Triple asesinato de policías: Fiscalía salva a Muñoz, a un abogado y a guardaespaldas
El mayor Muñoz, ahora sobreseído, fue galardonado por el Ministerio de Gobierno por captura de Nallar antes de saberse que éste se entregó. A casi un año del asesinato de los tres uniformados, apenas hay avances investigativos
El proceso por el triple asesinato de policías en Porongo da un giro sorprendente. La Fiscalía dictó sobreseimiento definitivo en favor del mayor Julio Álvaro Muñoz Mejía, de un abogado y de un ciudadano colombiano señalado como guardaespaldas y presunto sicario. Los hechos ocurrieron el 21 de junio de 2022, y cerca de completarse el primer año, no se observan avances significativos en la investigación
La resolución conclusiva de sobreseimiento tiene la firma de los fiscales de la comisión integrada por marcos Arce y Alejandro Justiniano.
El fundamento principal para que los tres personajes sean separados del proceso argumenta la falta de pruebas fehacientes para que sean llevados a juicio por delito de asesinato de los policías, Eustaquio Olano, Alfonso Chávez Flores y el voluntario del Gacip José David Candia.
El fallo de la Fiscalía fue emitido el 4 de este mes, un día antes de que la misma comisión fiscal presentara acusación formal para juicio oral contra el principal implicado, Misael Nallar, y otras tres personas.
Los sobreseídos por la Fiscalía, el ex jefe del Grupo de Inteligencia y Operaciones Especiales (GIOE) de Santa Cruz, mayor Álvaro Muñoz, el abogado Rodrigo Gonzales Arrázola y el colombiano Esteban Beltrán Muñoz, estaban siendo inicialmente procesados por asesinato en base a investigaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) y la Fiscalía.
El mayor Muñoz fue imputado inicialmente tras la declaración de un testigo protegido, que en esa oportunidad dijo: “El día del hecho, cuando llegué junto al grupo de la caravana, al taller Team 777, al ingresar pude ver que esta persona que me muestran en la fotografía, que es el mayor Muñoz, estaba presente en compañía de Misael Nallar; también estaba el jefe, ‘Flaco’, y sus amigos. Estuvo presente cuando vi que ya estaban dentro del taller Team 777 las armas, chalecos, poleras y gorras con las insignias de la Policía. Lo vi al mayor Muñoz que andaba con el celular en la mano como si estuviera llamando a otra persona. La última vez que lo vi fue cuando todos habían salido del taller con las armas de fuego en una vagoneta y una motocicleta”.
Muñoz recibió el galardón a la excelencia de manos del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo y del comandante general, Jhonny Aguilera. Fue el 28 de junio de 2022 en el 196 aniversario de la Policía. La distinción destacaba su participación en la captura de Misael Nallar, tras el asesinato de los policías. En su declaración en cámara gesell, Muñoz, sacó su celular y llamó a altas autoridades del Gobierno y advirtió que, si pisaba la cárcel, hablaría todo.
Sin embargo, luego declararon al menos 10 testigos protegidos, entre ellos un teniente que era jefe de seguridad del puesto policial del Urubó, quien acudió al auxilio de sus camaradas y vio cómo eran sometidos. El teniente aseguró no haber visto a Muñoz, tampoco al abogado Rodrigo Gonzales, que se defiende en libertad y al colombiano Esteban Beltrán que está preso en la cárcel El Abra de Cochabamba.
La Fiscalía concluye que los testigos vieron a las personas que prepararon y reunieron los medios para cometer el hecho delictivo, empero no existe referencia alguna respecto a la participación de Rodrigo Gonzales, Esteban Beltrán y del mayor Álvaro Muñoz. “Contra Rodrigo Gonzales y Esteban Beltrán solo existe un informe pericial orientativo que refiere que tienen nitritos en sus manos, haciendo inferir que supuestamente dispararon armas de fuego. Este único indicio que solo es orientativo decae ante la fuerza de las declaraciones de testigos”, dice el documento.
Acusación a Nallar y otros tres
Ayer, la Fiscalía presentó acusación para juicio oral por delito de asesinato contra Misael Nallar, preso en Chonchocoro, su hermano Widen Nallar Noda, retenido en Palmasola, al igual que Jassir Góngora Montero, mientras que un cuarto imputado, Édgar Dorado Menacho, alias Jefe, está prófugo. La Fiscalía presentó pruebas documentales, testificales, periciales y visuales y pide 30 años de cárcel al considerar que existen fehacientes elementos para que la justicia dicte sentencia condenatoria de 30 años de cárcel.
