La economía circular ha cobrado relevancia en los últimos años debido a los beneficios que genera para las empresas y la sociedad.

4 de enero de 2022, 10:31 AM
4 de enero de 2022, 10:31 AM


Concebida como un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para crear un valor añadido, la economía circular ha cobrado relevancia en los últimos años debido a los beneficios que genera para las empresas y la sociedad. 

Conscientes de esta realidad y para conocer el comportamiento, actitud, percepción o motivación de los cruceños en relación a la sostenibilidad y a la adopción de prácticas de la economía circular, el Observatorio Económico de Mercados y Opinión de la Universidad Técnica Privada de Santa Cruz (Utepsa) decidió realizar el estudio: Los ciudadanos y la economía circular.

El trabajo, en el que se encuestó a 532 personas, reveló que el 45% de los cruceños asocia el término economía circular con reducción, tratamiento y reciclaje. De acuerdo con la investigación, un 49% de los cruceños considera que realiza acciones o tareas de cuidado con el medioambiente y el 69% cree tener un conocimiento claro sobre economía circular.

En línea con su supuesta mayor concienciación y la poca crítica que ejercen sobre sí mismos, los cruceños creen que ellos mismos (57%) son menos responsables sobre los problemas medioambientales que la ciudadanía en general, el Gobierno (63%) y las empresas en general (54%).

A decir del economista y docente de la Utepsa, Gabriel Alpiry, para que la idea de economía circular se desarrolle en gran medida se necesita implementar diferentes políticas, pero que estas no solo obliguen a los cruceños a cumplirlas, sino que la misma población demuestre que pueden realizar estas acciones sin ser obligados ya que una de las dificultades recae en la poca sociabilización respecto al tema.

Por su parte, Daniel Vaca, ingeniero ambiental y docente de la Universidad Autónoma Gabriel Rene Moreno (Uagrm), considera que el reciclaje en Santa Cruz no es tan importante porque las empresas tienen otras prioridades, como generar ganancias. “Si la cultura del cruceño fuera cuidar el medioambiente habría acciones que se reflejen y no solo críticas hacia nosotros mismos”, afirma. 

Comportamiento circular

Es estudio también reveló que la prohibición de ciertos comportamientos de movilidad por parte de la administración pública (77%) y el llevar a reparar un producto para alargar su vida útil (72%), se reflejan como los comportamientos más valorados.

Las categorías como electrónica en el hogar (70%) y electrodomésticos (58%) son las mejor valoradas como productos a reparar, frente a un (29%) que considera no relevante hacerlo. Luego respecto a artículos de segunda mano, la más llamativa es ropa (43%), mientras que un 16% indica que no lo hace con ningún producto.

René Salomón, director de la Fundación Trabajo Empresa, indicó que la circularidad de los procesos puede cambiar la forma de hacer las cosas y proteger los sistemas de la tierra. Además, los productos se pueden mantener en uso continuo para que duren más de una sola vida al estar hechos con un diseño circular.

“Para interiorizarnos de la importancia que tiene la economía circular para el planeta y por supuesto nuestro país, debemos resaltar que, en noviembre de 2021, Amigarse y otros aliados como Fundación Trabajo Empresa han logrado colocar en contexto la temática, ya que, según un informe del Banco Mundial, para 2050, el mundo producirá 3.400 millones de toneladas de residuos por año, un aumento drástico a los 2.100 millones de toneladas de desechos globales que en la actualidad genera”, dijo Salomón.

Lo preocupante no es esa proyección de incremento de residuos, sino el impacto en el medioambiente que generaría. Y es que, en Bolivia si bien por la información que se cuenta, los residuos no superan las 7.000 toneladas por día, se estima que el crecimiento sea mayor a lo esperado a escala mundial. Esto preocupa ya que solo se recicla entre un 4 y 5% de los residuos generados y el destino del resto de esos desechos son vertederos que en la actualidad no cumplen con las normas vigentes.

En este contexto, según Salomón, Bolivia debe trabajar en procesos de economía circular que incluyan la mayor cantidad de productos para ser reutilizados, pero debidamente prediseñados para cumplir ese rol de ser artículos optimizados bajo los parámetros de la circularidad. 

A decir del filósofo colombiano, Bernardo Toro, se debe entender que nadie tiene la capacidad de producir los recursos naturales, solo el planeta. 

Por ello, según Toro, se tiene que pasar de la inteligencia guerra-depredadoras a la inteligencia del cuidado, aprender a cuidar los bienes públicos, aprender a hacer transacciones ganar-ganar y aprender a cuidar del planeta.

Casos de éxito

Empresas como Coca-Cola y CBN están avanzando hacia la economía circular. El reciclaje hoy es parte integral de sus procesos.

Coca-Cola Bolivia, siguiendo el camino marcado a escala global por la compañía y su compromiso por “Un mundo sin residuos”, ha maximizado su trabajo para ser más circular y sustentable cada día. En la actualidad, 50 millones de botellas retornables se encuentran en circulación en el mercado boliviano, lo que representa el 40% del total del portafolio a escala nacional.

Por su parte, la CBN ha realizado inversiones para una producción sustentable y el control de su huella de carbono. Esto ha ubicado a la industria como la primera en cumplir los límites permisibles para descargas líquidas industriales, que retornan para alimentar los sembradíos de las comunidades cercanas. Por ello, fue reconocida por la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, el Pacto Global Bolivia y el sistema de las Naciones Unidas.