La búsqueda de inversores y el reto a crecer son los principales desafíos de aquellos que buscan ser dueños de sus proyectos. Aún hay espacio para los emprendimientos tradicionales

27 de septiembre de 2022, 4:00 AM
27 de septiembre de 2022, 4:00 AM


Carismáticos, relajados, con un leguaje técnico y un celular como principal carta de presentación, los emprendedores Sub-40 (menores de 40 años) tienen en común que sus proyectos empresariales son de base tecnológica que germinaron para dar solución a problemas visibles en el mercado, la mayoría es para transporte.

Así, Alejandro Farías, coordinador del programa de aceleración en Innova UP by Cainco, remarcó que los empresarios Sub-40 siguen invirtiendo en áreas tradicionales y estables como: inmuebles, agroindustria, ganadería y alimentos.

 Sin embargo, dentro de sus inversiones están comenzando a destinar cierto capital enfocado en sectores de base tecnológica (startups) que implementan la tecnología para solucionar problemas de la sociedad de forma rápida y con escalabilidad (un anglicismo que describe la capacidad de un negocio o sistema de crecer en magnitud) en ese contexto los sectores donde surgen son delivery, market places, e-commerce y Fintech SaaS (financieras digitales).

En esta línea, María René Méndez y Pedro Viera, fundadores de Hola Tractor, una app que permite al productor desde su smartphone saber quién vende o alquila maquinaria agrícola, consideran que se puede ahorrar tiempo y dinero al productor, ya que tiene la posibilidad de contar con información actualizada y precisa.

“Unos 9.000 agricultores están usando nuestra aplicación creada en 2021. Debido a su solidez, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola nos está otorgando un importante financiamiento que nos permitirá seguir creciendo y dar el siguiente paso”, explicó Viera.

Tu pasaje es otra app que permite comprar el pasaje de bus interdepartamental desde el celular, es otro de los emprendimientos con base tecnológica que ahorra tiempop y dinero. Se evita ir a la terminal. A este se suma tuGerente.com, otra aplicación que permite saber cómo se están manejando las finanzas de su empresa.

Recibeme.com es otra app con foco en transporte que oferta de forma integral almacenaje, empaque, inventario y pago.

En este escenario, Víctor López, CEO fundador de SOS Agro, una aplicación que permite al productor desarrollar una agricultura de precisión, explicó que esta startup surge para dar una solución a los problemas de humedad del suelo, estrés hídrico, malezas, rendimiento potencial o daños por incendio. La app SOS Agro -mediante un monitoreo satelital- permite al productor tener un mejor control de sus cultivos y anticiparse a las posibles contingencias climáticas o de plagas que pueda sufrir su sembradío.

Ante la consulta sobre cuáles son los inconvenientes que con más frecuencia deben hacer frente a la hora de seguir con sus emprendimientos tecnológicos, los entrevistados se encogen de hombros y focalizan dos agujeros negros que constantemente deben evitar para no ser ‘tragados’. La falta de inversores y lo traumático que resulta crecer.

Viera precisó que todas las startups -en mayor o menor medida- en algún momento de su desarrollo enfrentan la falta de dinero, de inversores, de personas que crean en el proyecto.

Si no es eso, la posibilidad de crecer muchas veces se torna en una labor titánica, ya que de por sí el mercado boliviano es limitado, por lo que la mirada debe girar al exterior y ahí la competencia es devastadora e intimidante. 

Ronald Amelunge, presidente de Juventud Empresa, remarcó que a pesar de la gran informalidad en la economía nacional entre 2021 y lo que va de 2022 se ha registrado un incremento del 12% de startups formalmente establecidas en el país. Dicho porcentaje sube al 20% en Santa Cruz, aspecto que para Amelunge muestra el dinamismo cruceño.

El dirigente reconoce que el tema del financiamiento y el tamaño del mercado son temas que juegan en contra de los emprendimientos, pero considera que a pesar de esas trabas hay profesionales bolivianos que apuestan por empresas con base tecnológica porque buscan optimizar sus resultados para seguir en carrera y no salir del negocio ante los primeros inconvenientes.

Apuestas tradicionales

A pesar de la presencia cada vez más firme de lo tecnológico, todavía hay lugar para los emprendimientos tradicionales.
Aquellos que están relacionados con la oferta de alimentos, ropa, servicios de limpieza, comercio y artesanías.

Lucas Prado y Nicol Ruiz son la cara visible de BIF, un emprendimiento que lleva ya cinco años en el mercado y que a pesar de los vaivenes económicos sigue vigente. Prado destaca que BIF es una oportunidad para rescatar y promocionar las tradiciones bolivianas. En este caso, ofertan bocaditos como un masaco mix de yuca y plátano o charque crocante de res y cerdo en envases que cuestan desde Bs 10.

Desde Cochabamba, el emprendimiento Eco Valle apuesta por el ajo negro, en sus variedades de mermelada y mantequilla. Antonio Ger, que continúa la tradición familiar, sostuvo que la carencia de insumos, como envases, es uno de los puntos con los que debe lidiar, pero que a pes
ar de aquello ya llevan cinco años ofreciendo su productos y yendo contra la corriente.