Junto a la capacidad argumentativa, el debate desarrolla actitudes como el respeto, la tolerancia y la escucha activa

8 de mayo de 2023, 11:00 AM
8 de mayo de 2023, 11:00 AM

La educación del siglo XXI busca aprendizajes renovadores en profundidad. La pedagogía apuesta por las habilidades blandas como preparación para una adecuada convivencia en democracia. Una de las herramientas educativas de aprendizaje para llegar profundizar el respeto consiste en el debate. Normalmente, se acompaña de la reflexión acerca de distintas temáticas, la participación activa, la tolerancia al disenso, la empatía, la escucha al otro y la contraposición de ideas con argumentos sólidos..

Saber debatir, argumentar ideas y ser persuasivos con el mensaje que se quiere transmitir son desafíos del estudiante. Además, supone una habilidad para enfrentar el mundo profesional. El debate ha demostrado ser una herramienta eficaz en la educación.

Zulma Aliaga, docente de la carrera de Derecho e integrante del área de Jefatura de Enseñanza Aprendizaje (JEA), en la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, resalta la dimensión técnica del debate. Según la especialista, ayuda a los estudiantes a analizar, investigar y presentar argumentos convincentes.

“Normalmente en un debate no gana el que haga mejor la investigación, sino el que defienda mejor los argumentos”, apunta.

La técnica

El debate se puede plantear entre dos personas o entre dos grupos. Se necesitan posiciones contrapuestas, explica la docente. La conformación de los grupos responde a criterios de afinidad o de posiciones respecto al tema elegido. 

El tema propuesto despierta el interés de los estudiantes. Por sí mismo, es un detonante para la investigación y preparación de los argumentos.

Además, el mentor debe establecer las preguntas base y brindar la misma información y los materiales de apoyo a los bandos opuestos.

Durante el debate, el docente es guía, mediador y dirige la participación. Ofrece la palabra a todos para que participen de forma equitativa, enfatiza la docente de Derecho.

Los beneficios

“Se desarrollan muchas competencias en el estudiante, como la capacidad de expresión oral, de análisis, síntesis de sus propios conocimientos y exposición, la capacidad de escucha. Es una de las técnicas que permite mayor desarrollo de la comunicación asertiva”, indica Aliaga.

Y añade otras habilidades como el trabajo en equipo, el trabajo de forma colectiva y colaborativa. "Desde la investigación unen argumentos para defenderlos de forma grupal”, complementa.

Motiva el desarrollo de algunos valores, como el respeto, la lealtad y, principalmente, el pensamiento crítico. Su aplicación se adecúa a diversas carreras.