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9 de enero de 2023, 7:00 AM
9 de enero de 2023, 7:00 AM

¡Que no les asombre la opresión del régimen masista!. Acciones como el secuestro del Gobernador de Santa Cruz, indebidamente perseguido e ilegalmente detenido por protestar contra el fraude en 2019, con vulneraciones oprobiosas al debido proceso, hoy atentando contra su derecho a la salud y la vida al negarle asistencia médica especial, han sido en múltiples casos actuaciones constantes desde hace 17 años. Por ello e independiente de que incidente, recurso, acción o presión social se interponga, debe quedar totalmente claro que mientras persista éste gobierno y su sistema judicial como brazo ejecutor, los que piensen diferente estarán destinados a un lamento sin fin, por la conculcación progresiva de sus derechos fundamentales.

En dicho sentido, el suplicio de soportar un régimen hegemónico, centralista y autoritario, ya en camino al totalitarismo, solo acabará cuando éste salga del poder y ello procede de acuerdo a ley con elecciones democráticas que así lo dispongan. Por su parte el régimen, está en clara campaña desde el primer día de su nuevo gobierno, mientras la oposición dispersa no pega una, ante la falta diagnóstico, plan, decisión y visión de unidad.

En ese contexto es necesario repetir lo expresado en anteriores columnas: ¡si no nos gusta que nos persigan, apaleen y encarcelen, hay que saber votar! Sí, los liderazgos de oposición (Mesa y Camacho) tenían la obligación lógica y moral de limar asperezas, conformar un frente único y fuerte en la elección de 2020, o en último caso tener la hidalguía de apartarse de la justa electoral y apoyar al mejor posicionado en tendencia de voto, como sucedió -aunque tarde- con la expresidenta-candidata Jeanine Añez. El no haber tenido la capacidad de dialogar para lograr acuerdos por el bien del país, es la principal causa de regreso del régimen conculcador de derechos; la otra fue que el electorado no comprendió nunca que esta vez podía, pero no debía ejercer el derecho de votar por su opción de preferencia y que había que aplicar el voto útil, el voto inteligente, apoyando al opositor mas votado para evitar la diferencia de 10% con el MAS. Que igual éste pudo haber obtenido el 50% y ser gobierno, puede ser, pero con un órgano legislativo mas equilibrado y la conciencia de haber hecho todo lo que estaba al alcance para tratar de cumplir el objetivo principal, ¡Que el MAS no regrese al gobierno por motivos obvios!.

Todavía se recuerdan frases como, ¡El MAS ya está disminuido, no hay porque tenerle miedo, o …si el MAS sube otra vez, Camacho lo vuelve a sacar… o que Mesa –el mejor ubicado- es lo mismo que Evo y el MAS!. Grave error de cálculo y subestimación a un monstruo herido pero poderoso, que salió del poder a renuncia de Evo M. solo porque Dios es grande; cada embestida actual a través del martillo judicial, hace recordar también la mejor propuesta a mi entender, respecto de nuestra queja por el judicial nauseabundo, cual era la transformación radical del sistema judicial en el programa electoral de C.C. y C. Mesa, precisamente para lograr su independencia real, institucionalización para garantizar el pacto social y desterrar la vulneración de derechos y supresión de garantías por parte de cualquier gobierno abusivo.

Educación cívico-política y electoral desde ya, es lo que hace falta, aquella que enseñe el ejercicio de la ética y servicio público, antes que mantener el poder y eliminar al contrario; la persecución seguirá como desde 2006 y los presos políticos quizá aumenten mas no disminuyan, pero en paralelo hay que aprender a elegir nuestras autoridades, a leer un poco las propuestas y despojarse de intereses mezquinos. Con el diagnóstico en mesa y consciente de los errores, solo queda la obligación ineludible de trabajar para cumplir el principal objetivo democrático ¡Que el régimen autoritario salga del poder el 2025!

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