¿Cómo cumplir las metas del nuevo año?

Comienza el nuevo año y nos enfocamos, al menos en los primeros días, en trazar las metas para el recién iniciado año. Algunos las escriben en un cuaderno o diario, creen que ese gesto es más comprometedor. Otros optan por comentar con sus familiares las metas, a fin de recibir el respaldo de estos.

En Educación y Sociedad entrevistamos al decano de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, Alejandro Velarde, para que ayude a los lectores a trazar adecuadamente estas metas. Con su formación de psicólogo, marca con claridad el punto de partida. “Antes de iniciar, es necesario partir de una reflexión”, señala.

¿Cómo guiar esa reflexión? Velarde responden la pregunta y apela a las enseñanzas del filósofo Friedrich Nietzsche. Parafraseando al pensador alemán, Alejandro propone “si pudieras volver a vivir tu vida hasta hoy, ¿harías exactamente lo que has hecho?”.

Si la respuesta final resulta afirmativa, Velarde entiende que es sinónimo de “estar encaminado a la felicidad”. Aunque también es consciente de que no todos obtendrían una respuesta positiva a la pregunta.

Por ello, para que las metas trazadas ‘lleguen a buen puerto’, el psicólogo propone “fraccionar nuestras metas en objetivos alcanzables”. Matiza, eso sí, que estos objetivos se deben plantear desde una perspectiva realizable y no hipotética.

“Se trata de reconocer el gran éxito. Pero tener en cuenta que existen pequeños éxitos que sumados dan lugar a ese gran éxito”, justifica.

Para acompañar más el proceso de planificación de objetivos, el decano de humanidades de la UAGRM sugiere varias áreas del desarrollo personal para considerarse: laboral, económico, familiar, interpersonal, amistades, ocio y descanso.

Nuevamente, recurre a una pregunta para orientar al lector. “¿Qué estamos haciendo para desarrollar cada una de estas áreas?”. Es por demás que cada persona tendrá sus respuestas propias. Aunque más frecuente resulta encontrar a otras que no logran encaminar sus metas.

“Se puede insistir un par de veces, en la medida de lo racional. Pero si no hay resultados, hay que probar algo diferente”, aconseja Velarde.

Finalmente, el psicólogo propone no desfallecer en el propósito y tener la paciencia para adaptarse a las diversas circunstancias. La reacción natural ante un objetivo truncado conduce a la frustración. Velarde recuerda la importancia de saber controlar las reacciones de ansiedad e incertidumbre. Mucho más cuando las dificultades para avanzar sobre esas metas tienen un origen externo.

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