Una Mina de alegría

El ecuatoriano Kevin Mina volvió con todo. Hizo dos goles y un show al momento de celebrarlos, ante una hinchada que festeja las ocurrencias del histriónico atacante.

Acabó siendo importante en la victoria de Guabirá ante Nacional Potosí, por 3 a 2, ayer por la tarde en el Gilberto Parada de Montero.

Al parecer, al polémico atacante le sentó bien el tirón de orejas que le hizo Víctor Hugo Antelo en la semana, al mandarlo a entrenar en la Reserva del club, por un acto de indisciplina.

El ecuatoriano regresó como si nada hubiese sucedido. Con el aplomo y alegría habituales, convirtió el segundo y el tercero de los azucareros, asegurando una victoria que se le había complicado porque Nacional logró el empate transitorio tras el primer gol anotado por Juan Vogliotti en el primer cuarto de hora.

Vogliotti empujó una pelota que quedó sobre la línea tras un centro de Gustavo Peredo que despejó defectuosamente el zaguero Rodrigo Cabrera. A los 15 minutos inclinaba el partido a su lado, pero luego no aprovechó un par de ocasiones, se dejó estar en defensa, y sufrió en el arco propio.

El rápido Ronald Cuéllar explotó al máximo un descuido defensivo de los Rojos a seis minutos del descanso, por el sector izquierdo, y definió bien con la zurda ante la salida del golero Saidt Mustafá.

Tucho Antelo le dio una oportunidad a Mina en el segundo tiempo y el ecuatoriano no le falló. Primero aprovechó al máximo una pelota que bajó en el área, de cabeza, ‘Chicho’ Vogliotti, y convirtió ante la salida apresurada del golero Roberto Rivas.

A los 72 minutos, Guabirá volvía a ponerse adelante en el marcador porque, once minutos más tarde, Mina nuevamente sacó ventaja en el área de los potosinos, aprovechando un rebote que dio el arquero ante un remate de Vogliotti.

Esta vez no le dio chances a Nacional que le empareje el resultado pese a que acortó distancias dos minutos después del segundo tanto de Mina, con un cabezazo de Mancilla.

Guabirá volvió a la victoria tras la dura caída ante Real Santa Cruz. Entre Mina y Vogliotti se encargaron de que el Rojo se afirme en el séptimo lugar y se ponga a solo un punto de Oriente Petrolero.