Policías de base ven que el mayor Muñoz incurrió en una traición fatal contra sus camaradas y no merece estar ni un día más en la institución. El Comando General, el departamental, la Felcn y la Felcc se excusan y prefieren guardar silencio

18 de agosto de 2022, 7:24 AM
18 de agosto de 2022, 7:24 AM


Después de las investigaciones realizadas sobre el mayor Álvaro Julio Muñoz Mejía, que en su condición de jefe del Grupo de Inteligencia y Operaciones Especiales, GIOE, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico, (Felcn), dan cuenta que avaló y fue cómplice del asesinato de sus tres camaradas en la zona de Porongo, voces de la tropa policial de Santa Cruz, consideran que ya de forma inmediata debió ser dado de baja con ignominia de la institución del orden.

Tras la reacción de la guarnición policial, trasladamos el pedido a la alta cúpula de la Policía, pero los jefes optaron por el silencio.

En recorrido por las principales unidades operativas y de investigaciones de nuestra capital, policías que prefirieron guardar en reservas sus nombres, coinciden en que según las propias investigaciones de la Policía y de la Fiscalía, el mayor Muñoz estuvo en el Urubó junto a los asesinos, presenció la entrega de las armas, de los chalecos, de las gorras con distintivos de la Felcn.

Además, el mayor Muñoz fue quien en la localidad de Los Troncos, recibió al principal acusado por las muertes, Misael Nallar, en una entrega pactada, pese a que inicialmente se hizo creer que fue capturado.

Policías de la Felcn calificaron el hecho de traición fatal con sus compañeros. “Esto es increíble, este mayor ya debió ser dado de baja con ignominia, no sé qué pasa con los jefes, el alto mando policial”, dijo un agente.

En Tránsito, en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), en el Comando Departamental, además de personal de la tropa en los barrios en las estaciones policiales ven que la conducta del mayor raya en el delito. “Esperamos una mala acción en el cumplimiento de nuestro deber de cualquier persona de afuera, pero jamás de nuestra propia institución, como ocurrió con el mayor Muñoz”, dijo otro policía.

Los cuestionamientos surgen con más fuerza al recordar que el mayor Muñoz, para el día de la celebración de un aniversario más de la Policía, fue condecorado por el excomandante Johnny Aguilera y el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo con la distinción a la excelencia por la supuesta captura de Misael Nallar.

La semana pasada, Muñoz Mejía fue aprehendido e imputado como cómplice del triple asesinato, pero la justicia lo dejó libre con medidas sustitutivas.

Altos jefes se excusan y callan

Trasladamos el pedido de la tropa policial al comandante nacional de la Policía, general Orlando Ponce. Se excusó y nos delegó con el comandante departamental, coronel Jhonny Omar Chávez Bascopé. Sin embargo éste derivó la pregunta al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el crimen (Felcc), coronel Julio César Cossio.

El director de la Felcc, manifestó que no le corresponde opinar del tema y que en todo caso es la Fiscalía Policial, la Dirección de Investigaciones Policiales (Didipi) los que tienen la palabra. También se buscó la versión del director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), coronel José Illanes. Su Departamento de Relaciones Públicas informó que tampoco le corresponde opinar del tema.

Nallar se queda en La Paz

Misael Nallar, casado con la hija de Jesús Einar Lima Lobo, preso en Brasil por narcotráfico, a través de su defensor, el exfiscal Jorge Tamayo, pidió el traslado de la cárcel del penal de Chonchocoro a la cárcel de Palmasola de Santa Cruz. Sin embargo la sala penal del vocal Evert Álvarez declaró improcedente, por lo que Nallar tendrá que continuar preso en La Paz.

Su defensa argumentó que Nallar tiene la salud afectada por una taquicardia. Tras la valoración, el vocal negó el pedido y ratificó el fallo del juez de La Guardia, Rodrigo Vedia. Además se observó que Nallar no presentó ninguna certificación forense y que existen dos informes valorados por el juez Rodrigo Vedia de que Nallar goza de buena salud.

Desde ayer las víctimas son representadas por la abogada Jessica Echeverría y Juan Pablo Ibáñez, que tomaron la defensa de los familiares del joven del Gacip, José David Candia Orozco, que junto a los policías Eustaquio Olano y Alfonso Chávez Flores, fueron asesinados el 21 de junio en el camino a El Cuchi jurisdicción de Porongo.

Permanecen detenidos por el asesinato de los policías, Misael Nallar, el abogado Rodrigo Gonzales en Palmasola de Santa Cruz y el colombiano Esteban Beltrán Muñoz, en El Abra de Cochabamba.