El artista argentino explora el infinito desde el pozo brillante

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13 de junio de 2021, 4:00 AM
13 de junio de 2021, 4:00 AM

Desde 2019, Vicentico venía grabando lo que hoy es su nuevo disco El pozo brillante, una obra de 11 piezas en las que explora nuevas posibilidades de géneros e interpretación. Antes, estuvieron las giras y los discos con Los Fabulosos Cadillacs; después, llegó la pandemia y todo se detuvo. Hasta que el músico argentino, de 56 años, decidió que era tiempo de lanzar su octavo álbum solista. Vicentico habló con EXTRA de esta producción y de una vida junto a ‘los Cadillacs’, su otra familia.

 _El disco abre con Freak, un tema muy pegajoso con un personaje muy particular. ¿Hay algo de Vicentico en ese freak del que habla la canción?

Es un personaje dentro de los tantos personajes que están en el disco. Freak es una canción que apuesta al todo, más allá de la letra. Es una canción con humor, la música es del tipo años 50, que a mí me gusta mucho. Pero, sí, un poco me identifico, siempre fui diferente desde que era chico.

_¿A qué hace referencia El pozo brillante?

Siento que toda la grabación del disco fue dentro de un pozo en el que estuvimos encerrados mucho tiempo y en el que nos fuimos acostumbrando a la oscuridad, entonces, uno empieza a ver cosas que sugieren ideas que llevan hacia la luz.


Al igual que Astor, el hijo de Flavio Cianciarulo, Florián, hijo de Vicentico, es parte de Los Fabulosos Cadillacs


_¿Es la misma luz que se necesita para seguir adelante en este momento tan oscuro?

Siempre se la necesita. Yo no le temo a esa oscuridad, me interesa como disparador para pensar, incluso en este momento que vivimos, que es bastante extraño. La idea del pozo brillante es lo que uno puede descubrir de uno mismo y de los demás en esa aparente oscuridad. Sin duda, tenemos muchas cosas por descubrir en este tiempo.

_¿De qué te has preocupado en estos meses de pandemia?

Me preocupé mucho por mantener mi cuerpo activo. También por tener la mente lo más fresca posible, por no caer en la tontería, por cuidarme de un modo agradable y cuidar a los que tengo cerca. Además, me he preocupado de escuchar y de hacer mucha música, aproveché el encierro para trabajar en cosas musicales y personales, como tocar instrumentos que casi nunca toco, irme un rato al estudio. Y, por supuesto, también no hacer nada, de eso me ocupé, un poco de vagancia.

_Van a ser 20 años desde que comenzaste tu carrera solista. ¿Fue un buen momento para comenzar?

Y sí, fue un buen momento. Es como cuando algo se cae de maduro. Generalmente, no me pongo por delante del carro, prefiero que me lleve e ir viendo qué va pasando. En ese momento (2002), los Cadillacs decidimos parar de tocar por tiempo indeterminado, así que yo decidí seguir, porque lo único que sé es hacer canciones, así que me dediqué a eso. Por eso fue que seguí adelante también, no sé otro modo de vivir la vida. Para mí ha sido muy lindo este oficio y que se me permita ejercerlo.

Vicentico conserva una amistad de vieja data con Los Ángeles Azules. En 2019 tocó con ellos en De Buenos Aires para el mundo

_Hay quienes afirman que el estilo de Los Fabulosos Cadillacs es inclasificable, por la variedad de géneros de los que se nutren. ¿Estás de acuerdo? ¿Se puede decir lo mismo del estilo de Vicentico?

Sí, aunque nunca me he preocupado de encontrar un modo de clasificar lo que hago, no sé para qué sirve. Yo creo que la música está dividida en dos grandes ramas, una es la música popular, que es en la que yo formo parte, y la otra es la música culta, que está conformada por la gente que dedicó su vida entera al estudio de la música. Lo que yo hago es fácil, a veces es torpe, pero también puede ser hermoso.

_¿Hacer música popular se podría considerar una ventaja, en el sentido de que te permite abarcar otros campos fuera de lo estrictamente musical?

Claro, tiene esa belleza y esa inmediatez que nos permite comunicarnos con otras personas. Y, cuando esa comunicación es con músicos de otras áreas, se torna aún más profundo y más sólido.

Los Fabulosos Cadillacs, en el show que dieron en Santa Cruz en 2017.

_Una de esas ocasiones ocurrió en tu participación en el disco De Buenos Aires para el mundo, de Los Ángeles Azules. ¿Cómo se da tu acercamiento con el grupo mexicano?

Con Los Ángeles Azules nos une una relación bastante antigua ya, porque yo ya había cantado con ellos otras veces. Es una banda que me gusta, que conozco sus canciones y siempre fue una alegría y un honor que me inviten a cantar con ellos. Eso fue alucinante, por suerte, me pasa con otros artistas también, es lindo colaborar.

_Después del disco La salvación de Solo y Juan y una serie de giras, que incluyó la grabación del show en vivo en el Madison Square Garden y su participación en varios festivales, Los Fabulosos Cadillacs se tomaron una nueva pausa. ¿Hay la posibilidad de volver a hacer cosas juntos en un corto plazo?

Claro, está todo bien. Nosotros nos tomamos un tiempo para descansar después de una gira, pero, en este caso, vamos a juntarnos en agosto para un festival en Chicago. Luego vamos a volver a parar hasta que sea tiempo de volver a tocar (risas). Los Cadillacs son mis hermanos, nos hablamos todo el tiempo, siempre hay proyectos para hacer, lo que pasa es que nos tomamos nuestro rato para llevarlos adelante. Así que, por el momento, solo eso, iremos viendo qué hacemos de acuerdo con lo que nos depare el destino.

Freak es el primer tema del disco. El artista se identifica con el personaje

_¿Cómo aprendieron a llevar el tiempo a lo largo de todos estos años?

Somos amigos desde los 18 años. Yo voy a cumplir 57, son muchos años de amistad. Pasamos por todos los momentos que puede pasar un grupo, mucho cariño, algunas cuantas discusiones. Lo importante es que, con el tiempo, solo queda el cariño, la hermandad. Nuestra relación es de demasiada cercanía, la confianza es absoluta. Eso es lo más lindo que te puede pasar con compañeros con los cuales haces música.

_A eso se suma la satisfacción de tocar con los hijos…

Y bueno, es familia. Nadie mejor para demostrar ese sentimiento que los pibes, nuestros hijos, porque ellos vieron y vivieron todo desde que nacieron, los escenarios, los discos, las grabaciones, conocen todo. Además, son grandes músicos, nadie mejor que ellos para tocar en el grupo.

_¿Cómo es tu relación con Bolivia?

Es hermosa, cada vez que voy me sorprende y me encanta pasear y recorrer el país. Todas las ciudades me parecen hermosas. La última vez que estuve en Cochabamba pasé momentos increíbles. También cuando fuimos a La Paz y Santa Cruz. Paso grandes momentos allá.

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