujo que basta un simple análisis superficial de la situación para evidenciar la falta de planeación estratégica y la obediencia a criterios reaccionarios, con sobrecarga hormonal y baja carga neuronal, “donde es el Gobierno nacional quien tiene la iniciativa política”. 

Tras estas consideraciones, apuntó a que este es un momento de decisión, si seguir por la senda de la profundización de las fracturas internas cruceñas, o hacer una pausa para definir una estrategia, y revertir la inminente derrota y desgaste. 

Schrupp dijo que es tiempo de reunir la inteligencia institucional cruceña, definir los roles de los actores y encomendar tareas. 

Identifica varios puntos “críticos”: los principios de lucha; el objetivo estratégico, que es la profundización de la autonomía; el objetivo ejecutivo, que es el pacto fiscal; los objetivos operativos, es decir la construcción de una narrativa y contranarrativa. 

En consonancia con las demás opiniones, Schrupp apostó también por la adhesión de aliados estratégicos regionales. “Si la causa es pelear por el pan y no las migajas, plantear a Potosí, Beni, etc. que unamos esfuerzos para que la distribución fiscal no sea 80% para el centralismo y 20% para las regiones, que sea 50/50”, agregó. 

Entre otros puntos críticos, Schrupp mencionó la lucha política articulada entre bancadas en el Congreso y los parlamentos regionales. También las medidas de derecho por incumplimiento de deberes, daño económico al Estado, discriminación, etc., a cargo de constitucionalistas. 

Además, recomendó la organización interna, con definiciones de los roles de los actores; el relevamiento de datos propios; y, por último, medidas de hecho no violentas, como el cierre de fronteras, marchas a la sede de Gobierno, desobediencia civil, instituciones paralelas, protestas callejeras, huelgas, etc. 

“¿Por qué peleamos realmente? ¿Quién es el enemigo? ¿El poder colonial que nos sumerge en la desigualdad y la pobreza?”, aludió.

Para el analista Marcelo Arequipa, Santa Cruz necesita una estrategia que vaya en dos sentidos: liderazgo político y capacidad de gestión pública de ese liderazgo.

Asume que estos dos elementos los condensaba el anterior gobernador, Rubén Costas, y no así el actual.
"Camacho solamente cuenta con el liderazgo político, pero aún muy reducido a Santa Cruz, sin una mirada nacional, esto se refleja por ejemplo en el hecho de que Manfred Reyes Villa, en Cochabamba, en las encuestas de opinión tiene mejor ubicación que Camacho", dijo.

Al igual que sus pares analistas, considera que a Santa Cruz le urge articular un bloque de oposición similar a lo que era la media luna en su tiempo.

Comisión política
El coordinador técnico de la Comisión Interinstitucional por el censo, Manfredo Bravo, informó ayer que se está trabajando en la conformación de una comisión eminentemente política, porque “el accionar del Gobierno es político”. 

Bravo aseguró que ya se está buscando alianzas con otros departamentos y sectores para interpelar al Gobierno desde otra perspectiva.